Español
Gamereactor
análisis
Wolfenstein: The Old Blood

Análisis de Wolfenstein: The Old Blood

Y es que uno nunca se cansa de matar nazis.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio
HQ

The New Order da paso a The Old Blood como segundo título de la saga Wolfenstein de Machine Games. Se trata de una expansión autónoma cuya trama se desarrolla como precuela a los acontecimientos del juego principal, aunque esta vez de una forma un poco más tradicional: el estilo retro scifi del anterior título se ve sustituido por un regreso a la parafernalia ocultista tradicional en esta serie de shooters en primera persona.

The Old Blood es autojugable, y por los 19,99 euros que cuesta (o menos si te buscas un poco la vida para PC) ofrece sus buenas seis horas de campaña en modo historia. Lo cierto es que no cunde tanto como The New Order, pero era de esperar visto ese precio de lanzamiento tan económico. Con todo, por el precio de una entrada de cine y unas palomitas tenemos una campaña de ocho capítulos (y un poquito) llena de armas enormes y sangre a borbotones.

Como a su predecesor, le falta un poco de coherencia desde el punto de vista del tono que marca la saga; y, de todas todas, seguimos prefiriendo la historia de The New Order. En la primera mitad del juego hay que ir con sigilo por distintos entornos y hablar con guardias; y luego, cuando la mierda alcanza el ventilador, hay que ir matando a todo lo que se mueve. La segunda mitad del juego va más en plan shooter de zombis, el juego gana un poco de ritmo y los matices se van a tomar viento.

La que destaca de verdad es la primera mitad, que retoma la saga justo donde la había dejado The New Order: el enfoque que Machine Games le da a Wolfenstein va tanto de sigilo como de tiros, y los cuatro primeros capítulos de The Old Blood mantienen esa mezcla de asesinatos arteros y tiroteos brutales. Una vez más, nos encontraremos con oficiales a los que hay que liquidar sin que salten las alarmas. Si te pillan en un momento dado y no consigues reaccionar a tiempo, una oleada de enemigos se lanzará sobre tu posición y te freirá a balazos (y, si el nivel de dificultad es alto, también a granadazos).

Publicidad:

Una vez más, la IA de los enemigos no es como para ir y contarlo, y pasan de largo ante sus camaradas caídos sin siquiera pestañear al ver los cadáveres calientes de unos soldados con los que estaban charlando hace un rato. Esto implica que la acción tiene un feeling poco realista en ciertos momentos, pero es lo de menos si tenemos en cuenta que los asesinatos sigilosos son siniestramente entretenidos, que los silenciosos cuchillos arrojadizos son supersatisfactorios y que, cuando algo va mal y hay que batirse el cobre de verdad, los tiros son geniales.

Y los tiros son tan geniales sobre todo porque las armas de Wolfenstein lo petan. Son unos mamotretos, pero está bien que sean así de tochas; los fierros pueden ocupar la mitad de la pantalla si llevas un arma en cada mano, e incluso si solo tiras con una dan sensación de solidez. Y, cada vez que aprietas el gatillo, se nota la energía cinética. Está claro que a los de Machine Games les encantan las armas, hasta el punto de que el juego tiene animaciones en las que nuestro valiente héroe, B. J. Blazkowicz le quita el polvo a la herramienta.

The Old Blood nos ofrece un arsenal más limitado, y el menú radial que se emplea para seleccionar el arma puede darnos algunos quebraderos de cabeza, pero el combate iba bien en The New Order y vuelve a ir bien en este nuevo título. Lo que ya no va tan bien son los combates con los jefes; y, aunque el jefe final del último juego de la saga sigue ostentando el título de peñazo máximo, en este vamos a encontrarnos con un par de jefes muy poco satisfactorios.

La historia sigue una línea similar en esta expansión: es funcional y conduce muy bien la acción, pero se lleva un cero en originalidad. El doblaje es muy sólido y nos vamos a encontrar con personajes bastante divertidos, lo que sin duda alegra un poco el viaje; y, dado que la campaña es relativamente breve, ya es más que suficiente, aunque ni sorprende ni deslumbra.

Publicidad:

Tres cuartos de lo mismo pasa con los gráficos: se mantiene la estética del primer juego hasta cierto punto. Hay unos entornos bastante interesantes para explorar, y algunas fases son sorprendentemente grandes. En concreto, el Castillo de Wolfenstein está muy bien decorado, con unas tumbas que ponen los pelos de punta y unos pasillos verdaderamente claustrofóbicos.

Se ha añadido un modo de ataque por puntos bastante sólido que le da mucha más enjundia al título y le aporta una longevidad que no le viene nada mal. Puedes volver a jugar tus partes preferidas de la campaña para reintentarlas mezclando sigilo y fuerza bruta y sumar más puntos en una loca carrera contra el reloj.

La primera mitad del juego es la mejor de las dos. Hay un par de combates con jefes hacia el final del capítulo cuatro, y la cosa cambia bastante después de ellos, sobre todo porque las partes en las que el sigilo importa son cada vez menos y están cada vez más espaciadas. El juego es auténticamente impresionante cuando no dejas de buscar coberturas, lanzas cuchillos arrojadizos y te cargas a enemigos despistados con puñaladas traperas; pero, cuando aparecen los zombis, nos podemos olvidar de esa clase de detalles y todo se vuelve un poco más machacón. Habrá a quien le guste ese cambio de ritmo, pero nosotros preferiríamos un poco más de sigilo y menos freír zombis en la segunda parte del juego.

Por suerte, el factor zombi deja de predominar hacia el final, y todavía tenemos muchos motivos para seguir adelante hasta el desenlace del juego. The Old Blood nos ofrece el mismo tipo de combate visceral que su predecesor y una experiencia igual de satisfactoria; no obstante, también podríamos decir que hay demasiadas similitudes entre ambos, y que no amplía los éxitos cosechados con el reboot del año pasado, sino que se limita a dar un cambio de imagen al mismo juego sin ofrecer el mismo nivel de variedad. Si tenemos que elegir, nos quedamos con el original; pero seguimos recomendándolo igualmente: si te gustó The New Order, te va a gustar esta nueva expansión.

Wolfenstein: The Old BloodWolfenstein: The Old BloodWolfenstein: The Old BloodWolfenstein: The Old Blood
07 Gamereactor España
7 / 10
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

Contenido relacionado



Cargando más contenido