Análisis de Wreckateer

El nuevo juego lanzado hoy en XBLA te pone a demoler castillos infestados de goblins mediante el cauteloso empleo de un tirachinas descomunal. Hay diversos tipos de disparo, y te otorgan más puntos si haces un uso efectivo de tu arma.

En un mundo de fantasía que parece un Fable con unas cuantas ramas arrancadas, las fortificaciones requieren de disparos certeros y hábiles para que sus torres se vengan abajo, pero el éxito depende de aprovechar la munición especial cuando es debido.

Los especiales siempre se activan con el mismo movimiento de brazo después de tirar (prepárate para hacer músculos). El Split Shot, por ejemplo, se divide en cuatro, conectado con bandas elásticas cuya distancia y ángulo depende de la posición de tus manos. Los power-ups y bonus están esparcidos entre tú y los castillos, dejándote la posibilidad de realizar disparos más complicados para obtener mejor recompensa.

La orgía de destrucción es realmente divertida, pero Wreckateer aguantaría en pie o se vendría abajo en el sentido más estricto de la palabra según la implementación del control por movimiento. Pero el equipo de Iron Galaxy Studios ha hecho los deberes. Es una pena que tanto tiempo después del lanzamiento de Kinect los menús bien hechos sean la excepción, y este juego es una de esas sorpresas. No hay que esperar sin moverse para activar los botones: un movimiento de barrido con un brazo selecciona la opción deseada.

La facilidad de uso continua a la hora de disparar la ballesta. Dos medios anillos iluminados bajo los pies de tu Avatar indican las zonas donde hay que andar para coger el disparo (paso al frente, manos juntas), así como lo que puedes tirar y el ángulo (paso atrás y hacia uno de los lados con los brazos pegados, luego deslízalos hacia un lado). Es algo sencillo y no hay disparos por accidente con esta técnica.

Los desarrolladores del juego te mantienen apuntando a lo que quieras mediante un brillo constante en pantalla, de modo que cuentas con una referencia aproximada incluso con los tiros más complicados. El control de los tiros especiales, aunque hay que exagerar los gestos, funciona muy bien y demuestra lo preciso que puede llegar a ser el Kinect.

El juego aporta unos cuantos desafíos adicionales. No estamos muy de acuerdo con la implementación de los Avatar Fame Stars (logros enlazados con tu Avatar de XBL y liberados mediante objetivos in-game), sobre todo por lo que tienes que soportar. ¿Tener que disfrazar a tu Avatar para que te den el premio? Vale, pero eso significa tener que salir a la interfaz Xbox, entrar en la personalización, volver a arrancar el juego. Ridículo.

Wreckateer es un jueguecillo divertido. Se habría agradecido un derrumbamiento más espectacular de las torres cuando se vienen abajo, podrían haber dejado unos multiplicadores de puntuación en último momento si caían en edificios colindantes. Conforme está, tienen a romperse hacia dentro. Y aunque hay algo de estrategia en tirar las fortificaciones de cada nivel, sigue siendo demasiado superficial. Un estilo más táctico habría aportado una gran profundidad a esta propuesta.