Análisis de Midway Arcade Origins

Tenía siete u ocho años cuando jugué por primera vez a Xenophobe. Venía del mundo de Nintendo, así que estaba acostumbrado a personajes coloridos, mundos encantados y una sensación general de desenfado. Recuerdo que uno de los personajes disponibles era una especie de hombre-pato con cabeza azul, y me pareció gracioso. Mas el resto del juego fue una auténtica pesadilla: yo solito me tenía que enfrentar a decenas de monstruos letales en bases espaciales completamente invadidas por la amenaza alienígena.

El diseño de los niveles era complicado de digerir: muchas bases formaban en realidad un laberinto, con salas estériles prácticamente idénticas. Las puertas se abrían solas, y a menudo aparecía un nuevo monstruo dispuesto a matarme. Además, había un temporizador de autodestrucción que me obligaba a limpiar el nivel en un tiempo excesivamente reducido. Y solo tenía una vida.

Pese a todo, recuerdo que exprimí aquel Xenophobe. Pasé días enteros, hasta marearme a causa de una música electrónica en 8-bit construida con frases en menor particularmente inquietantes. Era pequeño, y el juego me daba un miedo de muerte.

He decidido hablar de Midway Arcade Origins contando mi historia personal, pues esta colección de más de 30 juegos clásicos producida por Warner Bros. No es más que un chapuzón en los recuerdos. No creo que sea posible (ni necesario) describir cada juego en detalle, ya que se trata de clásicos de antaño difícilmente valorables después de más de dos décadas. Sin embargo, muchos de estos juegos son capaces de tocar una tecla de nuestros cerebros, despertando sensaciones olvidadas. Este es el verdadero valor del paquete, y para muchos jugadores de la vieja escuela, debería ser suficiente.

Aun así, ceñirse a las memorias suele ser un arma de doble filo. Al tiempo que el juego va llamando a los recuerdos de nuestro pasado, es difícil volver a las mismas emociones que percibimos de niños. En aquella época todo parecía mágico, y los juegos siempre llamaban nuestra atención a pesar de su sencillez gráfica o su sistema de juego extremadamente difícil o complicado de manejar.

Lo que sí creo es que Midway Arcade Origins es una colección capaz de interceptar los gustos trasversales. A quien amaba los juegos de carreras puede disfrutar de juegos de carreras de vista cenital como Spy Hunter o Super Sprint. Los fanáticos de los puzles pasarán buenos momentos con Root Beer Tapper o Marble Madness. Los tipos más duros se divertirán con Total Carnage o el citado Xenophobe.

Sin embargo, queda una pregunta: ¿conseguimos así despertar los viejos sentimientos? En mi opinión, la respuesta es no, incluso adorando cada género. En primer lugar, todo esto carece de la magia de los salones recreativos y sus cabinas de juego. Spy Hunter, por ejemplo, estaba montado con un volante y una caja de cambios de dos velocidades. Por mucho que los desarrolladores de esta adaptación hayan tratado de convertir los controles, la sensación con un mando en las manos nunca se puede acercar a la de aquellos trastos.

Al mismo tiempo, a pesar de la conversión de cada juego a definiciones HD y la posibilidad de activar un filtro ‘anti-aliasing' desde el menú, la disposición en pantalla partida de casi todos los juegos reduce la porción visible de una manera casi dramática, llegando a dejar la sensación de estar delante de un emulador, y no de una adaptación moderna de clásicos de antes.

Finalmente, el paquete es demasiado escaso. Y dedica poco a la historia de cada una de estas joyas: las noticias relativas a los títulos aparecen de forma aleatoria en el menú de pausa, demasiado poco para los curiosos o historiadores del sector. La incorporación de multijugador online con clasificaciones y todo, por el contrario, es ciertamente una novedad bienvenida, si bien la mejor experiencia siempre será jugando en la misma consola.

Midway Arcade Origins es un juego cuyo valor depende en gran parte de las experiencias personales. Y quizás demasiado de la nostalgia, porque no hace un esfuerzo notorio para captar a jugadores más jóvenes y acercarlos a la gloriosa historia de los juegos arcade, ni para proporcionar datos interesantes para los que, de pequeños, creíamos que eran mágicos. Es como ver una vieja e inmortal película muda sin un experto que te ayude a ponerte en situación: por mucho que sea una obra maestra o un clásico, te aburres. Y es una verdadera lástima. Afortunadamente, un precio bastante reducido (por debajo de los 20 euros) permite perdonar muchas de las pegas que le hemos puesto. Pero recuerda que el paquete en su conjunto no es más que un recuerdo del pasado. Sin infamia ni alabanzas.

A continuación, la lista de juegos clásicos incluidos en esta selección:

Joust
Defender
Gauntlet
Rampage
Total Carnage
720°
A.P.B.
Arch Rivals
Bubbles
Championship Sprint
Tournament Cyberball 2072
Defender II
Gauntlet II
Joust 2
Marble Madness
Pit-Fighter
Rampart
Robotron 2084
Root Beer Tapper
Satan's Hollow
Sinistar
Smash TV
Spy Hunter
Spy Hunter II
Super Off Road
Super Sprint
Toobin'
Vindicators Part II
Wizard of Wor
Xenophobe
Xybots