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PlayStation All-Stars Battle Royale

Análisis de Playstation All-Stars Battle Royale

Hay copias buenas y copias malas. Geniales inspiraciones y burdas imitaciones. Decentes reflejos y clones bochornosos. Veamos en qué categoría cae finalmente Battle Royale...

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Super Smash Bros. Tengo que quitármelo de en medio antes que nada, porque esa comparación ha centrado cada debate sobre este juego desde que se anunció. Playstation All-Stars Battle Royale se parece tanto al original de Nintendo que es lo primero que menciona el párrafo dedicado en Wikipedia a su jugabilidad. Y es fácil ver por qué. En esencia, el juego sustituye los personajes de Nintendo con personajes sacados de diversos éxitos PlayStation, además de un puñado de invitados estrella. También han modificado un poco las reglas, pero en líneas generales ofrece la misma experiencia y llega a parecer una copia descarada.

Dicho esto, ya podemos centrarnos en lo que no debería avergonzar a Sony, y eso es el factor diversión. En sus mejores momentos, Playstation All-Stars Battle Royale sabe entretener con una frenética oferta del género "party fighting". Y pasando de si es una copia o no, ese es el factor más importante en cualquier ecuación jugable.

PlayStation All-Stars Battle Royale

Nada más comenzar recibes una breve introducción sobre las bases. Cosa fácil: cuentas con tres ataques diferentes a tu disposición que puedes realizar en cualquier dirección. Puedes bloquear, usar el stick derecho para agarrar o realizar súper-ataques con los botones traseros una vez se ha llenado la barra.

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No hace falta más información. Cojo a Fat Princess y me dispongo a darle de tortas al engreído de Nathan Drake, al marchoso Parappa the Rapper y al duro y letal Heihachi Mishima, de Tekken. Todo esto, en un nivel sacado de la serie Killzone. Al instante me impresiona lo bien que se ve el juego.

PlayStation All-Stars Battle Royale

He estado jugando a Playstation All-Stars Battle Royale principalmente en PS Vita, e incluso en su pantalla pequeña puedes ver lo increíblemente detallados que son los personajes y los decorados, así como el esfuerzo que se ha invertido en este producto de completo 'fan service'. Durante el combate de ida y vuelta, el escenario va cambiando poco a poco. De pelear a puñetazo limpio en pleno vuelo a luchar en el suelo firme, para luego ver cómo todo se convierte en un mundo Ape Escape en el que los simios sobrevuelan la escena.

Es sorprendente, y como puedes reconocer la multitud de guiños y todos los momentos gloriosos a los que se refieren, sirve para recordar que Sony lleva casi dos décadas en el negocio de las consolas.

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Vale, es cierto que le falta la presencia de las estrellas de Nintendo. Nathan Drake no le llega a la suela a Link, Donkey Kong hace sombra a Parappa, Kratos es un completo desconocido al lado de Mario y cierto coronel Helghast no tiene nada que hacer al lado del carismático Fox McCloud, pero esto casi lo hace más especial, según se mire.

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Porque te das cuenta de lo que reciben los fans de Nintendo con Smash Bros. Te sientes más especial si eres un jugador de PlayStation de toda la vida, porque reconoces a todos los personajes.

Y mientras que Super Smash Bros. está más enfocado a ofrecer algo para todos los gustos, este juego está más dirigido a los jugadores más mayores y entusiastas. No es que sea demasiado violento ni nada de eso, pero agarrar un sable con la amazona Nariko de Heavenly Sword y su aspecto realista, para pegarle un tajo al chulete de Dante de DMC Devil May Cry, no resulta tan alegre y desenfadado como la experiencia Super Smash Bros.

El hecho de que destruyas de verdad a tus enemigos en Playstation All-Stars Battle Royale, en lugar de empujarlos fuera del nivel, también pone de su parte. Golpear a tus oponentes va rellenando la barra de súper, pues solo puedes puntuar con un súper-ataque. Y cuando lo activas, la idea es eliminar al máximo número posible de contrincantes.

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La barra de súper puede cargarse hasta tres niveles, cada uno desencadenando un ataque más fuerte. El nivel final libera una animación específica de cada personaje e increíblemente poderosa. Por ejemplo, puedes manejar un enorme cañón con el Coronel Radec con el que apuntas con una mirilla y repartes muertes instantáneas con cada disparo durante un rato. Como el combate estándar dice que hay que jugar hasta alcanzar tres puntos, puedes ganar simplemente con un súper movimiento, por lo que es importante estudiar cómo van los rivales.

Por el momento solo hay veinte personajes jugables, con dos fichajes programados para "el mercado de invierno" (a primeros de 2013). Se trata de un plantel algo reducido en comparación con lo que solemos encontrar en los juegos de lucha puros. Además, han incluido dos versiones de Cole McGrath (Infamous) para rellenar el elenco de luchadores.

Los fans estarían encantados con algunos personajes más, sobre todo los que se puedan asociar bien con la marca PlayStation. No está nada mal que hayan conseguido incluir personajes invitados de Bioshock (Big Daddy) o Metal Gear Rising: Revengeance (Raiden), pero que no estén ni Crash Bandicoot ni Spyro the Dragon es casi una blasfemia.

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También me habría gustado encontrar personajes PlayStation algo más exóticos u olvidados. ¿Por qué no Jumping Flash, el dinosaurio de la demo técnica de aquel primer disco de demos de la PSOne? ¿Un snowboarder de Cool Boarders, alguien del dúo Rapid Reload o un jugador de Hot Shots Golf? También echo de menos personajes que pueda que no pertenezcan a series de la propia Sony, pero que contribuyeron como nadie a que Sony se consolidara en el sector. Personajes como Cloud Stife de Final Fantasy VII, alguien del reparto de Toshinden, Lara Croft o el payaso de Loaded.

A lo mejor me estoy esforzando para encontrar fallos, pero a nadie le habrían molestado unos cuantos personajes más. Sin embargo, un aspecto que merece elogio son los escenarios de combate.

Hay un montón de escenarios para luchar, son grandes y variados. La mayoría de los luchadores cuentan con un nivel propio, y todos se van modificando en pleno combate. Uno de mis favoritos es el de Sackboy, que comienza como cualquier otra creación de Little Big Planet. Puedes ver cómo se va montando mediante los menús que todos conocemos, mientras sigue la pelea. En mitad de la partida aparece Buzz para hacer preguntas que hay que contestar para sobrevivir. El nivel de Loco Roco y el de Parappa the Rapper también están entre los mejores.

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Como en Super Smash Bros., los personajes están muy desequilibrados. Especialmente en partidas uno contra uno, donde he visto combos infinitos y al jugar contra amigos parece como si los ataques a distancia de Radec causaran muchos problemas. Sin embargo, mientras que este desequilibrio podría estropear la experiencia de otros juegos de lucha, no es un problema demasiado grave en este tipo de "party fighting".

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Y aunque casi todos los personajes parecen súper poderosos, al final se va reajustando la balanza en pos de la diversión. La cantidad de gente que pide la revancha después de una pelea es buena señal de que al menos lo están pasando en grande.

Como decía, he pasado la mayor parte del tiempo con Playstation All-Stars Battle Royale jugando en mi PS Vita. Esto se debe en parte a que es completamente compatible con la versión PS3, y en parte porque se hace algo más natural jugar en linea a este juego en una consola portátil. En PlayStation 3 prefieres jugar contra tres colegas en el mismo salón, por lo que se hace extraño pelear contra rivales desconocidos online.

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La verdad es que el online funciona perfectamente. Te metes, y ya estás peleando. Como te puedes enfrentar a jugadores tanto de PS Vita como de PS3, no corres el riesgo de quedarte solo, como ocurre con muchos otros juegos de Vita. Hay muchos jugadores listos para desafiarte, y me he podido desahogar enfrentándome al resto del mundo desde un McDonalds, durante una aburrida cena familiar o en la comodidad de una habitación de hotel.

Lo que le falta a Playstation All-Stars Battle Royale es un modo en solitario medianamente decente. Están las campañas con un principio y un final, pero tienen poca chicha o sentido. Te ponen una breve intro, te enfrentas a todos los personajes y luego sale la primera mascota de PlayStation, Polygon Man (que se retiró antes de que saliera la primera consola de la casa).

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Habríamos bienvenido algo más inspirado. El único atractivo son los trofeos y algunos movimientos opcionales para los personajes. Quizás quieres que Sackboy haga una celebración diferente, o que Parappa entre en escena de otro modo más bailongo. Esas son las cosas que podrás liberar, pero obviamente aportan poco. Y junto a la escasa selección de personajes, el single player es el aspecto más negativo que encontramos en Playstation All-Stars Battle Royale.

Al final, sigue sorprendiendo de forma positiva. Está claro que es una copia descarada, y una que además llega después de otra "inspiración" como Little Big Planet Karting, por lo que está claro de dónde ha estado bebiendo Sony últimamente. Pero mientras sea divertido, ¿a quién le importa? Playstation All-Stars Battle Royale es muy recomendable para los amantes de PlayStation que busquen un buen party game, pero no esperéis el mismo nivel de 'fan service' que Super Smash Bros. Nintendo sigue mandando en los party fighting en este sentido.

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07 Gamereactor España
7 / 10
+
Buenas peleas tipo party game, buenas funciones online, geniales niveles, mucho 'fan service', cantidad de opciones y configuraciones.
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Pobre jugando en solitario, no hay demasiados personajes, música repetitiva.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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