Cuando me puse con Soul Sacrifice esperaba sinceramente un hack 'n slash machaca-botones. Y mira por dónde, no es para nada el caso, pues el nuevo action-RPG del legendario Keiji Inafune resulta una experiencia realmente estratégica en la que el jugador recibe una plétora de habilidades, opciones de personalización y elecciones.
En Soul Sacrifice te lo pintan bastante mal. Empiezas encerrado en una celda, esperando tu ejecución a manos del poderoso hechicero llamado Magusar. Podrías pensar que escapar sería la mejor idea, pero echando un vistazo al exterior descubres que la cosa está aún peor ahí fuera, pues el fuego y el azufre dominan una escena infernal. Bajo una pila de huesos en la jaula de al lado se ve un libro. Un libro parlante, que se llama Librom. Un libro que cuenta las crónicas del trabajo de Magusar, ¿y qué mejor forma de pasar el tiempo esperando tu final que con una buena novela?
En realidad, Librom te deja revivir quests fantasmas, contando la historia de Magusar y de otros hechiceros, y permitiéndote escribir el destino de algunos de los diablos y personajes con los que te encontrarás. Es un viaje a través de todo tipo de entornos y peligros de temática mitológica, en el que debes pensar con cuidado qué ofrendas (poderes o habilidades) llevarás contigo, qué sigils (como las ventajas de otros juegos) esculpirás en tu brazo y si prefieres salvar o sacrificar a los enemigos caídos (incrementando vida y magia respectivamente). Te vas haciendo más fuerte, y un día quizá seas lo bastante poderoso como para retar a Magusar.
Pero no nos andemos por las ramas. Soul Sacrifice tiene mucho de 'grindar'. Vas a visitar las mismas zonas y luchar con los mismos monstruos una y otra vez, para ir ganando ofrendas, rescates o sacrificios. La naturaleza de las arenas más cerradas también subraya el aspecto de 'grindeo' del juego, aunque también ayuda a concentrar las cosas cuando se juega de forma cooperativa. Un aspecto interesante es el hecho de que puedas subir hasta el nivel 100 optando por centrarte en la vitalidad o en la magia, la habilidad de absorber daño o de repartirlo.
Desde Phantasy Star Online llevo jugando a action-RPG en consola con tres habilidades/ataques asignados a tres botones frontales del mando, usando uno de los gatillos para activar un segundo set de habilidades. Soul Sacrifice usa el mismo sistema para sus ofrendas, pero éstas no son meros ataques o habilidades: aportan un componente táctico al juego que no se puede desestimar. En primer lugar son limitadas, no siempre llevas una equipada y se verán mermadas si las usas demasiado (y eso quiere decir que tendrás que gastar un poco de Lacrima, las lágrimas de Librom; sí, este libro tiene llanto fácil, y sus lágrimas se usan como especie de moneda) para recuperarlas.
Y no solo hay una barbaridad de ofrendas diferentes, tanto ofensivas como defensivas, a distancia, cuerpo a cuerpo, efecto de área... sino que se pueden fusionar con otras nuevas ofrendas y mejorar. Después de cada misión te recompensan con ofrendas adicionales, y caen en diversas categorías elementales. La clave para derrotar a los diablos (los jefes) es descubrir a qué son vulnerables. También hay ritos negros, conjuros extremadamente poderosos con los que el jugador hace un sacrificio para infligir un montón de daño; por ejemplo el primer rito negro que aprendes sesga tu defensa después del uso (un efecto que puede deshacerse con Lacrima).
Esta reinterpretación de los action-RPG no irá con todo el mundo. De hecho, me costó varias horas acostumbrarme y cogerle el tranquillo a los conceptos básicos, y comenzar a decidir mis estrategias. Hay cosas que todavía me chirrían -me gusta el feedback cuando combato los enemigos-. La falta de barras de vida (las ves si eliges la muerte) durante los combates normales todavía me frustra (puedes ver su status como verde, amarillo o rojo si activas el Ojo de la Mente). La ausencia de números visibles (salud o daño) te obligará a tomar decisiones tácticas con poco o ningún conocimiento de causa en pleno fragor de la batalla.
Monster Hunter fue sin ninguna duda la franquicia de videojuegos más importante para PSP en Japón, y sin un Monster Hunter para PS Vita, Soul Sacrifice se posicionó evidentemente para satisfacer a los cazadores. Pero si bien es cierto que Soul Sacrifice comparte algunos rasgos con los monstruos de Capcom, consigue destacar por mérito propio.
Cuando juegas con otros online es cuando de verdad cobra vida Soul Sacrifice. Muchas de las ofrendas que tienen poco uso en solitario entran aquí en juego, y en ocasiones se hace difícil seguirle el ritmo a la acción que se despliega en pantalla. Pero la naturaleza de Soul Sacrifice se hace más evidente cuando puedes decidir sacrificar a los colegas caídos para liberar poderosos hechizos, o revivirlos para que sigan dando guerra. Y pueden solicitar ayuda o escoger la muerte, así subiendo el ataque de los caídos o bajando la defensa enemiga.
En cuanto a los valores de producción, Soul Sacrifice cuenta con una grandiosa banda sonora orquestada que te pone en situación durante tus oscuras aventuras. Los gráficos no se acercan nunca a los juegos similares de PS3 y la limitada geometría de los escenarios se suma a un aspecto técnico algo decepcionante (también incluyendo caídas ocasionales de tasa de imágenes en online). Pero desde el punto de vista del diseño, el juego consigue aportar un look fresco a unos elementos que se han cubierto en los videojuegos una y otra vez, lo que debe considerarse un punto positivo. El tema de los pecados, el sacrificio y la corrupción se ve capturado en cada enemigo y diablo que te encuentras, así como en tus compañeros manejados por la IA.
No he dicho mucho de la historia, y eso es porque es prácticamente olvidable, por mucho que cuente con actuación vocal y la escritura apareciendo en el libro. Por lo tanto es bueno que puedas pasar las páginas de Librom y centrarte en la acción.
Soul Sacrifice esconde una enorme profundidad, aunque sólo la descubras de verdad cuando juegas en co-op. Podría verse como una obra maestra con ciertos fallos que seguro recibirá cierta denominación de clásico de culto en la joven plataforma. Si estás listo para invertir incontables horas y buscas un poco de 'grindeo' online, entonces Soul Sacrifice te dará una experiencia original que desafiará tus nociones sobre cómo debe ser un action-RPG.