Español
Gamereactor
análisis
Animal Crossing: New Leaf

Análisis de Animal Crossing: New Leaf

Más de tres semanas intensísimas viviendo como el alcalde de un peculiar pueblo con el nombre de un plato de cerdo. Ha sido (está siendo) una experiencia extraordinaria.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio
HQ

Cuando llego ya es de noche. El tren se detiene en su destino. Un pueblo. Mi pueblo, supongo. Su nombre -basado en lo que hemos cenado- es Costilla. Un pueblo encantador con muchas zonas verdes, ferrocarril, un río, dos estanques y dos playitas. Y muchos habitantes animalescos.

Al salir del tren saludo a un grupo de ciudadanos congregados a la puerta de la estación. Hay una rana, un panda, un caballo, un ave. Me dicen "¡bienvenido, alcalde!" Debe haber algún error: yo no soy ningún alcalde. ¿Dónde está aquella amable tortuga que solía frecuentar el ayuntamiento?

Estoy completamente confundido. Sin embargo, aquí estamos todos de acuerdo en que hay que arremangarse y mejorar esta ciudad. Que, por cierto, ni siquiera está en mal estado. Es linda, acogedora, con un montón de árboles. Tal vez se echen en falta unas cuantas obras públicas, pero sin duda es un lugar en el que apetece vivir.

A propósito: un mapache nipón ya me ha encontrado alojamiento. Me construirá una casa por unas cuantas bayas -la moneda local- pero por el momento me conformo con una tienda de campaña. Y no tengo cama, dormiré en el suelo.

Publicidad:
HQ

Día 1: bichos y bichos antiguos

Me levanto por la mañana temprano. Me gusta hacer un recorrido por la ciudad antes de que abran las tiendas. Sólo hay un bazar en la zona residencial, pero más al norte se encuentra la entrada a una calle más larga, con muchos otros comercios. Bueno, por el momento hay tres: una tienda de objetos y herramientas, otra de ropa y accesorios y un museo. Que, por desgracia, está completamente vacío.

Un vecino del pueblo me desvela cómo puedo empezar a ganar dinero. Al parecer, el dinero en Costilla crece en los árboles, así que de inmediato me pongo a menear la fronda para comprobar si es verdad. Y vaya que si lo es: el tercer árbol deja caer una moneda. Poco después consigo otra. En el décimo árbol, sin embargo, me espera una colmena; sus inquilinas no están muy contentas con el terremoto, así que me dejan la cara hecha un Cristo. Pero ya tengo algo de suelto y las tiendas han abierto en el ínterin.

Publicidad:

Compro de inmediato un cazamariposas y me voy a atrapar unos cuantos insectos. Resulta que por aquí todo el mundo está loco por los bichos, así que pagan bien por ellos. Capturo una mariposa, una santateresa, una mariquita y un saltamontes. El dinero que saco de la operación basta para comenzar a pagar una casa y una deuda que, poco a poco, comienzan a crecer gracias a la labor de Tom Nook, el mapache que conocí anoche.

También me hago con una pala y empiezo a escavar. ¡Pronto desentierro cuatro fósiles! Los fósiles también se pagan muy bien por aquí. Sin embargo, prefiero donarlos al museo y así enriquecer la oferta cultural de mi cuidad. Porque, como alcalde que soy, siento el peso de la responsabilidad.

Animal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New Leaf

Día 2: bichos del agua y galletas chinas

Hoy toca día de pesca. Consigo la caña y capturo pacientemente un montón de peces de agua dulce (en el río) y salada (en el mar). Además descubro que te dejan pescar en los estanques de ranas. Peces e insectos también se pueden donar al museo, pero si ya los tienen expuestos, es posible venderlos al emporio local para generar una considerable cantidad de bayas.

En la botica de la calle principal donde compré las herramientas también venden unas extrañas galletas de la fortuna que esconden un premio. Ya han pasado dos días y estreno el primer artículo único para mi (única) habitación: un Triforce que emite la clásica musiquilla de Legend of Zelda. Estoy emocionadísimo.

Día 4: tráfico de arte y nuevos vecinos

Hay un tipo extraño en la ciudad. Un zorro. El muy zorro se dedica a vender obras de arte, y consigue que me quede prendado de una estatua alada y decapitada. Es del género de arte antiguo que más me gusta, así que hace todo lo posible para vendérmela. Sinceramente, no puedo resistirme, aunque tengo la sensación de no estar haciendo un buen negocio.

Hoy llegan al pueblo dos nuevos habitantes: una rana y un burro que no deja de decir "¡vamos!" Me cae bien, así que me pongo a escribirle una carta.

Día 8: mobiliario y torneo de pesca

En estos días ya he ampliado mi hogar un par de veces, y descubro que ha pasado por allí una especie de juez que evalúa el estado y estilo de mi casa. No tengo demasiadas cosas: algunas las he comprado, otras las he obtenido de los habitantes de la ciudad. A veces, algún objeto interesante cae de los árboles.

Hoy, sin embargo, es el día del gran torneo de pesca. Intento capturar la lubina más grande del pueblo, pero me gana la yegua. No me enfado, porque la yegua es simpática y tiene un divertido acento francés.

Animal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New Leaf
Por supuesto, Animal Crossing: New Leaf está en español, con una excelente localización que es parte del alma del juego.

Día 10: obras públicas y de arte dudoso

¿Aquella obra de arte que compré? ¡Era falsa! Me lo han dicho en el museo. Ya sabía yo que tenía que confiar en mi instinto. Pero no pasa nada: además me he enterado de que el vendedor deshonesto también esconde en ocasiones auténticas obras de arte a precio de ganga. Voy a tener que probar suerte de nuevo.

Uno de los animales ha decidido abandonar la ciudad. Tengo la oportunidad de convencerlo para que se quede con nosotros, pero voy a dejarle partir. Sé que pronto le dará el relevo un nuevo residente que estoy deseando conocer.

Finalmente, he decidido comenzar la construcción de un nuevo puente. Costará una barbaridad de bayas, pero permitirá a los vecinos de la ciudad cruzar el río por dos puntos diferentes. Creo que todos vamos a estar muy contentos.

Día 15: la isla de Tortimer

¡Ha vuelto el antiguo alcalde! Al parecer, se había jubilado. Ha decidido retirarse a una isla remota, donde organiza tours para turistas.

Eso hay que verlo, de modo que poco después embarco hacia la isla. El barquero canta bellas canciones mientras me acompaña: mecido por las olas, el oído regalado.

Descubro que estos recorridos por la isla se componen de mini-juegos. Hay cazas del tesoro y juegos de destreza de distinta dificultad. Sin duda, son un respiro y un pasatiempo de la vida diaria como alcalde, y ofrecen recompensas muy interesante. Por ejemplo, me encantaría conseguir un traje de buceo para ir de pesca subacuática, en el fondo del mar. Lo intentaré.

Día 21: jamming o DJ

Hace unos días me pidió un simpático personaje que recogiera firmas para abrir un pub musical en el pueblo (por el tema de los ruidos). Parece que el local ya está listo y pronto tocará una famosa estrella del rock. Es un perro guitarrista. Lo confieso: no puedo esperar más para escucharle en directo.

Mientras tanto han abierto una tienda de jardinería. Ya he plantado un árbol: ¡ha sido divertido!

Día 23: la vida sigue

El puente está terminado y he decidido decretar una ordenanza municipal para que Costilla sea un "pueblo hermoso". Los habitantes plantarán nuevas flores y quitarán las malas hierbas. Estoy convencido de que este lugar será cada día más bello. Disfruto la vida diaria en este pequeño pueblecito cubierto de verde. Estoy muy feliz de vivir aquí.

Fin del diario del alcalde.

Animal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New Leaf

He querido llevar un diario de mi vida dentro de Animal Crossing: New Leaf durante casi un mes, porque creo que es la mejor manera de describir la experiencia de este juego.

Para aquellos no familiarizados con la serie, Animal Crossing no es más que un simulador de vida que sigue el horario terrestre. Es un mundo paralelo en el que cae la noche cuando el sol se pone en el mundo real, en el que las tiendas abren a una hora determinada, en el que las citas suceden en un momento concreto. Los días duran 24 horas reales, y en el curso del año hay cosas que sólo pasan ciertos días. Hay estaciones, el tiempo cambia.

En Animal Crossing no hay un propósito real de juego. Se vive, se embellece la ciudad, se descubre algo nuevo. En algunos casos, te verás jugando durante diez minutos. Otras veces, las cosas por hacer son tantas que te tiras horas enteras delante de la pantalla. El juego es impredecible, como la vida misma. Y tal vez ahí reside su magia.

Algunas personas podrían decir que Animal Crossing: New Leaf es un juego aburrido. Francamente, hubo momentos en los que no tenía nada que hacer, y que me pasé el día entero pescando a la orilla del río. Pero al final, estas jornadas de descanso también resultaron divertidas. Los peces se convirtieron en más bayas, con las que engalané mi hogar y mi pueblo. Ahora, casi cumplido el mes de juego, tengo una especie de dúplex, adornado con un montón de trastos, pero que a mí me gusta.

Además, como ya he dicho, cada día se descubre algo nuevo. Se esconden misterios en cada rincón, peces inimaginables por pescar, formas extrañas y creativas de encontrar y cazar nuevos insectos.

Animal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New Leaf

Y luego están los habitantes. Simpáticas y amistosas criaturas que a veces te proponen tareas o te dan algo de palique. Es verdaderamente encantadora la forma en que Nintendo ha conseguido imprimir cierta singularidad en cada uno de los personajes, resultando amables a primera vista.

Un amigo describió una vez Animal Crossing como "un Tamagotchi con esteroides". Aunque no sea elegante, esta definición podría ser adecuada en un sentido: tendrás que volver a menudo a la ciudad, aunque sea sólo por ver cómo están los vecinos o si hay algún problema que resolver. Se les coge un afecto verdadero, casi como si fueran viejos conocidos de la vida real.

Esta nueva entrega para Nintendo 3DS también es encantadora desde el punto de vista gráfico. Puede que el efecto 3D no sirva para mucho, pero el diseño -prácticamente inmutado desde que nació la serie- es todavía más fino y agradable. La música siempre sigue el tono relajante, tanto que en ocasiones es un placer quedarse en medio de un prado en un día de lluvia, sólo por escuchar las melodías como contrapunto a las gotas que caen.

Lo único que no me convencen son los diversos añadidos realizados por Nintendo para intentar que el juego fuera menos monótono (y tal vez más atractivo para un público más amplio). Los mini-juegos de la isla del exalcalde son pocos y no muy originales. De hecho, piden que hagamos las mismas acciones que en la ciudad, pero dentro de un límite de tiempo. Con el estilo del juego, cabría esperar algo más original.

Pero se trata de una pega menor. Animal Crossing: New Leaf sigue siendo un juego excelente y único. Su concepto central es muy original y valioso, y además da para decenas, cientos de horas. Es del género de juegos capaz de cambiarte el humor de la jornada con sólo echar unos minutos, y por esa razón es un compañero que hay que llevar siempre encima. Si además eres un coleccionista, existen cientos de objetos por encontrar, algunos haciendo guiños y homenajes a los clásicos videojuegos de Nintendo de manera más que explícita. La posibilidad de compartir contenido a través de StreetPass o de visitar pueblos o echar partidas multijugador a los mini-juegos a través de internet o de Wi-Fi aporta un condimento extra a la receta.

Estoy muy contento de que esta serie esté de vuelta en una consola portátil, con buenas y bonitas novedades. Como ya he dicho, Animal Crossing: New Leaf es un juego impredecible, por lo que un día te podría divertir locamente o parecerte un tostón. Mas su originalidad e imprevisibilidad son, en mi opinión, los mismos aspectos que lo convierten en un juego excelente. Otro esencial para Nintendo 3DS.

Animal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New LeafAnimal Crossing: New Leaf
09 Gamereactor España
9 / 10
+
Impredecible como la vida misma, muchos personajes con caracteres distintos y encantadores, maravillosa música, un montón de cosas por hacer durante todo el año.
-
Minijuegos poco originales, seguirá sin agradar a todos los gustos.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

Contenido relacionado

1
Animal Crossing: New LeafScore

Animal Crossing: New Leaf

ANÁLISIS. Autor: Lorenzo Mosna

Más de tres semanas intensísimas viviendo como el alcalde de un peculiar pueblo con el nombre de un plato de cerdo. Ha sido (está siendo) una experiencia extraordinaria.



Cargando más contenido