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Diablo III

Análisis de Diablo III para Xbox 360 / PS3

El juego para ordenador más esperado del año pasado se estrena por fin en consolas. Hacemos diabluras en el sofá y con un mando entre las manos...

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Mi primera hora con la versión Xbox 360 de mi querido Diablo III me deja profundamente preocupado. Somos tres jugadores -un bárbaro, un hechicero y un cazademonios- y, hasta el momento, cada objeto de botín que ha caído ha sido inútil para todos nosotros. El mago va por ahí con una enorme hacha de dos manos a su espalda. ¿De verdad Blizzard ha descafeinado tanto los sistemas centrales para que el juego funcione en consolas? ¿Dónde está el 'loot' específico de clase? ¿Dónde están las 'stats' de mis ítemes?

Por suerte, como descubro después, simplemente estoy sufriendo un caso de memoria traicionera. El botín que consigues al principio del juego es todo basurilla genérica que no importa un bledo si tus 'stats' primarias son Fuerza o Destreza. Pero lo bastante rápido, los enemigos caídos comienzan a dejar equipo que claramente sólo encaja con uno de nosotros, y la experiencia vuelve a ser Diablo III sin diluir.

Hace bastante más de un año que Diablo III se lanzó para PC y Mac (análisis aquí, impresiones de la expansión Reaper of Souls aquí), y la presión sobre los servidores en el lanzamiento era tal que hasta acceder a la cuenta se convertía en todo un reto. Este no es el caso en consolas, con las que puedes ignorar cómodamente todo lo de los requisitos online y ponerte a jugar. Quitando esa única (pero significativa) diferencia, se trata básicamente del mismo juego que se lanzó entonces, solo que en una nueva plataforma.

Por supuesto hay diferencias que no se refieren al contenido, y están relacionadas casi todas con los controles y la interfaz, pero por lo demás no hay cambios relevantes. Una estrella ha vuelto a caer sobre la catedral del primer Diablo, los Señores del Mal restantes vuelven a intentar conquistar el cielo, el infierno y todo lo que queda en medio, los no-muertos vuelven a pasear por la Nueva Tristán, se vuelve a oír hablar de cierta piedra del alma negra, etc, etc.

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Diablo III

Pero esto no es menospreciar el trabajo de Blizzard a la hora de portar el juego a consolas, pues evidentemente ha sido un proceso muy estudiado. Toda la interfaz de usuario para tratar con el equipamiento y el inventario se ha rediseñado desde cero. En lugar de contar con un gran inventario dividido con una cuadrícula, ordenas tus cosas escogiendo una categoría de equipo (botas, hombreras, pantalones, mano principal y demás) y luego vas pasando por todo el equipo que llevas de esa clase.

Las estadísticas detalladas y las habilidades de los objetos individuales no se muestran inmediatamente (puedes sacarlas con el botón X), sino que aparece un reducido sumario gráfico. Las flechas rojas o verdes indican si una pieza de equipo es mejor o peor de la que ya llevas puesta, en las categorías de daño, protección y vida. Es un modo de ofrecer una vista general rápida y sencilla, y si el ítem no vale para nada, y sólo lo llevas para venderlo en cuanto puedas, puedes marcarlo como "basura". Cuando te encuentras con un vendedor de cualquier tipo, puedes soltarle tu montón de chatarra con solo pulsar un botón. ¡Aaaaah!

Los mismos pequeños iconos aparecen en una esquina de la pantalla cada vez que coges algo de botín, y usando la cruceta digital puedes incluso equiparlo o volver a dejarlo caer, sin tener que pasar por la pantalla de inventario. Por lo tanto, en la situación en la que coges botín que sólo presenta flechas verdes, puedes equipar la mejora en un abrir y cerrar de ojos.

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Los controles no han sufrido en el salto desde ratón y teclado hasta el mando de juego. Tus habilidades escogidas se activan con los botones ABXY, el gatillo derecho y el botón R, mientras que mueves a tu personaje con el stick izquierdo. El derecho se puede usar para un movimiento de esquiva, que es nuevo, pero no es un gran cambio: corres tan rápido como esquivas, así que lo han puesto principalmente por razones estéticas.

El nuevo esquema de control funciona perfectamente. El juego resalta el enemigo al que estás apuntando con una silueta roja, y coloca una pequeña flecha sobre la cabeza del objetivo en el multijugador, correspondiente con el color de tu jugador. Los controles más directos son en realidad mejores que en la versión de ordenador en algunos casos, así que terminamos por esperar que incorporen la opción de control con mando en el juego de PC.

Diablo IIIDiablo III

Supuestamente el sistema de 'loot' también ha cambiado en la versión consolas, otorgando más y mejor equipamiento por el camino, con la intención de compensar el hecho de que no exista una casa de subastas para intercambiar y comerciar con otros jugadores. No me he sentado con hojas de datos ni he realizado cálculos, pero mis partidas me dejan la sensación de que la cantidad de botín útil que recibes en el juego encaja bastante bien.

Quizá la novedad más importante en esta versión consolas de Diablo III es que pueden jugar hasta cuatro jugadores en la misma televisión. Por supuesto también puedes conectarte online, o incluso conectar dos Xbox juntas en una red local y jugar al viejo estilo 'cíber'. Pero tener a un compi en el sofá es quizá la mejor forma de jugar, aunque tengo que advertiros: no empecéis a jugar a dobles en el sofá hasta que le pilléis el tranquillo a la interfaz, el inventario y las 'stats' relevantes para vuestras respectivas clases.

Solo un jugador puede acceder a la pantalla de inventario, y con dos o más jugadores que todavía no sean veteranos de Diablo, aparecerán tiempos de espera. Mucha espera. Especialmente cuando ocurren situaciones como "ese hacha que acabas de pillar, ¿me dejas verla? Podría ser una mejora", y entonces tienes que pasar por el proceso de encontrarla en el inventario de un jugador, dejarla en el suelo, cogerla, encontrarla en el inventario del otro jugador y luego comparar las 'stats' con la que ya llevaba encima.

Si has jugado a Diablo III con amigos online, sin duda ya estarás acostumbrado a simplemente quedarte cerca esperando mientras tu colega hurga en su mochila. Pero ahí, al menos puedes pasar el rato limpiando tu propio inventario o comprobando tus habilidades y demás. Cuando juegas en la misma pantalla, sólo un jugador puede hacerlo. En resumen, este tiempo de inactividad se comerá todo el ritmo de la partida si no sabes exactamente qué estás buscando y cómo hacerlo lo más rápido posible.

Si, por el contrario, tienes eso controlado, Diablo III en consola es una experiencia placentera de cabo a rabo. Los gráficos no están a la altura de la versión de PC (lo que sorprende, considerando lo simples que son en realidad), pero por lo demás se trata de una conversión excelente que con sencillez y elegancia esquiva algunos de los problemas de su hermano mayor (la criticada subasta desaparece, como explicamos más arriba) y que incluso cuenta con algunos trucos en la forma de controles más directos y co-op de sofá. Si todavía no lo has jugado en PC, deberías indudablemente probar Diablo III en consolas.

Diablo III
08 Gamereactor España
8 / 10
+
Nuevo inventario. Controles directos. Co-op en el sofá. No hay casa de subastas.
-
No se ve tan bien como la versión de PC. El cooperativo local se ve entorpecido por el acceso al inventario.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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