La aventura Pokémon da el salto a las tres dimensiones. El fenómeno mundial capaz de vender videojuegos, cartas, juguetes y todo tipo de merchandise llega por la más grande de las puertas a Nintendo 3DS con Pokémon X e Y. Pero ¿cómo se ha adaptado la saga a la última portátil de Nintendo? ¿Qué evolución presenta con respecto a sus predecesores para hacer que merezca la pena su compra? Sumérgete en el análisis del que puede ser el juego de Pokémon definitivo.
El mundo de Pokémon como nunca antes lo habías visto
La saga Pokémon surgió y creció a base de 'sprites', representaciones gráficas que actúan como los fotogramas de un filme para generar sensación de movimiento. En X e Y, y con la llegada de la franquicia a Nintendo 3DS el estilo visual cambia de manera radical tanto en el mapa del mundo como en los combates, pasando a un modelado en tres dimensiones con su peculiar vista cenital, elección capaz de dar un giro muy fresco a la estética de la saga en todos sus aspectos.
La sensación general al ver los combates es similar a lo que se sentía al ver por primera vez Pokémon Stadium, pero llevada al máximo exponente de la técnica actual. Para un fan de la saga es algo increíble ver a sus seres favoritos por fin en tres dimensiones y con animaciones tanto cuando están en espera como atacando. Existen distintas expresiones faciales para cada tipo de acción, y cada ataque es ejecutado por cada Pokémon de una manera diferente. Sólo esto ya de por sí impresiona un amante de la serie, más si se añade el efecto estereoscópico de la pantalla superior (que no está disponible en el mapa general, pero sí en ciertas zonas concretas, así como en las peleas). El efecto 3D es suave y sencillo, aunque muy satisfactorio a la hora de desplegar los combates en toda su gloria. Lógicamente, este toque adicional no se puede disfrutar en Nintendo 2DS.
Si hay que encontrar un defecto al apartado gráfico de Pokémon X e Y, sería cierta caída en la tasa de imágenes por segundo en algunos momentos de las batallas, atascos que se pueden acentuar mínimamente si los pokémon que luchan son especialmente grandes (el ejemplo más extremo lo vivimos con Yveltal, legendario de Y y un Venusaur).
La nueva aventura Pokémon fundamental
Por si aún hay algún lector que no conozca la saga Pokémon, la resumiré a grandes rasgos. Los Pokémon son unas criaturas a las cuales los humanos capturan para entrenar, combatir y convivir. El objetivo de cualquiera que quiera ser un gran entrenador es el de desafiar a los líderes de gimnasio para así obtener sus medallas y poder combatir en la reputada Liga Pokémon, donde se enfrentan los verdaderos campeones.
En este caso es el turno de una nueva aventura en la nueva región de Kalos. El Profesor Pokémon de turno -el profesor Ciprés- encarga a un grupo de cinco amigos la tarea de viajar por el mundo para descubrir todas las especies de Pokémon de la región y registrarlas en la Pokédex, el aparato-enciclopedia que cataloga todas las criaturas. El personaje principal, que como novedad en X e Y podemos personalizar antes de empezar la partida -aunque volveremos al tema de la personalización más adelante- es uno de los miembros de este grupo de jóvenes. Tras repartir Ciprés un pokémon a cada uno de ellos comienza su viaje en el que compartirán experiencias y, cómo no, combatirán como rivales entrenadores.
Uno de los aspectos a destacar en Pokémon X e Y es que los compases iniciales del juego son absolutamente fluidos; el título quiere que el usuario no pierda el tiempo a la hora de jugar. Los tutoriales son rápidos, concisos y lanzan al jugador a la mínima de cambio a jugar, mejorando bastante su ritmo con respecto a otras entregas, que daban más vueltas en las conversaciones o los tutoriales.
Este ritmo de juego se mantiene a lo largo de toda la partida, con escenas de corte, que debutan en la saga (y en 3D estereoscópico sin gafas) para tomar la carga narrativa de una historia que, aunque no es gran cosa, está bien contada y tiene sus aspectos entrañables. Estas escenas de estilo cinematográfico se ven intercaladas con los tramos de juego de manera que la historia se hila por sí misma, haciéndose fácil y divertida de seguir mientras se juega o se disfruta de las secuencias en 3D. Cabe subrayar de nuevo eso de que el mayor ritmo de la partida se note frente a otras entregas de la saga, tardando menos tiempo en subir de nivel a todos los pokémon del grupo (si bien esto no disminuye las horas de juego).
La región de Kalos está 'ambientada' o inspirada por primera vez en la cultura europea, y acoge numerosas ciudades aderezadas con un estilo visual que no se había empleado hasta el momento, con calles empedradas transitadas por ciudadanos y pokémon por igual. Las zonas no habitadas también son muy completas, con todo tipo de biomas como praderas o bosques por descubrir, y con un entramado bastante complejo, con caminos opcionales y cantidad de objetos y entrenadores por encontrar. Las 'mazmorras' o mapas donde lo que hay que hacer es cumplir un objetivo o llegar a cierto lugar para librar cierto combate también gozan de un diseño complejo, con numerosos ítemes dispersos en lugares que no es obligatorio visitar salvo por el afán completivo de lograr barrer el escenario de objetos. Mención especial merece la ciudad principal de Kalos, una megalópolis con una estructura, tamaño y diseño que no se había visto hasta ahora en la saga de Game Freak.
¿Qué hay de nuevo, Pokémaníaco?
El esquema general de la aventura Pokémon no varía con respecto a lo que la saga ha establecido a lo largo de los años: el objetivo principal es obtener todas las medallas para así competir en la liga, y a la vez registrar y capturar cuantos más especímenes de pokémon, mejor. Para esto, el entrenador tendrá que formar su equipo y entrenar, enseñar nuevos movimientos, evolucionar y optimizar su grupo de manera que pueda superar con soltura los combates y retos que se presenten. Pero, ¿qué novedades aparecen en este esquema para aportar a Pokémon X e Y un tono de frescura?
Las Megaevoluciones
En cierto momento de la aventura se presentarán al entrenador la posibilidad de evolucionar a ciertos pokémon más allá de su límite natural. Esto se conoce como megaevolución, y permite dar un paso más en las habilidades de un pokémon. Las megaevoluciones se llevan a cabo gracias a unas piedras que habrá que encontrar dispersas por el mundo, aportando así una búsqueda que puede prolongarse bastante, descubriendo qué criaturas pueden megaevolucionar. Un factor importante y positivo sobre las megaevoluciones es que no descompensan el sistema de batalla; a pesar de mejorar las habilidades y estadísticas de un pokémon, éste tendrá las mismas debilidades elementales, y un rival de tipo contrario puede derrotarlo con facilidad, manteniendo así el equilibrio en el sistema.
Personalización
Por primera vez en el mundo de Pokémon el jugador podrá personalizar en alto grado el aspecto de su entrenador. Desde un simple gestor al inicio de la partida -que determinará el aspecto general del personaje- hasta las numerosas boutiques que dejan comprar nuevas prendas de ropa o la peluquería que permitirá teñir y cortar el pelo, así como añadir vello facial. Todos estos detalles hacen que cuando dos jugadores se encuentren online para combatir o intercambiar sus entrenadores nunca vayan a ser iguales.
El Poké Recreo
Un nuevo sistema que permite que entrenador y pokémon estrechen lazos rápidamente. Con un sistema que recuerda bastante al modelo de juego (simplificado, eso sí) de Nintendogs, el usuario puede jugar con la criatura, alimentarla o participar en distintos minijuegos que emplean la pantalla táctil para así mejorar la afinidad con el pokémon y aumentar su rendimiento y posibilidades en combate.
Super Entrenamiento
Un novedoso sistema de mejorar permanentemente las estadísticas de un pokémon mediante un entrenamiento especial en un entorno virtual. El entrenador deberá mover en la pantalla táctil al pokémon y disparar proyectiles o balones a objetivos gigantes, necesitando obtener un número de puntos en cierto tiempo para tener éxito y subir los atributos de la criatura.
Aparte de estas novedades expuestas en la anterior lista no hay que olvidar los nuevos pokémon, que presentan un diseño que vuelve a la estética clásica, similares a animales, lo que hace que cada uno de ellos sea más entrañable. Esta recuperación, sumada a algunos objetos nuevos y más añadidos, aportan a la experiencia un tono fresco que justifica el progreso en la saga.
Conclusiones
En resumen: Pokémon X e Y es el epítome de la saga, lo máximo alcanzado hasta el momento, el culmen de contenidos con un ritmo intenso pero que se toma su tiempo en la narrativa, con una infinidad de pokémon entre nuevos y viejos conocidos de todas las generaciones, con un estilo gráfico totalmente remodelado y que hace una delicia combatir, con posibilidades online que alargarán la experiencia de juego al competir con otros usuarios de todo el globo y con un endgame (posibilidades tras acabar la trama principal) que regalará horas y horas de juego a aquellos que quieran ver todo lo que Kalos tiene por ofrecer y que quieran hacerse con todos.
Si cada entrega de Pokémon ha ido puliendo los fallos de sus predecesores y avanzando poco a poco en cuestiones de franquicia, Pokémon X e Y dan un paso de gigante en cuanto a avances técnicos y de jugabilidad. Si te gusta Pokémon, este es tu juego del año. Si nunca lo has probado, o no te ha convencido su esquema, es muy probable que Pokémon X e Y te haga replantearte tu punto de vista. Estamos ante, probablemente, el título más completo y que más horas de juego dará en Nintendo 3DS.