Español
Gamereactor
análisis
Demon Gaze

Análisis de Demon Gaze

Hay miradas que seducen, miradas que hablan por sí mismas, miradas que infunden respeto... y otras que te permiten capturar demonios como si nada y hacerlos aliados.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio

Y ya te adelantamos que esta última "mirada del demonio" es la que te va a ser realmente útil en Demon Gaze.

Una aventura muy "animada"

Lo primero que llama la atención de Demon Gaze es lo desbordante de su estilo nipón: el diseño de los personajes, su voces en japonés (aunque también podemos seleccionarlas en inglés), las pullas y bromas introducidas en el argumento, alguna que otra escena 'ecchi' (picantona sin llegar a más)... vamos que, si te gusta el anime, a estas alturas ya te habrá entrado por los ojos y estarás tentado de probarlo.

Pero no te dejes engañar por ello, ni para bien ni para mal. No estamos ante un juego que prime las apariencias frente al género del que bebe y, más allá de este aspecto visual, nos encontramos con un 'dungeon crawler' (juego de mazmorras) bastante profundo. Podemos (y debemos) personalizar nuestro personaje al detalle en cuanto a características y habilidades, escoger un avatar (aspecto) entre la gran cantidad disponible e incluso decidir qué voz queremos que tenga. Este mismo proceso lo repetimos para los nuevos miembros que queramos incorporar a nuestro equipo, personalizando la experiencia hasta donde queramos o dejando que el juego decida aleatoriamente.

Demon GazeDemon Gaze
Publicidad:

Con la exploración por bandera

El concepto de lanzarnos a explorar mazmorras, enfrentarnos a unos cuantos enemigos por el camino en desafiantes combates por turnos y salir de ellas con objetos imprescindibles para nuestra aventura y tesoros inimaginables no es precisamente una novedad. Se trata de una variante de los RPG conocida en inglés como 'dungeon crawler', y que seguramente se habrá cruzado por tus mandos (¡o teclados!) con anterioridad. Como muestra quizá puedan sonarte ejemplos como Dungeon Master, Legend of Grimrock o la más reciente serie Etrian Oddysey.

Demon Gaze aborda precisamente ese camino, la de ofrecernos una aventura en toda regla abandonando los tradicionalmente coloristas mundos de los RPG para sumergirnos en su lado más peligroso: las mazmorras. Eso sí, no te dejes engañar, porque eso no quiere decir que nos encontremos ante un videojuego oscuro; su estética anime y los gags típicos de series de animación se encargan de amenizar nuestra partida y evitar que nos encontremos ante un juego demasiado serio.

Los elegidos

Publicidad:

Esos somos nosotros. Resulta que empezamos el juego sumidos en una crisis en las que no nos gustaría vernos demasiado: un demonio ha escapado en el sótano en el que nos encontramos y está sembrando el caos a su paso. Pinta bien, ¿verdad? Pues no porque, como no tardamos en descubrir, nosotros (o más bien, nuestro héroe) seremos su próximo objetivo y no nos queda más remedio que enfrentarnos a él. ¿Cómo? ¿Contra un demonio?

En semejante situación límite, tenemos la suerte de descubrir que uno de nuestros ojos es especial. Resulta que no sólo podemos plantar cara a los demonios, sino que una vez que los vencemos y abandonan su lado irascible, podemos ponerlos de nuestro lado gracias al poder de nuestro ojo. Y esto no es más que el principio, porque el tener demonios de nuestro lado implica más de una ventaja. Pero no nos adelantemos, vayamos paso por paso descubriendo qué es lo que esconde Demon Gaze.

Demon GazeDemon Gaze

Un mundo peligroso

Tan pronto como salimos del sótano, somos rápidamente informados de la situación. Fuera del edificio en el que nos encontramos se encuentra un mundo bastante traicionero, así que la única forma de estar seguros es permanecer dentro. Pero, claro está, esto no nos va a salir barato. No tardamos en descubrir que los visitantes de este lugar son mayoritariamente mercenarios que se ganan la vida matando demonios y recogiendo tesoros, por lo que parece que nosotros tendremos que hacer lo mismo si queremos permanecer en lugar seguro. Así pues, está decidido: tendremos que ganarnos la vida (y la seguridad) saliendo a explorar el mundo exterior y trayendo tesoros.

Pero con esto no sólo ganamos un lugar al que llamar hogar (al menos mientras paguemos religiosamente la renta del mismo), también ganamos una mentora que comparte la misma peculiaridad que nosotros y que se va a encargar de enseñarnos todo lo que necesitamos saber nuestro poder. Algo que no nos viene mal, ya que dominar nuestra habilidad es fundamental si queremos salir victoriosos de los duros combates por turnos que nos esperan en las mazmorras.

Con mucho ojo

La habilidad que da título a este juego, Demon Gaze, resulta ser lo más distintivo y útil del mismo. Como afirmamos antes, nuestro poder nos permite capturar ciertos demonios una vez salen de su estado de ira y conseguir que se unan a nosotros. Esto, de forma similar a lo que sucede en títulos como Shin Megami Tensei, nos da una ventaja al poder elegir qué demonio nos acompaña en los combates y liberarlo en el transcurso de los mismos, aunque será autónomo en sus decisiones y no podremos seleccionar qué movimiento en concreto queremos que ejecute para nosotros.

Pero las ventajas de haber capturado un demonio y tenerlo de nuestra parte no terminan ahí. En las mazmorras que exploremos, cada demonio nos concede una ventaja muy concreta. Por ejemplo, nuestro primer demonio nos permite ver puertas y tesoros ocultos que, en caso de no tenerlo equipado, no habríamos podido encontrar. Pero no todo es tan bonito; no olvidemos que estamos tratando con demonios. Si los mantenemos activos demasiado tiempo en los combates, terminarán entrando en su estado de ira y también nos atacarán a nosotros. Así que, ya sabes, hay que usar la cabeza a la hora de escoger qué demonio llevamos con nosotros a la mazmorra y durante cuánto tiempo solicitamos su ayuda.

Demon Gaze

Las mazmorras, nuestro mundo

El estilo de juego de Demon Gaze nos empuja a explorar mazmorras y no el mundo que las rodea. Por ello, vemos como las mazmorras están recreadas en 3D y las recorremos en primera persona como buen exponente del género. Mientras las recorremos vamos creando simultáneamente un plano de la misma, que nos viene de perlas en las más complicadas por si tenemos que volver atrás.

Fuera de ellas, el sistema de juego se simplifica y nos encontramos con una interfaz simple en la que nos desplazamos de un lado a otro simplemente escogiendo el destino con un cursor. En estas pantallas se desarrollará la mayor parte de la historia escrita, y es donde nos dedicamos a equipar y mejorar nuestro armamento, reclutar compañía para nuestras expediciones, configurar el grupo... La parte más táctica, vaya.

Pero ojo, una vez dentro de las mazmorras, la táctica no se pierde. Los combates son por turnos, y los enemigos no son especialmente blandos, así que nos tocará ir con cuidado si no queremos morir y tener que volver a cargar la última partida que hayamos guardado. Porque Demon Gaze no se anda con chiquitas: ni guarda partidas automáticamente ni conoce el significado de 'checkpoints'.

Esto hace que tengamos que planear nuestras incursiones a las mazmorras y no entrar en ellas con la idea de explorarlas por completo en un único intento. ¿El motivo? Necesitaremos volver a nuestra base de operaciones para recuperar vida, revivir (con un coste) a nuestros compañeros de viaje, comprar más pociones, vender el equipamiento encontrado o guardarlo porque no tenemos más espacio para llevarlo encima (nuestros bolsillos son limitados). Vamos, que tendremos que darnos unos cuantos paseos.

Un juego necesario para PS Vita

Sin duda nos encontramos ante un juego que le hacía bastante falta a la portátil de Sony. Si bien estamos ante un género dedicado a un público muy concreto, su clara identidad nipona y la ausencia de una competencia directa dentro del catálogo de PS Vita lo convierten en un título bastante destacable. No es un vende-consolas ni un título 'triple A' que jugadores o prensa lleven meses esperando, pero sus características lo convierten en imprescindible para los amantes de los 'dungeon crawlers' con una Vita a mano.

Si no conoces el género, también estás ante una excelente oportunidad de descubrirlo con un juego que, si bien no es especialmente indulgente, sí permite que demos los primeros pasos sin demasiada dificultad. Su diseño anime también conseguirá que más de un jugador sin conocimientos sobre este tipo de juego se atreva a darle una oportunidad, lo que no está mal si tenemos en cuenta que este tipo de juegos orientales no suele salir de las fronteras del país nipón. En cualquier caso, lanzamos una advertencia: estamos ante un juego no apto para impacientes ni exploradores precipitados. Si eres capaz de vivir con ello, tienes ante ti un juego más que recomendable.

Demon GazeDemon Gaze
07 Gamereactor España
7 / 10
+
Un dungeon crawler completísimo en una portátil como Vita. Horas y horas de diversión. Luchar, explorar, conseguir objetos... imposible aburrirse en las mazmorras. El toque anime le da una personalidad única frente a otras alternativas occidentales.
-
No innova demasiado. Falta algo de detalle gráfico en las mazmorras, PS Vita puede dar más de sí. Sin traducir a español.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

Contenido relacionado

0
Demon GazeScore

Demon Gaze

ANÁLISIS. Autor: Ernesto J. Pérez-Durias

Hay miradas que seducen, miradas que hablan por sí mismas, miradas que infunden respeto... y otras que te permiten capturar demonios como si nada y hacerlos aliados.



Cargando más contenido