Juegos del Año 2014: Mejor Juego

NOTA: Esta última clasificación está dedicada a grandes títulos para sistemas de sobremesa. Hace unos días publicamos las categorías Mejor Juego Portátil y Mejor Juego Indie / Digital.

10. La Tierra Media: Sombras de Mordor

Aquel juego que parecía aprovechar el tirón del Batman de Rocksteady y las mecánicas de Assassin's Creed ha acabado enamorando a la crítica y a gran cantidad de jugadores, fans o no de la ficción de Tolkien. Su principal atractivo es el sistema Nemesis, un innovador concepto de progresión que hace cada partida única y que lo ha acabado catalogando como el primer juego de narrativa flexible según el mismísimo Ken Levine.

9. Mario Kart 8

Nintendo ha propiciado un año memorable a sus fans, especialmente en cuanto a multijugador online y local se refiere, y durante unos buenos meses (y ahora revitalizado con nuevos circuitos), Mario Kart 8 ha sido la máxima expresión de esa oferta sin igual. Se trata del mejor regreso posible a una serie tan cuidada que es de las más vendidas pese a sólo contar con 8 entregas en 8 consolas y 21 años de historia. Quien se quita las gafas de la nostalgia ya lo ve como la mejor entrega desde los días de la N64 o incluso la SNES; es indudablemente el Mario Kart más bonito, fino y equilibrado, con los artistas de Nintendo echando el resto en los circuitos más imaginativos hasta la fecha. No ha perdido gas desde mayo.

8. Titanfall

No se nos puede olvidar el gran juego debut de Respawn, uno de los mejores shooters online del año. Es cierto que no incluye una porción de calidad para juego en solitario, lo que deja fuera a parte del público, pero para los que cuentan con una conexión a internet decente y disfrutan echando horas de piques en línea, Titanfall ha sido uno de los más destacados y una idea relativamente innovadora y refrescante para la nueva generación. También supuso un buen impulso para la nueva consola de Microsoft, que necesitaba más exclusivas de primera línea tras el potente lanzamiento de PS4. Si bien perdió fuerza en PC bastante pronto al limitarse a la plataforma Origin de EA, en consola sigue siendo un shooter muy popular y la selección de mapas es estupenda gracias al trabajo constante del equipo y los lanzamientos periódicos de DLC.

7. Far Cry 4

Tras quedar impresionados y hacer el loco durante muchísimas horas en el mundo abierto de Far Cry 3, confiábamos en la calidad de la cuarta parte... pero no esperábamos tanto. El caso es que Ubisoft volvió a convencernos y este es su mejor juego este año, superando otras promesas como Watch Dogs o Assassin's Creed: Unity. En la región ficticia de Kyrat, en el Himalaya, metemos las narices en una tensa y emocionante guerra civil cuando pretendíamos esparcir las cenizas de nuestra madre, pero son las actividades adicionales o repentinas en este bonito mundo lo que realmente engancha. Todo el conjunto está muy bien montado, desde los puestos de avanzadilla y torres que esperan los fans hasta los elementos más novedosos de este capítulo. Dicho esto, es un juego de mundo abierto de Ubisoft, por lo que también hay muchas cosas que resultan muy familiares. Pero que eso no te eche para atrás; repetimos que es el mejor juego de Ubisoft en 2014.

6. Civilization: Beyond Earth

Firaxis lo ha vuelto a hacer. El talentoso equipo de expertos en títulos de este género ha tenido que viajar más allá de la Tierra para conseguir un auténtico juego de estrategia de nueva generación. Celebramos que los juegos 4X se sigan revitalizando en PC y que el legado de Sid Meier todavía se pueda evolucionar para tal fin. La profundidad del sistema de gestión, comercio, expansión y combate es impresionante, y lo mejor es que cada partida depara sorpresas y situaciones imprevistas de las que sólo pueden salir los jugadores con mejor planificación y/o improvisación. De esta forma, el constante proceso de evaluación y toma de decisiones se convierte en el más divertido que recordamos en muchos años. Con tantas oportunidades y formas de personalizar la experiencia, es el juego de estrategia que te lleva hasta el infinito y más allá.

5. Super Smash Bros. for Wii U

Cuando analizamos en su día títulos como Super Smash Bros. Brawl o Kid Icarus: Uprising pensábamos que Masahiro Sakurai había tocado techo en cuanto a dedicación, perfeccionismo y cantidad de detalles y contenido. Estábamos equivocados. El nipón, obseso de todo eso, se ha vuelto a superar y lo mejor es que esta cuarta entrega del diferente juego de lucha de Nintendo no es sólo más completa y variada, sino también mucho mejor equilibrada y, por primera vez, con un estupendo y bastante estable modo online. El paso a la definición HD sienta de maravilla para no perder detalle entre tanto alboroto, más ahora que hasta ocho (!) jugadores pueden compartir televisión. Es uno de los mejores trabajos de todo el año y un título muy difícilmente superable en el futuro.

4. Alien: Isolation

Tras el chasco de Aliens: Colonial Marines, The Creative Assembly, pese a su inexperiencia en el género, han elaborado el homenaje que se merecía la ficción que llevó a la fama a Ridley Scott. ¿La clave? Hacer precísamente lo contrario que el título de acción; hacer que las balas cuenten y que el Alien sea verdaderamente temido.

La verdad es que dados ambos precedentes no esperábamos llevarnos esta sorpresa, por lo que al final ha sido todo un susto en el mejor sentido posible. El material original se ha tratado con tanto cariño y respeto que esta obra interactiva se puede colocar honrosamente al lado del clásico, y no sólo por el trabajo visual y sonoro que le ha valido sendos premios en nuestros Juegos del Año. Es el pánico, la sensación de creerse realmente en la piel de una Ripley aterrada, lo que realmente eleva esta obra.

No está exenta de fallos que en ocasiones te sacan de la inmersión, y el final no está a la altura del resto de la aventura, pero cuando funciona, cuando te metes en el papel y te escondes corriendo, rezando para que el bicho no te haya detectado; cuando pasa por delante de tu escondite y contienes la respiración al mismo tiempo que el personaje, no hay temor más exquisito. Ahí, temblando dentro de armarios y sudando debajo de escritorios, Alien: Isolation se acercó a la obra maestra. Es una de las mejores experiencias del año y uno de los principales referentes del nuevo boom del 'survival horror'. Y al capturar perfectamente la esencia del material original, ya es un clásico moderno.

3. Forza Horizon 2

¿Y qué hace este juego tan parecido a su predecesor tan arriba? Con todo el derecho del mundo, una vez más es cuestión de sensaciones. Reconocemos que la configuración es algo costosa, pero si puedes conseguirla, descubrirás el increíble 'appeal' de un juego a priori dedicado exclusivamente a los amantes de los juegos de carreras... pero que hemos destapado universal en los últimos meses de pruebas.

Necesitas una Xbox One (olvida que existe una versión recortada para Xbox 360), una copia del juego... y un volante decente con Force Feedback. Si te lo puedes permitir, verás cómo cualquier tipo de jugador se sentará y no querrá soltar el volante. Porque el trabajo de Playground Games no es solo la mejor mezcla entre arcade y simulación que recordamos (combinando física relativamente realista, control por volante de Motorsport y un enorme rango de comportamientos y ajustes de muchísimos coches, con una mayor permisividad en las penalizaciones y en el dominio de la máquina), sino que su entorno libre invita a relajarse y tirar millas como ningún otro juego. Sus carreteras, caminos y campos europeos son agradables y creíbles a la vista, pero también invitan en cualquier tramo a seguir rodando sin parar.

Puede que el modo online no esté explotado, o que los eventos en solitario se hagan algo repetitivos, pero en 2014 no ha salido otro juego de ningún género (ni siquiera party games) que hiciera sonreír a tantos tipos de jugadores y personas en nuestras pruebas. Forza Horizon 2 te pregunta como ningún otro juego de coches "¿te gusta conducir?", y como ya sabes la respuesta también sabes cuál es el mejor título de conducción en mundo abierto que existe.

2. Dragon Age: Inquisition

La serie Dragon Age se ha convertido en una especie de favorito de culto entre los fans del género, gracias en gran parte a la profundidad del mundo y a las relaciones que cultivas con tus compañeros y las otras gentes que te encuentras por el camino. Y luego está el sistema de combate marca registrada de BioWare que mezcla acción en tiempo real con un plano táctico general, sencillo para principantes pero con suficiente margen estratégico para los expertos.

Con Inquisition el estudio se ha desviado un pelín respecto a su fórmula RPG de éxito probado con mundos distribuidos, optando ahora por un diseño más al estilo mundo abierto con varias regiones. Da la impresión de un mundo abierto, pero mantiene aquella estructura que esperan los seguidores. Si bien algunas misiones secundarias o menores son de calidad y diversión cuestionable, hemos disfrutado como enanos la variedad de las quests de la historia principal, la enorme elaboración de las historias y la cantidad de elementos y referencias al vasto universo DA que completan y decoran la larga y fascinante experiencia. Particularmente queremos recordar momentazos como algunos puzles escondidos en las profundidades de las mazmorras o la búsqueda de los diez dragones de Thedas.

Los valores de producción, el trabajo artístico, el talento musical y vocal y, sobre todo, la narración vertida por personajes y el propio mundo, vuelven a ser de primerísima línea. Y en este último aspecto, importa lo que tú decidas, qué aventura quieres vivir. ¿Templarios o Magos en el conflicto inicial? ¿Aprovechaste la oleada religiosa para espolear a tus inquisidores? ¿Con quién te enrollaste? ¿Qué elegiste aquí o allá? ¿A quién dejaste atrás? Después de 100 horas con el juego hay tantas opciones que estamos deseando volver a empezar una nueva aventura, quizá subir la dificultad y probar otro estado del mundo vía Dragon Age Keep para ir marcando otras decisiones diferentes.

Dragon Age: Inquisition es un brillante RPG, el título más grande de 2014 y el Juego del Año para cualquier amante del género.

1. Bayonetta 2

La relación entre lo que hacen tus dedos y los aeróbicos movimientos que la atlética bruja ejecuta al instante es lo más emocionante que un jugador de toda la vida ha podido vivir este año.

Platinum Games lleva unos lustros representando el pináculo de los juegos de acción en tercera persona, y Bayonetta 2 perfecciona la joya original convirtiéndose en su mejor trabajo hasta la fecha. Para quien lleve un tiempo entrenando sus manos en el sector, domar a Cereza hasta bailar con ella a la perfección es la práctica más satisfactoria y deliciosa que se puede experimentar. Un amante del género no puede perdérselo y para el resto de usuarios de Wii U esa Cereza es la atrevida y descarada Guinda de su mejor año, que vale más incluso que las mejores versiones históricas de clásicos como Mario Kart, Donkey Kong y Smash Bros. Ahí es nada.

Las animaciones suaves como la seda, ligadas coreográficamente al preciso sistema de combate, son de lo más sugerente que puedes probar, pues no dejan de tentarte e invitarte a desnudarlo, aprenderlo y dominarlo para llegar a la mencionada doma, lo que además requiere un par de vueltas al juego. La bruja de melena mágica sabe encadenar una colección de movimientos que hacen que la cabeza te dé vueltas, y eso sin fijarte en unas situaciones, escenarios y planteamientos que se han creado bebiendo de una imaginación sin límites. Cada avalancha de ingenios increíbles, cada sucesión de enfrentamientos vertiginosos a base de tiros, patadas, caderazos y besos termina en los jefes finales más extravagantes e intensos que te puedes echar en cara; los exámenes más exigentes y gratificantes para esos entrenados dedos. Una visión absolutamente espectacular.

Bayonetta 2 es la comunión perfecta entre mando de juego y acciones en pantalla. Es la definición de gameplay. Es el nuevo máximo exponente de un género clásico. Es el Juego del Año 2014.