Guía de sigilo de Dishonored 2

Por fin, Arkane Studios ha terminado Dishonored 2 y hacia finales de la semana pasada, la sigilosa continuación salió para PC, PS4 y Xbox One... y madre mía, qué juego. Sin duda alguna, las fantásticas mecánicas que tiene, unido al impresionante diseño de los niveles y a la historia tan inmersiva que ofrece, hacen que sea uno de nuestros títulos favoritos de 2016. Eso sí, hay que aprender bastante para manejarte, así que pensamos que te iría bien una guía para empezar en Karnaca.

Escoge un personaje

La última vez no había que elegir personaje, pero ahora hay que escoger entre Corvo, del primer juego, y su hija, la emperatriz Emily Kaldwin. Gracias a las habilidades únicas que cada uno tiene, ambos personajes parecen muy distintos y la variedad de sus características se extiende a toda la experiencia (a menos que seas de hacer partidas "sin poderes", en cuyo caso la diferencia es meramente estética).

Corvo vuelve con Guiño, su clásico movimiento del primer título, y la complementa con sus capacidades para manipular el tiempo, poseer a las ratas (e incluso llamar a una horda de animalillos para comerse a sus enemigos), enviar una ráfaga de viento y ver a través de las paredes.

Por otra parte, Emily puede moverse por ahí con Far Reach, que le permite transportarse por distintos lugares a toda mecha. Además, también puede ver a través de las paredes, pero hasta ahí llegan las similitudes entre los dos protagonistas. Emily también puede hacer que sus enemigos caigan en un trance, atar a los PNJ para que sufran el mismo destino cuando les ataca, transformarse en una sombra e incluso crear un clon de sí misma para distraer a los guardias.

Las diferencias son muchas y variadas y, por eso, está bien que mires que conjunto de habilidades vas a utilizar durante tu primera partida. Merece la pena añadir que la primera vez siempre será la más difícil, porque no sabes dónde están las cosas, así que tenlo en cuenta.

Nosotros probamos con Emily la primera vez, solo porque era nueva, pero igual tú prefieres algo más familiar, como Corvo. Depende de ti, pero asegúrate de lo que quieres, porque no podrás cambiar de opinión durante la partida.

Elige un estilo

Dishonored 2 ha sido diseñado para que lo juegues varias veces y es evidente que Arkane espera que juegues, por lo menos, un par de veces (una con cada personaje). Por eso, seguramente querrás disfrutar de la experiencia jugándola de manera distinta, para poder aprovecharla al máximo.

Por ejemplo, para tu primera partida, puedes hacer como nosotros y escoger a Emily y jugar muy agresivamente con ella. Nosotros ajustamos sus habilidades hacia los ataques sigilosos, mejorando Shadow Kill, que hace que los cadáveres desaparezcan tras morir, así como los poderes de Far Reach y Dark Vision.

La otra opción que tienes es jugar de forma no violenta, dejando a los guardias inconscientes y escondiendo sus cuerpos, o incluso escabullirte sin que se den cuenta. Los dos personajes tienen habilidades que hacen que cualquier opción que escojas sea viable, ya sea poseer ratas para llegar a los sitios más difíciles o enviar clones para distraer a los guardias mientras tú pasas tranquilamente.

Eso sí, te recomendamos una cosa: sé minucioso. Nosotros no conseguimos toda las runas que nos habría gustado obtener durante nuestra primera partida y, por eso, no pudimos desbloquear las habilidades únicas de Emily a tope. Por eso, desde el principio, tómate el tiempo que necesites para buscar todas las runas que puedas, más que nada porque son la clave para desbloquear todas las características mágicas (que probablemente son lo más divertido del juego).

Ahora bien, si no quieres confiar tanto en la magia, siempre puedes optar por la opción "sin poderes" y jugar sin usar las bendiciones del Forastero. Lo cierto es que Arkane se ha asegurado de que, ya seas agresivo o conservador, violento o pacífico, sobrenatural o normal, puedas jugar como tú quieras.

Por otro lado, puede ser tentador matar a alguno de los personajes principales que te encuentras por el camino y hay un par de ellos que se lo merecen de verdad, pero también hay recompensas si los dejas vivir. Por eso, piénsate dos veces lo de tener piedad con ellos y la experiencia te premiará por calmar tu sed de sangre.

Armas y mejoras

Tu espada está siempre en tu mano derecha, pero en la izquierda podrás equipar una gran variedad de habilidades y armas. A través del menú radial, podrás cambiar rápidamente entre poderes, pistola o ballesta. Cada una tiene sus ventajas y te las explicaremos a continuación.

Te encontrarás un montón de munición para la pistola y, si no te importa hacer ruido durante una misión, este arma se convertirá en la forma perfecta de lidiar con tus rivales (sobre todo si la combinas con uno de los poderes de Emily, Dominos, con el que puedes vincular a los enemigos, dispararle a uno y matarlos a todos). No obstante, también es cierto que se trata de un arma un tanto cruda y los más puristas no la utilizarán tanto, porque llama demasiado la atención. Además, si quisieses jugar a un 'shooter', estarías jugando a Battlefield 1, ¿no?

Por eso, la ballesta es mucho más flexible y puedes cambiar tu estrategia con las distintas saetas que tiene. La opción más normalita es bastante silenciosa y mortal si consigues acertar en la cabeza (de todas maneras, ten cuidado con los que llevan casco). Sin embargo, las cosas se ponen interesantes cuando empiezas a mezclar las cosas. Los dardos somníferos son geniales para jugar en modo no letal, aunque recuerda que su efecto no es instantáneo. También hay dardos incendiarios, que son mortales y macabros a partes iguales, pero nuestros favoritos son las flechas con punta venenosa, que provocan pánico y pérdida de memoria en aquellos a los que afectan, de forma que se largan corriendo de la escena del crimen.

Por otro lado, también están las granadas (muy ruidosas y solo para emergencias, por así decirlo) y las minas, que explotan con metralla o con una carga eléctrica para aturdir a los enemigos (algo tremendamente útil contra los Soldados Clockwork).

Explora y recoge

A medida que exploras el mundo, te encontrarás con un montón de recortes de papel, pero los que más te interesan son los azules. Estos planos activan nuevas mejoras que podrás comprar cuando visites a un comerciante del mercado negro, así que ten en cuenta que si algo te gusta mucho de tu ballesta o de tu pistola, puedes mejorarlo. Lo mejor de todo es que puedes equiparte con más talismanes de hueso y eso es algo que también puedes mejorar.

Cada entorno está repleto de cosas para leer y recoger. Las historias, las cartas y los extractos de libros no te proporcionarán ninguna recompensa monetaria, pero te darán una perspectiva mucho mejor del mundo que te rodea, así como algunos objetos extra que puedan estar por el vecindario (pensamos en una caja fuerte en concreto, cuya combinación podrás descubrir si lees los papeles de una habitación cercana).

De esta manera, los cuadros son igualmente importantes (quizás una indicación de la importancia que Arkane le da al arte) y encontrarás muchos objetos que puedes recoger y convertir en dinero para gastarlo en mejoras. La verdad es que merece muchísimo la pena que seas minucioso y que cojas todo lo que puedas, porque siempre podrás gastar el dinero en recursos y mejoras en el mercado negro. Por eso, rompe todos los nidos, coge todo lo que veas, roba a los civiles siempre que puedas y, lo más importante, no dejes de estar atento a las runas y a los talismanes de hueso.

De hecho, los objetos más importantes de todo el juego son, sin duda alguna, las runas y, concretamente, te recomendamos que busques los santuarios de las runas en cada nivel, porque te dan dos por las molestias y un poco de historia sobre el Forastero. Las runas están ligadas a tus poderes y cuantas más encuentres, más podrás desbloquear. Haz que sean tu prioridad, por encima de los talismanes, porque estos últimos pueden ser muy útiles, pero no siempre.

Un consejo extra: si ves un objeto que te interese y hay guardias y/o civiles obstaculizando entre medias, con Corvo podrás ralentizar el tiempo para coger dicho objeto sin mayores problemas. Ojo, eso no significa que no te vean, pero se moverán tan lentamente que nunca te cogerán. Es un truco muy útil, pero también consume bastante maná, así que úsalo solamente en ocasiones especiales y solo si estás preparado para salir por patas a continuación.

Gestiona tus recursos

Si eres de esos a los que les gusta buscar en todas partes, entonces no nos cabe duda de que tendrás suficientes dardos, balas y pociones de salud para que te duren hasta el final, pero no todos somos así. De hecho, seguro que habrá muchos que quieran avanzar a tope en la historia y centrarse en la narrativa, sin explorar las cuatro esquinas de cada nivel.

Cuando cargues como un toro hacia tu primer objetivo, no tardarás en quedarte corto en recursos y te verás obligado a cambiar de estilo cuando la munición y la salud empiecen a escasear.

Por ejemplo, si te quedas sin dardos de la ballesta (y tienes claro que no vas a entrar a tiroteo limpio), entonces te verás un poco limitado en cuanto a ataques a distancia. Si tampoco te hace buscar suministros, entonces te recomendamos que selecciones con cuidado tus objetivos y que solo saques la ballesta cuando llegues a una zona en la que tengas que utilizarla sí o sí porque hay un guardia en un lugar extraño.

De la misma manera, también es difícil controlar el maná. El truco es tomarte tu tiempo. En pocas palabras, si utilizas tus poderes seguidos y rápidamente (es decir, antes de que se recargue el medidor), te quedarás sin él en un periquete. Por eso, nosotros te recomendamos paciencia y que midas bien tus acciones, y solo deberías utilizar Guiño y Far Reach juntos cuando te persiga un grupo de enemigos y tengas que salir por patas.

Tómate tu tiempo

Una última para terminar. Dishonored 2 es un título fantástico y que hay que saborear con intensidad. Tómate tu tiempo, sumérgete en la atmósfera, explora, experimenta, pero, por encima de todo, diviértete.