FIFA Street

Otro ‘reboot'. El nuevo FIFA Street no será el cuarto, sino... el primero otra vez. Cuando las cosas no salen del todo bien, o cuando hay que apuntar en otra dirección, lo suyo es intentar que el jugador no identifique el nuevo título como una entrega más de la serie, sino como una gran novedad, un nuevo esfuerzo. FIFA Street, aunque aún está muy verde, no se está preparando nada mal.

Fue el anuncio de EA Sports durante la Gamescom 2011, y quizás este sea el momento idóneo para plantear un nuevo Street. La marca FIFA se ha consolidado durante varios años con el simulador de fútbol de más calidad, así que hay mucho material que se puede aprovechar y adaptar a los partidos callejeros, por no hablar de la inyección publicitaria.

Por eso fue el director creativo de anteriores FIFA el que nos enseñó el juego en Colonia y el que capitanea el nuevo proyecto. Del juego "mayor" cogerán su potente motor gráfico y de impactos, cantidad de modelos, mecánicas de juego...

Pero si siguiéramos así, cuando llegue a las tiendas en junio se parecería demasiado al típico FIFA anual. El fútbol de la calle exige muchas más filigranas, colegueo, relajación y un ambiente mucho más de barrio en el que hasta se pueda aprovechar el mobiliario urbano.

Obviamente, con menos espacio, menos compañeros y más libertad para hacer locuras, el fútbol de Street debe ser también más accesible, para que cualquier colega que venga a verte pueda echarse una pachanga. La velocidad también es diferente, con eso de pisarla repentinamente para pararse o colocarse de dos zancadas ante el portero rival. Pero donde más se hará hincapié es en los trucos para ‘fardar'.

Toda la magia está designada al stick derecho. Mover la pelota cuando el jugador está parado, pasarla por debajo de las piernas, marear con ella al defensor, elevarla para hacer un sombrero o tocar sin dejarla caer... hay multitud de gestos de este tipo, "más del doble de trucos que en FIFA", nos decían (y aún quedan muchos por implementar), y todos surgen de forma intuitiva con el nuevo sistema de control.

Quizás estos juegos arcade sean más difíciles de vender porque, más allá del fútbol en sí y de los distintos campeonatos, no traen toda la parafernalia que rodea a los simuladores, con sus licencias, campeonatos oficiales, fichajes, formaciones... Si bien es inevitable que falten muchas de esas cosas, EA Sports sabe que tiene que ofrecer un producto muy completo, que no se quede en la estantería después de la primera tarde.

Habrá jugadores conocidos, pero no serán el centro del juego, pues lo que interesa es recrear la experiencia que todos hemos tenido de pequeños en el colegio o en las pistas del barrio. Podrás crear tu personaje con un completo editor de esos a los que nos acostumbra EA, mientras que la "chicha" la pondrán aspectos como la configuración del modo de juego o la multitud de escenarios. Ambos se mezclan para jugar de muchas formas distintas.

Hay escenarios de todo tipo, callejeros o más profesionales, con público. Incluso vimos una recreación de la Plaza Catalunya. En algunos hasta se puede aprovechar la pared para hacer... "paredes", eliminando el fuera de banda, imprimiendo aún más velocidad y emulando esas pistas cerradas que seguro hay en tu ciudad. Es lo que llaman "Wall Play".

Otros "estadios" cambiarán las reglas de otra forma, por ejemplo con porterías más pequeñas que las oficiales. En total, hasta 35 pistas con diferentes ambientes y posibles reglas. Y para jugar en ellas, y aquí está la otra clave que variará tus partidos y que diferencia a Street de FIFA, podrás montar equipos de todo tipo: 1 contra 1, 6 v 6... o hasta preparar partidos de Fútbol Sala (Futsal) con todos los parámetros reglamentarios.

Después de la presentación echamos un par de pachangas contra algún periodista alemán, ganando y perdiendo. La verdad es que hay que "cambiar el chip" y no pensar en este juego como uno normal de fútbol, sino como algo más ágil y lleno de trucos. En cuanto empiezas a cogerle el ritmo se puede hacer muy divertido, y sobre todo, muy vacilón cuando te salen jugaditas para chulearte al rival. El control era sencillo (un botón para pararla, otro para modificar las acciones, tirar, robar y pasar) y el movimiento de los jugadores correcto y atractivo, pero como el juego estaba muy verde aún, ciertos bugs o cosas sin hacer impidieron que nos hiciéramos una idea más clara de si se convertirá en una experiencia multijugador a la altura de un Mario Strikers, pero menos extravagante y apto para todo amante del fútbol. Es lo que queremos ver en cuanto termine la temporada (real) que acaba de empezar.