DriveClub - impresiones E3

El juego de carreras de PlayStation 4 que acompañará a la consola en exclusiva en su lanzamiento a finales de año apuesta mucho por el aspecto social, estructurando su dinámica en torno a clubs de coches, pandillas de amigos que recopilan cada punto ganado individualmente y lo suman a su puntuación general de club. Esa puntuación se compara después con la de los clubs rivales de todo el mundo.

La conducción de DriveClub se inclina más hacia el realismo que hacia el estilo arcade, con un manejo que podríamos asemejar al del reciente Grid 2, pero los desarrolladores quieren resaltar que clavar la trazada perfecta no es la única forma de triunfar. Además de eso, juzgan tu ejecución de derrapes y tu velocidad máxima en cada vuelta.

Así es como funciona: cuando ruedas a toda pastilla por el circuito que hayas escogido, las curvas y ciertos tramos se ven revestidos de unas líneas de neón de principio y fin que señalizan un mini-desafío. El juego coge los resultados de tu rival más cercano -mirando primero en tu lista de amigos y luego a nivel mundial- para encontrar una puntuación de derrape, línea de carrera o velocidad punta que supere la tuya por poquito, y la superpone junto a tu mejor marca anterior como parte de la interfaz de usuario. Si la superas ganarás unos cuantos puntos... y a la vuelta siguiente te compararán con un rival aún mejor. Esta constante nivelación de jugadores y resultados en plena carrera quiere conseguir que siempre haya un reto por delante para mejorar tu destreza en el circuito, y el hecho de que cualquier desafío pueda plantarte frente a un compañero de club mantiene una rivalidad amistosa continua.

El sistema social, lógicamente, estaba simulado para la versión demo del E3, bebiendo de los datos registrados por los que habían jugado a la demo durante los días de la feria, cuyas marcas y rostros aparecían en pantalla (el PS Eye te saca una foto al principio de la partida) según te aproximabas a los tramos especiales. El circuito de la demo es Kinloch, Escocia, en el que la puesta de sol baña una pista relativamente llana repleta de largas rectas y unas curvas de casi 180º que son una puñeta de dominar. Durante un rato rodamos más tiempo sobre la gravilla y contra los muros que besando el asfalto, haciendo rueda cuando pisamos en exceso. El mensaje de "failed" que aparece en pantalla al no alcanzar la puntuación objetivo es otro puñetazo en la cara.

Teniendo en cuenta el diseño del circuito hay pocas cosas que pedirle a los detalles junto de la calzada; en este caso todo depende de las montañas en la lejanía y de un amplio plano de un lago que se va anaranjando a causa del sol poniente. Pornografía paisajística 'next-gen', sin duda. Cuando empleamos el stick derecho para echar un vistazo a los lados del coche, advertimos las ruinas de un castillo, grupos de aficionados que siguen la carrera detrás de barreras, pero todo esto son breves instantes, pues a estas velocidades los ojos deben seguir puestos en la carretera.

Nos subimos a un McLaren RC, Hennessey Venom GT, finalmente una carrera más con un Audi R8, pasando de los sticks analógicos al control por movimiento. La segunda opción es un completo desastre. Aunque podría ser divertido, mover el mando de esa forma y durante ese rato en el modo desde dentro del coche, sin conocer el coche y sus posibilidades de derrape, terminamos dando vueltas demasiadas veces durante la primera vuelta. Echamos un ojo al simulador de Gran Turismo 6, con sus volantes de verdad, y volvemos a pensar que todavía queda mucho para que el control por movimiento pueda intentar convertirse en la opción por defecto para los entusiastas del motor.

Como decíamos, era una demo muy corta. Como juego de carreras se jugaba bastante bien, pero serán las funciones sociales las que deberán definir la experiencia DriveClub a la larga. Los juegos de coches han inundado el E3 de este año. Tanto The Crew como Forza Motorsport 5 miran a través de las lentes sociales para enmarcar su sistema de juego. Incluso Need for Speed: Rivals quiere que tú y tus amigos vayáis juntos a correr. Por lo tanto la competencia será muy fuerte y necesitaremos una consola conectada a internet y un mundo entero de jugadores rodando a nuestro lado para comenzar a adelantar en qué puesto quedará DriveClub.

Gameplay E3 2013: