Chaos Reborn - primeras impresiones

Julian Gollop probablemente sea más conocido por la clásica franquicia que creó en los años 90: X-COM. Para muchos se trata de una fórmula que ni siquiera las segundas partes ni las versiones posteriores han podido mejorar; pero hoy nos centraremos en otro clásico actualizado que hemos podido probar, y que además es otra de las creaciones más famosas de este desarrollador: Chaos.

El juego original, Chaos: The Battle of Wizards, vio la luz casi diez años antes que X-COM. Chaos Reborn es un 'rework' fidedigno del título original, que ha dado el salto desde el ZX Spectrum hasta los ordenadores modernos, dejando atrás treinta de años de progreso. Por eso impresiona que, dada la adoración del título por los sistemas de juego antiguos, resulte tan fresco y actual. El hecho de haber podido probar una versión sin terminar nos demuestra que hacer Chaos más accesible fue una idea muy inteligente.

Nuestra introducción a Chaos fue brutal y breve. Era nuestra primera vez (después de todo, cuando el juego salió en los 80, acabábamos de dejar atrás los pañales) y jugábamos contra el creador del juego. Gollop no se contuvo y, mientras nos explicaba los sistemas básicos y cómo funcionaba todo, se movió rápido y nos despachó del campo de batalla sin problema alguno.

Si no estáis familiarizados con Chaos, antaño o ahora, nosotros os contamos el concepto básico: dos hechiceros (o tres, o cuatro, o incluso dos equipos de dos) se enfrentan en una pequeña arena. Cada uno tiene una selección de hechizos asignada, pero, y esto es un rasgo característico del título, el libro de conjuros es aleatorio (al menos en el modo de juego que pudimos probar). Nunca sabes qué te puede tocar y, por eso, debes tener preparadas unas cuantas estrategias nuevas cada vez que juegas, dependiendo de la mano que te toque.

Durante la batalla, se pueden utilizar tres tipos de magia para invocar criaturas y lanzar hechizos: Neutral, Chaos o Law. Chaos y Law son enfoques opuestos a la hora de jugar y los hechizos que te toquen dictarán qué camino seguirás. Cuantos más hechizos de Law lances, más probabilidades habrá de que este tipo de hechizos tengan éxito en el futuro. Los hechizos de Law empiezan con ataques mágicos básicos y con ellos puedes invocar elfos, enanos y, al final de cada ronda, poderosas criaturas como los gigantes.

Cada hechizo tiene un porcentaje que dicta la probabilidad de que puedas lanzarlo. Así, los hechizos menos potentes tienen más probabilidades de acertar al principio (pero, como pudimos descubrir durante nuestra prueba, un porcentaje muy alto no te garantiza que funcione). De todas formas, siempre puedes intentar engañar al enemigo con un hechizo de ilusión (que funciona el 100% de las veces), invocando una versión falsa de una criatura que puede causar daño pero que es fácil de vencer con un hechizo que derrota a las ilusiones invocadas (y que es inofensivo contra las unidades originales).

A pesar de todo, lanzar un hechizo para revelar que la unidad de tu enemigo es real puede no parecer un riesgo, pero dado que hay un límite de veinte rondas y que tu mago usa un hechizo en cada turno, equivocarte puede suponer un revés en tu estrategia, sobre todo si tu oponente consigue lanzarte hechizos.

Además, hay diferentes hechizos para diferentes ocasiones. En nuestra segunda partida, Gollop, siguiendo la rama mágica del Chaos, lanzó un hechizo que rodeó a su mago con un brote de bosque mortífero, lo que le permitió usarlo como un caparazón de tortuga para poder recuperarse de un inicio un poco lento. Entonces, invocó un guerrero esqueleto para que le protegiese y consiguió que no hubiese forma de sobrepasar sus defensas. De hecho, a pesar de contar con más criaturas, fue capaz de aguantar nuestra ofensiva y montar un contraataque que finalmente le dio la victoria.

Por otra parte, hay algunas unidades que solo reciben daño de otras criaturas similares como los zombis; algunas unidades se mueven más que otras; algunas son mejores bloqueando en defensa y otras atacan a distancia. Lo cierto es que hay mucha variedad y nos han prometido que el juego tendrá 80 hechizos, lo que significa que habrá un montón de resultados y muchas posibilidades tácticas diferentes.

El contraste que existe entre Chaos y Law es un factor clave, ya que obligará a los jugadores a seguir un camino táctico en concreto. También se pueden lanzar hechizos Neutrales, que están al margen de la división Chaos/Law, y que pueden sacarte de una situación peliaguda (puedes invocar leones y águilas, por ejemplo); pero, al final, no te ayudan a incrementar tus posibilidades de acceder a los hechizos más poderosos de Chaos o de Law, sino que, como mucho, te proporcionan una ayuda temporal para salir del apuro.

Al menos de momento, los entornos son escarpados y sombríos. Sin embargo, nos han prometido que habrá más y que estarán decorados con diferentes aspectos, así que pronto veréis hierba verde y las calles de alguna ciudad. Las arenas se dividen en baldosas hexagonales, con diferentes niveles que te pueden dar bonificaciones de ataque. Hay tres niveles y los jugadores se pueden mover entre el uno y el dos y entre el dos y el tres, pero no entre el uno y el tres, tal y como descubrimos cuando invocamos a una unidad en una baldosa de nivel 3 solo para que contemplase toda la partida desde su elevada posición (porque no pudo bajar).

Aunque es cierto que hay mucho que asimilar, el juego también es bastante intuitivo y no tardamos mucho en tener claras las ideas principales. Probablemente sea un juego de estos que son "fáciles de aprender, difíciles de dominar". Hay que tener en cuenta el elemento de la suerte, porque los libros de hechizos son aleatorios y los conjuros amenazan con fallar muy a menudo (nosotros fallamos dos hechizos de escudo seguidos que tenían un 75% de probabilidades y antes habíamos fallado un conjuro de invocación que tenía un 90%). Por eso, será muy interesante ver cómo se pone la gente con este título tan poco predecible. A nosotros, por lo menos, nos ha gustado.

Aunque probablemente no estemos solos. Ya hay un montón de fans del título original por ahí fuera, fans que están ansiosos por ver cómo se actualiza la experiencia que ellos recuerdan. Añádelos a todos a la nueva generación de jugadores, que no están familiarizados con Chaos y sus encantos, y tendrás una audiencia bastante decente para que apoyen la campaña de Kickstarter que empieza precisamente hoy. Con ella, Gollop y su equipo pretenden conseguir 220.000 dólares para terminar el proyecto y lanzarlo al mercado. Si lo consiguen, tanto los nuevos como los antiguos fans recibirán un 'ruleset' que refleje el clásico de 1985, así como algunos modos que permitan construir un mazo de hechizos, como si de un juego de cartas coleccionables se tratase.

Volviendo a la campaña de Kickstarter, le preguntamos al diseñador si, al alcanzar cierta cantidad de dinero, podríamos conseguir elementos adicionales (como nuevos hechizos y criaturas); pero Gollop prefiere seguir el guion original y no alejarse mucho de las raíces del juego. Así, nos confirmó que se añadirán contenidos nuevos a través de actualizaciones (y no como DLC), pero no esperéis que hagan muchos cambios porque la mayor parte de los usuarios ya están contentos con lo que tienen. Lo que quizás sí veamos es que el título salga para varias plataformas. En principio, Chaos Reborn saldrá para PC, Mac y Linux pero, en cuanto a tablets y consolas, la decisión todavía está "pendiente de investigación".

Desde luego, lo que sí podemos deciros con seguridad es que nuestra impresión de este clásico renovado es positiva. Sobre todo después de que nos dijesen que saldrán más modos de juego y de saber que si jugamos con más gente en el multijugador (sobre todo las batallas de dos contra dos), el título será aún más divertido (tal y como dice Gollop: "hace falta coordinarse mucho con la otra persona"). Esperamos ver más de este título y esperamos poder jugarlo más, así que confiamos en que la campaña de Kickstarter alcance su objetivo y podamos ponerle las manos encima a Chaos Reborn más pronto que tarde.