Risen 3: Titan Lords

Con el curioso Risen 2: Dark Waters el estudio Piranha Bytes demostró estar a la última con ideas modernas. La empresa afincada en Essen, Alemania, nos ofreció nuevas mecánicas de juego, reajustó su sistema de combate y envolvió toda la aventura en una temática inédita de piratas. Sin embargo, la experiencia se quedó corta y no alcanzó su grandeza potencial, pues al equipo le costó estar a la altura de sus propias ambiciones. El juego estaba repleto de buenas ideas, pero su implementación quedaba casi siempre poco satisfactoria. Y el comienzo del juego era demasiado lento y perezoso. A los fans les decepcionó la falta de personalidad, encanto, solidez o finura.

El equipo parece ahora convencido de su capacidad para redimirse, al menos en cuanto a esa última crítica. El nuevo Risen 3: Titan Lords no sólo incorpora varias 'guilds' (gremios) y facciones, sino que también significa un retorno a una ambientación mucho más familiar para esos fans: la fantasía medieval tradicional. Hay bosques y ruinas por explorar, minas para los fans de Gothic, vuelve la magia de los cristales y mucho más. Aun así, no abandona por completo las innovaciones introducidas con su predecesor, pues los piratas también jugarán un papel en esta aventura. Existen islas y zonas inspiradas en el Mediterráneo y en los trópicos, algunas incluso recuperadas de Dark Waters. Buena noticia es, por tanto, que esta vez podamos nadar.

La historia es la de un héroe sin nombre. Los titanes siguen librando la guerra por el mundo, causando sufrimiento. Al principio del juego, un poderoso Lord de las Sombras absorbe nuestra alma, pues no contamos con los medios necesarios para plantarle cara. Naturalmente, toca reclamar lo que hemos perdido, pero antes necesitamos algo de asistencia mágica, y ahí es donde comienza nuestro viaje. Efectivamente, no es el comienzo más innovador que hayamos visto, pero tenemos libertad para evolucionar hacia el lado humano o hacia el lado demoníaco.

El sistema de combate, por lo que podemos contar tras una breve introducción, funciona adecuadamente. Puedes usar tu espada y la magia contra los enemigos, y mucho énfasis se pone en los combos que debes sincronizar en el momento oportuno. Luchamos contra guerreros esqueletos, rinocerontes, cangrejos ermitaños gigantescos y monísimos patitos y pavos. En realidad, parece que el mundo de juego ofrecerá una buena amalgama de opciones para divertirse, y por algunas acciones ganamos puntos de alma, mientras que otras nos los quitan. También está en marcha detrás de las cámaras un sistema de fama que va recompensando según la dificultad de cada tarea.

Risen 3: Titan Lords aprovecha un motor de juego mejorado. Se percibe un mayor nivel de detalle, pero todavía notamos que los diálogos no están muy animados. Comparado con otros esperados RPG de fantasía como The Witcher 3: Wild Hunt o Dragon Age: Inquisition, parece un poco anticuado. Pero la presentación no es el factor más importante para Piranha Bytes, pues se especializan en las mecánicas de juego y en la exploración. Además, la belleza es una cuestión subjetiva, y al ver este juego como un título para un nicho concreto, ese apartado tampoco nos llega a desconcertar.

"Es fácil poner esas excusas", podrías pensar. Pero lo cierto es que Piranha Bytes tiene claro que quiere ir a contracorriente y desarrollar algo que no sea necesariamente 'mainstream' o para todos los públicos, buscando su propio hueco. Para el equipo, lo más importante es ofrecer al jugador variedad y un montón de opciones de actuación. Siguiendo esta filosofía, tras lo que describen como una introducción lineal, Risen 3: Titan Lords, como hiciera su antecesor, se abre para ofrecer una experiencia no-lineal. El jugador decide adónde ir, y no existe una secuencia de sucesos prefijada. Al terminar encontrará varios finales y de camino varias formas de resolver las 'quests'. Es un enfoque compartido por juegos como Divinity: Original Sin y algo que agrada personalmente al que escribe.

Si lo hacen bien, esta propuesta consigue sumergir al jugador en el mundo virtual de una forma imposible para un enfoque lineal. No nos llevan de la mano, sino que vamos marcando nuestro destino por nuestra cuenta. En cierto modo, el estudio quiere hacer un juego con el espíritu de los viejos Gothic. Y todavía deseamos que introduzcan nuevas mecánicas, contra el deseo de los fans más conservadores. Por ejemplo, los más acérrimos suelen pedir la eliminación del mini-mapa, pero es algo que naturalmente se puede desactivar, por lo que no hay que pensar que toda novedad es algo malo. Especialmente cuando interesa que nuevos jugadores conozcan esta aventura, llevarlos un poco de la mano ayuda mucho en los primeros pasos.

Risen 3: Titan Lords estará listo para lanzamiento, en principio, el próximo mes de agosto, dos años después de Risen 2: Dark Waters. Las versiones para consola las adapta un estudio externo, pero internamente han destinado más recursos para garantizar una aventura más satisfactoria para los que juegan en el sofá. Esperamos que hayan aprendido la lección a este respecto. Todavía tenemos algunas sensaciones encontradas sobre el juego, pero el ansia por explorar un amplísimo mundo RPG está quedando por encima. Una aventura en la que tenemos que buscarnos la vida. ¡No nos decepciones, Risen 3!

Actualización: hoy mismo se ha anunciado que Risen 3: Titan Lords estará a la venta el próximo 15 de agosto.