Sunset Overdrive - impresiones E3

No sabemos desde vuestros monitores, pero visto in situ, durante la feria, uno de los juegos que más atención y público acaparó durante la semana del E3 fue sin duda el Sunset Overdrive de Insomniac Games. Algo diferente, algo refrescante para el segmento de los shooter. En parte recuerda a Jet Set Radio, en parte recuerda a Dead Rising y a Ratchet & Clank, si quieres una definición vaga. Pero quedarse ahí sería odioso, porque también aporta su propio sabor con mucho carácter y rompiendo cada dos por tres el cuarto muro. Puede que ese carácter y los chistes que va dejando calen entre unos jugadores y no caigan tan bien entre otros; en nuestro caso, hubo miembros de la expedición Gamereactor que están encantados con el tono y otros que piensan que se están pasando un poco.

Dicho eso, todos estamos de acuerdo respecto a las sensaciones que deja el juego a los mandos. Es divertido, adictivo y efectivamente muy satisfactorio. Y hemos llegado a esta unanimidad tras probar una selección de las hilarantes armas (en nuestra opinión la mayor baza del juego), tanto en la demo multijugador (8 jugadores cooperando contra oleadas de enemigos) como en la porción en solitario (demostrada en la conferencia pre-E3 de Microsoft). Entre nuestras favoritas están el TNTeddy (que dispara ositos de peluche explosivos), Captain Ahab (un arpón muy útil en encuentros aislados) y un arma de hielo capaz de congelar a un grupo de enemigos. Una vez llegamos a congelar a un par de adversarios para luego atravesarlos con un movimiento de deslizamiento rápido. Brillante.

'Grindar' por los escenarios de Sunset Overdrive es tan fácil como pulsar el botón X, y hay un montón de elementos dispuestos en el decorado para hacerlo. De hecho, este mundo abierto ofrece tantos saltos y carriles para 'grindar' que te vuelves loco con tantas opciones posibles, lo que significa que no hay un camino tan claro como en, por ejemplo, el mencionado Jet Set Radio. El ritmo del juego y la velocidad a la que atraviesas los entornos probablemente no dejó a Insomniac otra opción que incluir un auto-apuntado bastante pronunciado. Pero dado el estilo de juego, encaja bastante bien. Se supone que debes disparar y 'grindar' a la vez, no enfrentarte a los enemigos a pie y alinear disparos cuidadosamente con tu mirilla (porque si te pones a pasear, te meterás en serios problemas en unos segundos).

Lo que jugamos del modo co-op para 8 jugadores Chaos Squad consistía en misiones de tipo Horda en las que debíamos defender un par de tanques contenedores de Overcharge Delirium XT, la bebida energética que ha convertido a la gente en monstruos adictos. También podíamos poner trampas, lo que aportaba un pelín de estrategia a la experiencia, pero escuchamos que este es solo uno de los muchos tipos de misiones que conformarán el modo Escuadrón del Caos. Y en lugar de apostar por un planteamiento basado en clases como en Fuse, llevas a tu propio superviviente, personalizado y con sus mejoras de armas. Por lo tanto, los roles se reparten sobre la marcha, dependiendo del arma que lleva cada jugador, pero como aquí quien n o corre vuela, tampoco es que estos papeles se vayan a desarrollar mucho en Chaos Squad.

Como nota interesante, las mejoras de armas y el botín se comparten entre todos los modos, por lo que Chaos Squad podría servir como curioso apartado para hacer que el avance en el modo en solitario sea un poco más fácil la próxima vez que lo pongas, pero creemos que para la mayoría será el modo favorito.

Charlando con Ted Price, de Insomniac, pronto quiso recalcar la forma en que se toman el popular género post-apocalíptico (no queríamos llamarlo locurapocalíptico), con un tono desenfadado y bromista que hace que Dead Rising parezca una ficción seria y deprimente. Y por supuesto es muy fácil apreciar y agradecer el salpicón de color que Sunset Overdrive aporta a los shooter, y parece que será igual de brillante a la hora de jugar.