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Aeterna Noctis

Análisis de Aeterna Noctis

Nos hemos cobrado una deuda pendiente con el metroidvania español tras su salida en Nintendo Switch y os contamos qué nos ha parecido.

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Es inevitable que con tantos y tantos lanzamientos que se suceden cada semana haya que tomar decisiones difíciles e injustas con respecto a los juegos a los que dedicar nuestro tiempo y esfuerzo. Pero aunque Aeterna Noctis saliera hace ya casi un año (el 15 de diciembre soplará la vela), Su reciente lanzamiento en Nintendo Switch me dio la excusa perfecta para poder jugarle y pasármelo por completo. Una tarea (qué digo, una hazaña) que he disfrutado, pero que también he visto un claro margen de mejora en algunos aspectos. Lo vemos poco a poco.

Aeterna Noctis

Aeterna Noctis forma parte de esa oleada de títulos metroidvania que confluyeron entre 2019 y 2021. Un buen montón de títulos indies que fueron aportando su esencia propia y supieron ganarse un hueco en un género que resurgió tras años olvidado en un cajón. Nos encontramos en la tierra de Aeterna, donde tiene lugar una lucha eterna (guiño guiño) entre la Reina de la Luz y el Rey de la Oscuridad. En un momento dado, este ciclo sin fin de lucha equilibrada se rompe y el Rey de la Oscuridad cae derrotado, que será nuestro protagonista en la aventura.

Al igual que otros exponentes del género, tendremos que explorar minuciosamente cada rincón de las diferentes zonas mientras vamos adquiriendo habilidades y mejoras para nuestro personaje, mediante un magistral sistema de plataformeo con el que nos desplazaremos por los escenarios de diseño en 2D. Cada zona está muy diferenciada de la anterior, y visualmente es fácil ubicar en qué punto estás del mapa. Tal es la riqueza de los escenarios que, ya en las partes más avanzadas de la partida, casi da la sensación de ser un título completamente distinto al de las primeras horas, aunque también se percibe por cómo ha progresado nuestro personaje.

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Aeterna NoctisAeterna Noctis

Una progresión que al comienzo de la aventura parece algo plana y sin mucha inspiración, porque el ritmo del juego es dispar y parece que las fases "tranquilas" y los períodos más animados no están estructurados de una forma cómoda. Pero poco a poco vas desarrollando tus poderes, mejorando las armas y obteniendo ventajas (como salud o pociones) y acabas convirtiéndote en un guerrero ultrapoderoso con infinidad de posibilidades. Pero cuidado, porque el juego es implacable y la dificultad no nos dará ni un solo respiro. Quizá ese sea otro de los puntos más destacados frente a otros títulos del género: Aeterna Noctis es muy exigente, y cada fallo se penaliza sin piedad. Hay secciones de movimiento que habrá que repetir más veces de lo que la paciencia permite, y eso sin contar los combates, donde el juego se descompensa respecto a los casi sobresalientes puntos anteriores. Me explico.

El combate en Aeterna Noctis depende mucho del movimiento. Y aunque se nota que en esta versión de Switch Aeterna Game Studio ha hecho esta mecánica mucho más fluida que aquella primera vez que probé el juego en su salida en PC, resulta confuso en ocasiones entender dónde están las hitboxes de los enemigos y dónde las propias. Superar determinadas fases de los combates contra jefes adquiere un hándicap extra por el doble filo del estilo visual, y es que los tonos de los ataques y del fondo del escenario son tan parecidos a veces que, sencillamente, no ves la trayectoria del golpe, y mueres sin remedio. Además, cada jefe tiene un patrón distinto en su combate y habrá que aprender cómo derrotarlo a base de ensayo y error, y algunos son verdaderos quebraderos de cabeza por la cantidad de elementos en pantalla. Y esto pasa porque nuestros ataques se sienten toscos, marcados y casi"lentos" respecto al ritmo de la acción.

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Por suerte, la ambientación y la forma de contar la historia ayudan a que las secciones de combate en las que flojea se mitigue un poco en la experiencia general. Las secuencias cinematográficas con las que se va desvelando la historia (con giro inesperado incluido) son muy originales y detalladas, con ese estilo como si de un mosaico se tratara. Y la traducción es notable también que sumado al estilo visual hace que sea muy disfrutable moverse por el entorno, aunque tenga secciones tremendamente complicadas. Los desarrolladores del juego son muy conscientes de esto, y por eso los puntos de guardado y reaparición no penalizan tanto la muerte del personaje. En Aeterna Noctis están mucho mejor distribuidos que otros títulos exigentes como podrían ser Dark Souls o Hollow Knight. Quizá incluso demasiado benevolentes en este aspecto, pero lo veo una decisión lógica por cómo se ha concebido el enfrentamiento con los enemigos.

Aeterna Noctis constituye un desafío que parece pensado para aquellos jugadores veteranos del género que busquen un punto extra de desafío y una aventura larga, exigente y con un elemento de plataformas superior al de la mayoría de metroidvania en la actualidad, y un sistema de combate al que cuesta acostumbrarse y que necesita mejorar, pero que tampoco se convierte en un obstáculo insalvable para ver los créditos finales del juego. Un primer título para un estudio que esperamos que siga dejándonos otros títulos para el recuerdo.

Aeterna NoctisAeterna Noctis
08 Gamereactor España
8 / 10
+
Una progresión muy bien lograda. El estilo de movimiento y el elemento de plataformas es delicioso.
-
El combate es muy tosco y confuso. Algunos diseños pueden impedir ver bien los ataques.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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ANÁLISIS. Autor: Rebeca Reinosa y Alberto Garrido

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