Análisis de Philips Hue Twilight

Lo mejor es cuando Philips Hue produce sus propias luces desde cero. No te equivoques, sus diversas bombillas, accesorios y otros artilugios que automatizan e "inteligentizan" el hogar también son casi siempre productos sólidos, pero cuando piensan de forma diferente y ofrecen todo el tinglado en un solo producto, suele ocurrir algo especial.

La última incorporación es Twilight, y esta luz nocturna, o si no una lámpara diseñada para colocarse en la mesilla de noche, se lanza en competencia directa con un montón de otras lámparas diseñadas para adormecerte con determinados escenarios de luz degradada. Ante todo, es "solo" una lámpara de muy buen gusto, una de las más elegantes que ha diseñado Philips Hue, en mi opinión. La base es de corcho, tanto la base como la pantalla están moldeadas juntas, casi fusionándose en el centro, y el cable sale a través de un canal de cables en la parte posterior. Es elegante, sutil y encajará en casi cualquier sitio.

Además, cuenta con lo básico, como siempre ocurre con Hue. Ofrece 4000K a 1380 lúmenes y está clasificada para unas 25.000 horas de uso. Es difícil de probar, pero por lo que veo, son especificaciones bastante superiores.

Consta de dos fuentes de luz, hay una central en la parte delantera, pero en la parte trasera hay instalados una serie de LED de gradiente, que mediante la tecnología ColorCast ofrece una transición de colores bastante precisa. Por supuesto, puedes jugar con configuraciones específicas si eso es lo que quieres, pero la idea es que Hue ha trabajado con una serie de combinaciones científicas de color y luz que sabemos con certeza que reducen los niveles de estrés. Curiosamente, esto se describe en varios lugares como "escenas basadas en la ciencia", pero no he podido encontrar ninguna investigación real ni opiniones de expertos que lo respalden. Así que tómatelo con humor. Sin embargo, es relajante y, gracias a la atenuación ultrabaja de Hue, ambas fuentes de luz se pueden bajar muchísimo. Esto te da muchas opciones para crear un escenario que te haga sentir relajado.

Todo se activa a través de la aplicación, o Google Home, o mediante un asistente de voz, pero hay un botón físico en la parte superior de Twilight que no solamente puede activar un escenario de sueño específico si eso es lo que quieres, sino que puede controlar otras luces de tu dormitorio para que otras luces Hue funcionen con Twilight.

Funciona de forma brillante y existe en esa tensión entre lo táctil y lo digital que hace que sea mucho más fácil interactuar con estos aparatos inteligentes para el hogar. Además, Hue sigue dominando tanto el diseño como la producción, y Twilight rezuma lujo. La única queja principal es el precio. Hue tiende a ser relativamente modesto cuando se trata de sus propias lámparas, pero algo menos de 250 libras es bastante caro, en realidad demasiado caro si me preguntas a mí.

Sin embargo, eso no debería impedir a los ricos, o simplemente a los que ahorran, comprar lo que solamente puede describirse como una lámpara excelente y eficaz para el dormitorio.