Análisis de Total War: Warhammer III - Presagios de destrucción

Creative Assembly ha seguido la misma estructura fina varias veces: Se lanza una actualización importante junto con contenido gratuito (FLC) y algo de contenido de pago (DLC). Hay nuevas unidades, héroes, comandantes y actualizaciones de partes del juego que están ligeramente desequilibradas, para que algunas facciones puedan estar un poco más equilibradas.

Esta vez son Khorne, los Reinos Ogros y los Pieles Verdes los que se han actualizado, y como alguien que una vez jugó con dos de los tres en la vida real, creo que estoy bastante bien cualificado para juzgar.

El primer trozo de carne sobre la mesa es Golgfag Maneater, un mercenario realmente logrado que, a diferencia de muchos otros, puede jugarse al 100% como un ejército mercenario que realiza contratos. Y como ahora los Campamentos Ogros se pueden mover, puede funcionar realmente para los que tenemos que jugar como ellos. Hay varias unidades nuevas: Yetis, goblins que montan a otros goblins, buitres y un héroe legendario -para los que estén acostumbrados a jugar con personajes, este es el equivalente a un Personaje Especial-. Es una forma significativamente diferente de jugar y un agradable descanso de las otras campañas del juego. No tienes que pasarte días gestionando 119 ciudades, y si no te gusta jugar a Sim City mientras luchas, esta es una forma estupenda de jugar.

Esta vez también hay un general gratuito, Arbaal el Invicto. Tengo debilidad por él por la sencilla razón de que en su día jugué a Khorne con él como general principal. Sus mecánicas van de la mano con el nuevo sistema de Khorne y, sobre todo, con un árbol tecnológico más lógico. Lo suyo es matar a determinados ejércitos y generales, e incluso puede viajar directamente a ellos, por un precio. Esto se recompensa en forma de bendiciones, como costes muy reducidos para nuevas unidades durante varias rondas. También tiene una serie de atributos que le convierten en un luchador feroz. Se hace más fuerte cuantos más enemigos haya alrededor, puede provocar explosiones y, mi favorito, el Ojo de Khorne, que puede matar a toda una unidad al instante y convertir a los supervivientes en monstruos del Caos. Arbaal es la experiencia Khorne pura y dura, y puntos extra por ello.

El otro general de Khorne no es gratuito. Se llama (más bien genéricamente) Skulltaker, y como Khorne ha sido ligeramente remodelado, puedes adivinar si un general demonio debe basar su campaña en humanos o en demonios. Su "cosa" es que se potencia después de matar a otros. No de la forma normal, en la que matar a determinados generales le proporciona un potenciador específico, sino mediante un sistema de recolección -así es, calaveras- que hace que su capa sea más fuerte. No es mucho, pero por otro lado, puede teletransportarse a aquellos a los que sería divertido matar. Solo que cuesta muchos recursos, hasta un nivel en el que no siempre merece la pena. Recuerda demasiado a una vieja mecánica de Norsca y también al método de juego de Arbaal, y los potenciadores que obtienes son demasiado pequeños y deberían ir a tu ejército y no solo al general para diferenciarse de las mecánicas existentes en el juego. Por otro lado, obtienes nueve unidades nuevas, y una de ellas es otro monstruo familiar en forma de Scyla Anfingrimm.

Los verdes tienen un orco sabio -no, no es un oxímoron, sino que en relación con un orco, Gorbad Ironclaw es en realidad tan inteligente que puede aplicar diferentes contextos estratégicos. Para el resto de nosotros, esto sería una capacidad cognitiva del nivel de un niño de cinco años, pero para un orco se acerca a la verdadera genialidad. Sin embargo, suele requerir combinaciones específicas de unidades, ya que éstas deben utilizarse activamente para que la táctica funcione, y esto suele traducirse en potenciadores específicos. Cada uno de ellos puede amplificarse y están disponibles en varios niveles. También tiene nuevas unidades, siendo las más divertidas los Mangler Squigs -esquigs atados con cadenas-, y también hay un squig gigante entre ellas. No sé cómo explican que no se coma al resto del ejército. Gorbad es bastante divertido de jugar, y las nuevas unidades añaden algo de variedad y flexibilidad que echaba de menos. Como antiguo jugador orko, también es divertido ver cómo se utiliza realmente la amplitud de las muchas unidades diferentes.

Puedes comprar las piezas por separado o en un paquete por algo menos de 25 £. Es mucho dinero para jugar tres veces a la campaña de Immortal Empires. Me doy cuenta de que por hora de entretenimiento de repente no es tanto, pero sigue siendo bastante por tres generales extra y algunas unidades adicionales.