Análisis de Naruto Shippuden: Ultimate Ninja Storm 4 - Road to Boruto

La saga Ultimate Ninja Storm saga, creada por CyberConnect2, se ha convertido en una de las mejores adaptaciones de la animación japonesa a los videojuegos por su capacidad para recrear los grandes eventos de su trama, desde la juventud de Naruto hasta sus batallas épicas de los últimos capítulos de Shippuden. Pero ahora que la serie ha terminado (en manga, no en anime), el estudio ha decidido enlazar con los hechos que vienen después, es decir, con la película Boruto: Naturo the Movie.

En ella se basa principalmente esta expansión titulada Road to Boruto, que se puede comprar como DLC de Naruto Shippuden: Ultimate Ninja Storm 4 por 19,99 euros o incluso por separado. No entra dentro del pase temporada, por eso podemos entender que cueste tanto por separado, pero no que no se haga diferencia con quienes tienen en el título principal, que tienen que pasar sí o sí por caja para probarlo.

Ahora vamos a hablar de la trama y puede que lo consideres destripe, pero es inevitable hasta donde vamos a entrar. En esta nueva aventura se juega casi siempre como Boruto, el hijo de Naruto y Hinata. Sarada Uchiha, la hija de Sasuke y Sakura, y Mitsuki, la creación de Orochimaru, son sus compañeros de faena en el nuevo Team Konohamaru, su sensei. Todo transcurre varios años después del final de Naruto Shippuden, con los finales marcados por Masashi Kishimoto para los personajes de siempre. Las cámaras se centran principalmente en la mala relación que tienen Boruto y su padre, ya que el pequeño no entiende que su padre tenga que estar siempre fuera de casa por culpa de las misiones. Es ahí donde aparece la figura de Sasuke con un cariz inesperado.

Road to Boruto tiene contenido para que estéis entretenidos durante unas cuantas horas, sobre todo si os dedicáis a completar todo el contenido extra. El problema es que las misiones secundarias son muy aburridas y ocupan demasiado tiempo en comparación con la historia principal. Os mantiene dando vueltas por un mundo semi abierto, dividido en áreas, repleto de personajes estáticos que tienen poco o nada que contar.

El problema está principalmente en el diseño. Estas tareas adicionales son casi todas de ir al punto A al punto B por encargo de alguien para después tener que volver a la posición inicial. También hay algunos extras y retos que puedes intentar superar, pero no es satisfactorio. De hecho, la propia trama principal también se queda corta de original porque las misiones básicas son muy parecidas en estructura a las que ya hemos vivido en el juego original.

Las peleas sí son divertidas, y las secuencias animadas son espectaculares, especialmente las que van cargadas de acción. No es ninguna novedad porque siempre ha brillado en estos aspectos. No hay otra saga que consiga trasladar la serie al videojuego con tanta fidelidad y tan buen resultado en el género de las peleas, y eso sigue siendo así en Road to Boruto.

El modo historia viene cargado con sus personajes, que pasan automáticamente a engrosar el plantel de luchadores disponible. En total hay seis, aunque la mitad son versiones de los anteriores a los que se le han aplicado algunos cambios: Boruto, Sarada, Mitsuki, Naruto 7ºh Hokage, Sasuke el Shinobi errante y Mecha Naruto.

Por esos 20 euros que cuenta, Naruto Shippuden: Ultimate Ninja Storm 4 - Road to Boruto tiene la obligación de ofrecer más contenido y con una media de calidad superior. Hay una parte de lo que trae que es aburrido y soso, y lo que mejor funciona se hace corto y a veces un poco repetitivo, además de poco innovador. Si eres un gran fan de Naruto y lo has jugado, leído y visto todo seguro que vas a querer llegar hasta aquí y lo vas a disfrutar, pero como expansión no es nada que no pueda dejarse escapar.