Análisis de Outlast 2

Cuando salió a finales de 2013, el primer trabajo de miedo indie de Red Barrels provocó más de una pesadilla a muchos jugadores. Un juego ambientado en un centro psiquiátrico del que se sospechaba que experimentaba con sus pacientes. El título fue muy bien recibido por hacer que sus jugadores se sientan totalmente impotentes, despojándoles de su capacidad de defenderse y dándoles nada más que una luz de cámara tenue para poder guiarse en su camino. Casi cuatro años después, la tan esperada secuela, Outlast 2, intenta mejorar la fórmula, añadiendo un mundo abierto mucho más amplio y unas mecánicas totalmente nuevas. Promete ser aún más aterrador que su predecesor, hasta el punto de inspirar el lanzamiento de un pañal personalizado en Kickstarter.

En Outlast 2 sigues a los periodistas de investigación Blake y Lynn Langermann a lo largo de su viaje por el desierto de Arizona para informar sobre la historia de homicidio de una joven víctima, conocida simplemente como Jane Doe.

Después de un accidente de helicóptero bajo circunstancias sospechosas, la pareja se separa y se encuentran tirados en un misterioso hogar de culto sádico. Acosado por unos habitantes psicóticos, Blake se propone encontrar a su esposa desaparecida, mientras que también trabaja para desentrañar los secretos que rodean al culto que lo persigue.

La historia de Blake se desarrolla dentro del mismo universo que el primer título, se produce en algún momento después de la matanza del centro psiquiátrico. Además de la breve escena de introducción y algunos vídeos, la historia se desenvuelve principalmente a través de cartas empapadas en sangre, notas y páginas de diarios. Blake es el primer protagonista en tener un diálogo guionizado en la serie, lo que le da una apariencia de personalidad y humanización que no tienen los demás personajes principales. A través de Blake, los horrores del desierto se magnifican y experimentamos un sentimiento mucho más profundo de empatía hacia él y su lucha por encontrar a su esposa.

El mundo ahora ofrece una sensación más variada y abierta que el primer título, que se restringía al interior de los muros del centro psiquiátrico. La segunda parte contiene una serie de locales y deberás aferrarte a la vida en el medio de laberintos de campos de maíz, bosques misteriosos y mataderos. No obstante, todavía conserva la sensación escalofriante del primer juego gracias al crujido de los árboles, el ruido de cadenas y el sonido de llamas. Sin embargo, el alcance es mucho más amplio, lo que te permite tomar varios caminos cuando te escapas de los enemigos y, en general, presenta una exploración más profunda, pero todavía sigue dando cierta sensación de linealidad en lo que a estructura de niveles se refiere, ya que debes seguir un camino lineal sin necesidad de volver hacia atrás, ni si quiera para coger objetos.

Al igual que Alien: Isolation, la propuesta de escondite y persecución de Outlast 2 te hace sentir completamente indefenso, solo podrás moverte de manera sigilosa mientras la muerte te acecha por todos lados. Dentro del variado paisaje te puedes escapar a muchos lugares sin ser detectado, como riachuelos de agua lodosa e incluso árboles talados, pero poco se compara a los niveles de estrés y pánico que sufrimos en la oscura noche en la que nos persiguieron varios psicópatas con cuchillos. Tampoco ayuda que la IA sea ahora más inteligente y capaz de buscarte a través de espacios reducidos.

Al igual que el título original, solo contarás con la linterna de tu cámara para iluminarte en la fría oscuridad, limitando tu visión a una singular sombra de un color verde un tanto misterioso. Debes contar siempre con un suministro de baterías o, de lo contrario, te encontrarás deambulando atónito en medio de la nada y solo te podrás guiar por la luz que desprenden las antorchas y brasas. Tu cámara está ahora equipada con un micrófono, lo que te permite cambiar la batería adicional para escuchar atentamente los pasos y los gritos histéricos de los que se pasean a tu alrededor. Creemos que esta característica recién implementada es especialmente útil para determinar si es o no el momento de salir de la seguridad de la cobertura.

No obstante, la mecánica de prueba y error tan frecuente resulta bastante frustrante. Te verás obligado a repetir la misma sección de nuevo, ya que no queda inmediatamente claro a dónde debes ir. Te encontrarás sentado delante de la misma pantalla de carga repetidamente sólo porque no encontrarás la pequeña brecha que por la que se supone que te debes escapar mientras te persiguen. Por supuesto, simula el estrés y el pánico de una situación en la que tendrías un tiempo limitado para pensar, pero tener que repetir secciones rápidamente resulta aburrido. También vimos que teníamos que activar la opción para no fallar nunca las secuencias QTE, ya que parecía casi imposible deshacerse de los enemigos que atacan desde el suelo. Parecía que apretar el gatillo R (en PS4) no hacía nada y, al tener que seleccionar la opción de no fallar, parecía que estábamos haciendo trampas.

Al igual que su predecesor, Outlast 2 se ha empleado utilizando el Unreal Engine 3 y Red Barrels afirmó que se mantuvo porque les permitió trasladar materiales de los títulos anteriores y, si bien lo han pulido un poco, tiene una apariencia áspera, especialmente si lo comparamos con lanzamientos recientes. Los modelos de personajes parecen un poco anticuados y un chirrían un poco si los contrastamos con el impresionante mundo abierto. El compositor Samuel Laflamme vuelve al videojuego escribiendo otra banda sonora escalofriante de choques discordantes y sonidos penetrantes.

Aunque no es probable que guste a quienes desprecian el original, Outlast 2 intenta aumentar la experiencia de su aclamado predecesor, consiguiendo un mundo abierto mucho más amplio y diverso, un protagonista más atractivo y unas nuevas mecánicas inventivas. Puede que no se hayan revisado muy bien los gráficos y puede que te haga sentir frustrado, pero sigue siendo una experiencia desgarradora y divertida que encantará a los que tenían el original en alta estima.