Análisis de The Golf Club 2019

HB Studios es una compañía no tan conocida, pero que tiene un largo historial de dedicación a títulos deportivos, muchos de ellos en colaboración con EA Sports. Una de sus series propias es The Golf Club, un simulador que siempre ha buscado el mayor realismo posible. Sin descanso, vuelven esta temporada con The Golf Club 2019. Y dos novedades muy importantes más allá del cambio de nombre: su asociación con 2K Sports para el lanzamiento y, sobre todo, haber conseguido la licencia oficial PGA Tour.

Se ha utilizado, pero no del todo. Por desgracia no han recreado a ningún jugador profesional ni de PGA ni de LPGA. el estudio se ha centrado en la recreación de seis recorridos Tournament Players Club (TPC) y en el modo carrera, que está basado en el personaje que cada usuario se crea para sí mismo. O para replicar a una estrella y usarla dentro del circuito, aunque tampoco hay un mecanismo para compartir listas de jugadores y por tanto no habrá opción a beneficiarse de un archivo de guardado que lo edite todo de una vez, sino que habría que cambiar todo a mano para que fuera más realista.

El nuevo modo carrera ofrece muchas formas de jugar a The Golf Club en solitario. Los dos anteriores se centrarons mucho más en el multijugador, pero esta versión trae más contenido para disfrutar offline. Empezando con las finales de Q-School en el TPC Scottsdale de Arizona para conseguir la clasificación para el tour web.com, el objetivo es dar el salto al PGA Tour. Quienes han jugado mucho a las entregas previas no van a tener muchos problemas en lograrlo ni en modo difícil, pero puede ser un poco más complicado para quienes descubran la franquicia ahora. Por suerte, da varias facilidades como por ejemplo un nuevo modo de práctica con varias clases de aprendizaje y con la posibilidad de elegir entre cinco niveles de dificultad. Aún así, la dificultad general ha bajado e incluso ahora es posible golpear la bola más o menos bien en una zona muy sucia.

The Golf Club 2019 llega con un menú abierto, con varias opciones de configuración para los golfistas. Eso en cuanto a juego, pero también en lo que no afecta a gameplay, como por ejemplo con las prendas de ropa y otros aspectos estéticos intercambiables que sirven para trata de dar un aspecto único a cada personaje. Lo que no vais a poder conseguir es un personaje entrado en carnes o directamente gordo, porque por mucho que pongas medidas propias de una persona no delgada, la representación es alguien esbelto y fibrado.

Otra de las novedades introducidas en esta entrega son los patrocinadores. Cada vez que cumplamos unos objetivos en el modo carrera llegarán anunciantes dispuestos a asociar su imagen a la nuestra. En total hay cinco sponsors, con cuatro de patrocinio por cada uno de ellos. Ellos nos van proponiendo unos logros complementarios a hacerlo bien como se debe, como puede ser conseguir un eagle o ganar un Major y a cambio nos regalan material serigrafiado, como gorros o zapatos. Nos ha parecido una forma muy interesante de mantener un tanto más vivo este modo.

Uno de los problemas que le vemos a The Golf Club 2019 es que cuesta lograr que la bola se quede quieta en el green cuando este es rápidos. Acaba corriendo unos centímetros nada más tocar suelo incluso con un buen golpe envuelto, un gesto que en la vida real provocaría que se parara casi en seco o incluso que volviera un poco hacia atrás. Hemos notado este fallo incluso en algunos de los greens más suaves, aunque menos acentuado. Esperemos que sea uno de los retoques a futuro mediante actualización.

No ha habido tanta evolución en las mecánicas de swing y en el comportamiento físico de la bola, aunque HB Studios sí ha metido algunos pequeños ajustes. Además de la mencionada facilidad para golpear desde rough, también han cambiado la pegada a desnivel, pero esta vez en dirección contraria. Ahora mucha más diferencia cuando se golpea estando por encima o por debajo del pie, y eso es un gran avance.

Detrás de este proyecto hay un buen trabajo técnico que se refleja también en la presentación. Jugando tanto en PS4 Pro como en Xbox One X, nos hemos llevado más de una sorpresa positiva por su aspecto gráfico y por su sonido. Un poco mejor en general en la consola de Microsoft, pero es una diferencia mínima e irrelevante. Especial mención para los efectos acústicos como el golpeo, la vida que hay en estas zonas naturales o incluso el sonido de la bola al sumergirse en el agua, que hemos escuchado más veces de las que nos gustaría. Todo es muy preciso y te hace sentir de verdad en el circuito.

Todo, excepto una cosa que siguen sin mejorar, el público. Más que nunca son el convidado de piedra, porque no se reaccionan con ninguna lógica ni sentido a lo que está ocurriendo, ni siquiera cuando va hacia ellos. Lo único que hacen es animar más ante un buen tiro de forma automática. Nos hubiera gustado algún tipo de animación relacionada con seguir la bola, porque más bien parecen hinchas de fútbol delante de un asiento y las sensaciones en este deporte, en el que todo es tan cercano, deben ser diferentes.

Esta compañía nos ha acostumbrado a darle importancia a la creación de recorridos propios y la inclusión de la licencia oficial PGA Tour en esta entrega no lo ha cambiado. Con el paso del tiempo irán llegando decenas y decenas de alternativas editadas por la gente, sobre todo gracias a unas pequeñas mejoras en el editor que hacen que sea aún más fácil de ejecutar. No solo han simplificado el proceso, lo han hecho añadiendo más alternativas de contenido. Desde nuestro punto de vista es más fácil usar un mando que ratón y teclado, y es una opinión que comparten otros jugadores con los hemos hablado.

The Golf Club 2019, ahora con licencia PGA Tour, es una gran apuesta para cualquier amante de los videojuegos de golf que busquen un simulador. HB Studios ha hecho un gran trabajo, y todavía puede mejorar más si retoca los aspectos que hemos mencionado en este texto. Esto es solo el principio, porque todavía tiene que crecer con los recorridos amateur creados con el editor, y puede que hasta con más torneos oficiales. Afina la puntería, que te toca.