Análisis de Lego DC Súper-Villanos

El primer impacto que recibe tu cerebro junto a la pantalla de título de Lego DC Súper-Villanos es Joker and the Thief, el tema de Wolfmother que ya ha pasado antes por algún videojuego y que nos recuerda a Jackass. No nos lo esperábamos, pero fue suficiente para sacarnos esa sonrisa y recordarnos que aquí venimos a pasarlo bien. Y vaya si nos hemos divertido.

El nombre del juego lo dice todo, sobre todo para quienes conocen ya a estos veteranos como son TT Games. Es una reunión con muchos de los villanos el universo DC como Lex Luthor, el Joker o Gorilla Grodd, y también otros menos conocidos como King Shark para satisfacer a los auténticos aficionados al cómic americano. Pero no penséis "mal", también están los buenos como Batman o Linterna Verde, y no solo aparecen, incluso se dejan controlar.

Lo que más nos ha sorprendido ha sido la trama que invita a vivir, extraída directamente de los cómics de El Sindicato del Crimen de América (o el Sindicato del Crimen), que vienen de una versión paralela de la Tierra y son algo así como la versión maligna de la Liga de la Justicia con Ultraman, Super Woman y Owl Man entre otros (que representan a Superman, Wonder Woman y Batman respectivamente).

Con el paso del tiempo, aprenderéis cómo lograron convertirse en un mal aún mayor superando las costuras del Sindicato del Crimen gracias a la aparición de todos esos otros personajes. La única pega que le ponemos es que te pasas algunas misiones de más reclutando villanos hasta tener a toda la banda al completo.

Una reportera de lujo es la responsable de contarnos estas fechorías, Lois Lane, junto a su cámara de confianza, Jimmy. Buen guión y buenos planos para hacer que la trama avance con bastante humor y sin que haya ruptura entre unas pantallas bien hilvanadas. Sirven incluso para dar cabida a algunas misiones que nos han sobrado, como la de encontrar a Black Adam en el museo. Más bien parecía una excusa para luchar contra Shazam y Mazhas (su versión de Tierra 3), que solo se sostiene gracias al texto.

Más o menos divertidas, estas tareas también sirven para viajar por muchos escenarios conocidos como los laboratorios STAR o Dinosaur Island. El diseño colorido y en busca de la belleza resalta constantemente. El nivel de Gorilla Grodd es un buen ejemplo; una jungla verde y viva, repleta de monos asesinos. La variedad es enorme, y hasta hemos visitado un espacio submarino en el que esperaba un calamar gigante.

Combates machacabotones simples, recoger piezas y construir estructuras para avanzar o resolver algunos puzles y enfrentarse a jefes finales con algún chiste en la recámara. La fórmula de TT Games para los juegos de Lego se mantiene fiel, excepto por una novedad que hay que destacar, la personalización estética y jugable de tu personaje, Rookie. En DC Super Villanos tienes opciones como, por ejemplo, que el rayo láser que vayas a lanzar sea del color que quieras y salga de donde más te guste, ya sea de un arma en el brazo o de tus ojos. El avatar del jugador no habla, pero se deja hacer todo, hasta poner una cola de dinosaurio.

Escoger a Rookie y no a los propios villanos (o héroes) de DC como protagonista tiene una implicación jugable que aporta mucha agilidad al juego. Es capaz de asimilar poderes de otros, así que hay que estar cambiando constantemente entre personajes para poder pasar por zonas, sino que él lo aglutina todo, pero eso no significa que no puedas jugar también como esos malos tan conocidos y aprovechar sus habilidades especiales. El rayo láser de Lex Luthor es el único que rompe bloques dorados y el Joker tiene una dentadura por control remoto.

Es un placer usar a estos villanos, recreados con mucho detalle y con unas animaciones espectaculares. Tanto, que al final son entrañables y es un placer hacer perrerías con ellos. Por cierto, muy bien integradas con el contenido, porque para sacarse el 100% hay que ser dañino y destructivo con los escenarios, como era de esperar de gente así.

Os hemos hablado antes de cada nivel concreto, pero no podemos dejar pasar por alto el escenario central, un mundo abierto y libre con mucho que hacer. Es como una ciudad por explorar, animada gracias a muchos muñequitos que deambulan por ella. Para hacer lo propio, el jugador tiene el Batmovil o puede volar como Superman. Hay varios eventos por ahí repartidos, muchos de ellos vinculados a personajes concretos, así que ya hay un aliciente para desbloquearlos todos.

Solemos decir que los juegos de LEGO son divertidos para niños de todas las edades, incluso los más pequeños gracias al multijugador cooperativo a pantalla partida. Lo probamos y tuvimos la mala suerte de encontrarnos con un fallo bastante feo que esperamos que no afecte a la versión final o que se solucione pronto. La otra pega que ponemos a esta reunión es que algunos villanos con mucho caché han quedado infrautilizados en la historia principal, como el Pingüino o Riddler. Para compensar, echamos más partidas con ellos en juego libre, es decir, el acceso a cada área por libre una vez completado en el modo historia.

En resumen, Lego DC Súper-Villanos mantiene ese nivel técnico visual y sonoro de calidad, y también esa jugabilidad divertida que, además, esta vez es incluso más ágil con el personajes avatar. Hay muchas cosas que hacer tanto en la bien escrita y contada historia principal como en ese maravilloso mundo central, aunque algunas misiones son un tanto pesadas y, sin embargo, ciertos personajes podrían dar más de sí. TT Games se ha salido un poco de su norma para hacerlo tan bien como de costumbre.