Análisis de Marvel Snap

Probablemente ya hayáis oído hablar del juego a estas alturas, ya que se ha convertido en una especie de fenómeno, pero hay una razón por la que Marvel Snap se ha lanzado y catapultado al éxito. Y es simplemente que es un muy buen juego de batallas de cartas. Este género está bastante repleto de otros títulos, muchos de los cuales son brillantes por sí mismos, pero Marvel Snap es genial porque es sencillo, emocionante, fácil de entender y, sin embargo, tiene un techo de habilidad muy alto. ¿Qué más se puede pedir?

Básicamente, el concepto de este juego de cartas para móviles consiste en utilizar una colección de personajes de Marvel para ganar una de las tres posiciones del tablero. Cada posición, que lleva el nombre de un lugar del mundo Marvel (por ejemplo, el Club del Fuego Infernal, el Soberano o, más recientemente, el Laboratorio de Shuri) tiene su propio efecto único (las posiciones se asignan al azar en cada partida) y solo se pueden colocar cuatro cartas en cada una de las tres posiciones. La principal pega es que cada carta del mazo (los mazos tienen unas 12 cartas únicas en total) tiene un coste de energía que oscila entre uno y seis para utilizarla, y las más caras probablemente solo se podrán jugar cuando la partida llegue al final, ya que después de cada turno, la energía disponible aumenta en uno. Así, se podría jugar con Quicksilver con un coste de una unidad de energía desde el primer turno, con el Doctor Extraño con un coste de tres a partir del tercer turno, y con el Increíble Hulk con un coste de seis, en el último turno de la partida, a no ser que algún extraño efecto cambie esto de alguna forma. Y con este concepto central en mente, tenemos que ganar dos de las tres posiciones superando la línea de estadísticas de ataque del rival, usando de forma inteligente las cartas del mazo y de cada mano.

Es un juego mucho más sencillo de lo que podría parecer. No es como Hearthstones, Gwents, o Magic: The Gatherings. No, se trata de un juego fundamentalmente sencillo que es fácil de aprender, pero debido a la forma en que funcionan las posiciones y a lo únicos que pueden llegar a ser los mazos, también hay mucha profundidad que explorar y descubrir. Además, el diseño es tan sencillo que las partidas duran como mucho unos minutos, lo que lo convierte en el título ideal para entretenerse durante un rato en la cola del banco, en el metro o cuando necesites matar un poco de tiempo. Pero el hecho de que las partidas sean cortas no significa en absoluto que no sean emocionantes y competitivas, porque realmente lo son.

Te perderás en el intento de burlar al rival y en tratar de averiguar no sólo su movimiento en el turno actual, sino también cómo piensa afrontar el resto de la partida. Y como Marvel Snap tiene un diseño tan básico, hasta cierto punto se pueden acertar esas predicciones, lo que resulta aún más gratificante, sobre todo si utilizamos la función de doble puntuación de "snapping", que duplicará los puntos de recompensa en el ranking si ganamos o duplicará la cantidad que perdemos en caso de derrota.

Uno de los aspectos de Marvel Snap que más me preocupaban cuando lo probé por primera vez era el de las microtransacciones y su implementación. Es cierto que esto es un problema de casi todos los juegos para móviles que pruebo hoy en día, pero en este juego puedo decir que no resulta demasiado agresivo en su estado actual. Claro que podemos gastar dinero en elementos como nuevas cartas, como el Capitán América, pero al mismo tiempo, los sistemas de progresión que se han incorporado y el acceso a los pases de batalla gratuitos hacen que siempre haya un flujo constante de nuevas cartas que se añaden a nuestro mazo sin que tengamos que gastar ni un céntimo. Además, las cartas que podemos comprar no parecen estar exageradamente potenciadas en este momento, como ocurre con muchos contenidos de pago en los videojuegos gratuitos. Y por si fuera poco, gastar dinero en moneda para mejorar las cartas no es un problema, ya que la mecánica no mejora realmente una carta, sino que se limita a cambiar su aspecto, convirtiendo el fondo original en 2D en uno en el que las imágenes rompen el marco, luego se convierte en 3D y así sucesivamente.

Se trata de un juego que ahora mismo es muy divertido y cómodo para el usuario. ¿Seguirá siendo así a medida que avancen las temporadas y se añadan más mecánicas y características? Bueno, esa es la verdadera duda, pero si Second Dinner puede mantenerlo todo simple, de ritmo rápido y tan emocionante como ahora, no se puede negar que Marvel Snap es ya uno de los mejores juegos de cartas del mercado.