Apple ha recibido un fuerte tirón de orejas de la Comisión Europea. El gigante tecnológico ha sido condenado a devolver al país insular unos 13.000 millones de euros en impuestos no pagados, después de que se acusara al país de conceder a Apple exenciones fiscales ilegales entre 1991 y 2014.
Según la BBC, en 2016 Irlanda concedió a Apple "ayudas ilegales" que ahora la UE exige a Irlanda que recupere, ante lo que su gobierno ha dicho que respetará la sentencia. Apple, sin embargo, está claramente menos satisfecha y ha afirmado que la UE ha estado "intentando cambiar retroactivamente las normas".
La ayuda ilegal en sí se habría producido entre 1991 y 2014 y giraba en torno a la forma en que Apple generó beneficios en Irlanda utilizando dos filiales creadas a efectos de exención fiscal. La UE examinó este asunto en 2016 y acabó desestimándolo, pero en 2020 se retomó y ahora se ha decidido que se han cometido errores legales, lo que significa que Tim Cook y Apple tendrán que sacar sus talonarios para pagar los impuestos pendientes a los europeos.
Hay que decir que, aunque 13.000 millones de euros pueden llegar para mucho, Irlanda se muestra reacia a aceptar el dinero, ya que afirma que la pérdida valió la pena por el esfuerzo que supuso hacer que el país pareciera atractivo para los gigantes tecnológicos y las grandes empresas.
Esto también se produce cuando Google fue golpeada ayer martes con una sentencia que obliga a la empresa tecnológica rival a devolver unos 2.400 millones de euros por "abuso de posición dominante en el mercado".