Hace dos meses aseguró la productora de Diablo III: Ultimate Evil Edition que el juego tendría que presentarse en las TV conectadas a una Xbox One a una resolución de 900p porque habían dado prioridad a los 60 fps de framerate, mientras que la versión PS4 alcanzaría full-HD. Esta decisión, lógicamente y como había ocurrido con otros juegos, escoció entre una comunidad de usuarios de la nueva consola de Microsoft que hoy puede celebrar una buena noticia.
Parece que el equipo de desarrolladores que ultima la adaptación que saldrá unos días ha conseguido optimizar el producto, pues la versión Xbox One de Diablo III: Ultimate Evil Edition se ejecutará finalmente a 1080p, siempre después de que los jugadores descarguen un parche disponible de lanzamiento (desde el 19 de agosto).
Un portavoz de Blizzard confirma el avance a GameSpot, asegurando que ambas consolas pondrán el juego en pantalla a 1080p nativo.