Dragon Age II recibió hace muy poco una expansión, llamada Legacy, que tenía la peculiaridad de que solo podía ser comprada online, y no a través de plataformas digitales como Steam. Aunque parezca un tema sin importancia, puede tener graves consencias. Este gesto viola las condiciones del servicio de Steam, por eso Valve ha procedido a retirar Dragon Age II de su catálogo.
Obviamente lo que intentan EA y Bioware es quitarse un intermediario y aumentar sus beneficios. Pero este puede acabar afectando a su relación con Valve a largo plazo. Hasta ahora eran una pareja muy bien avenida, y también ha habido contenidos circulando en la otra dirección: los títulos de Valve han sido distribuidos mediante el programa EA Partners.
Ahora surge la duda sobre cómo afectará este caso a los próximos lanzamientos. De momento comienzan los rumores sobre la situación del próximo Battlefield 3, y aún puede ser más grave el caso de lo próximo de Bioware, Star Wars: The Old Republic, un juego orientado al PC.
¿Continuará?