En una reunión con inversores en el negocio PC/Console de la empresa, Embracer CEO Lars Wingefors habló de la naturaleza inestable de la industria, pero se mantuvo positivo respecto a las perspectivas de la empresa tras la reestructuración.
Después de que su informe fiscal trimestral mostrara una caída del 34% (interanual) en su negocio de PC/Consola, Embracer reestructuró esta ala de la empresa, lo que se tradujo en despidos masivos, cancelaciones, cierres de estudios y desprenderse de activos como Gearbox Entertainment (responsable de la franquicia Borderlands) y Saber Interactive (responsable del próximo Warhammer 40k: Space Marine 2).
Las declaraciones de Wingefors, que describió la caída como un "bache" en el sector, se reflejan en los retrasos de juegos como Kingdom Come: Deliverance II de Deep Silver, propiedad de Embracer (cuyo lanzamiento estaba previsto para este año, pero se ha retrasado a febrero de 2025), y en el trimestre comparativo en el que se lanzaron títulos como Dead Island 2.
En un tono más optimista, Wingefors declaró que está "muy confiado y entusiasmado con las perspectivas futuras de ese negocio", "especialmente ahora después de la reestructuración", y que la cartera de proyectos de la empresa "parece sólida", preparada para "lanzar juegos terminados por valor de 3.900 millones de coronas suecas en el ejercicio".
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