El estudio de Gone Home boicotea la PAX por su ética

El estudio responsable del juego de aventura Gone Home, The Fullbright Company, ha difundido un comunicado detallando sus razones para boicotear la feria PAX Prime de Seattle, a celebrar a finales de agosto (Gamereactor asistió recientemente a la edición de Boston).

El juego se aceptó inicialmente para formar parte del Indie Megabooth, el gran stand de la feria dedicado a proyectos independientes, pero el estudio decidió pasado un tiempo seguir su conciencia colectiva y declinar su lugar en el evento, a causa de su opinión sobre Jerry Holkins y Mike Krahulik, de los organizadores Penny Arcade.

En tal comunicado, publicado por Steve Gaynor, del estudio, señalan que "primero fue toda la debacle de los 'Dickwolves', durante la que Mike aseguró que 'sentaba muy bien apoyar la cultura de la violación'. Luego llegaron los Kickstarter de Penny Arcade, y uno de ellos dejaba a los donantes pagarles 7.500 dólares para trabajar como becario en Penny Arcade durante un día".

La explicación que sigue habla de mantener la ética en los negocios. "Creemos que acordar pagar a los organizadores de la PAX más de 1.000 dólares por espacio en el stand, y por presentar nuestro juego en el showfloor durante cuatro días, ofrece un apoyo explícito y aprobación tácita de su postura públicamente demostrada sobre estos asuntos. Y hemos llegado finalmente a la conclusión de que no podemos estar del lado de Jerry, Mike y su organización participando en este evento".

"Somos un equipo de cuatro personas. Dos somos mujeres y uno es gay. Gone Home trata en parte asuntos LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales). Estas cosas son importantes para nosotros, a muchos niveles. Y Penny Arcade no es una entidad con la que nos sintamos bienvenidos o cómodos trabajando de su lado".

Gone Home es el primer juego de un estudio que se formó a partir de su trabajo colectivo en el DLC Minerva's Den para Bioshock 2, y consiste en explorar el hogar vacío de una familia para descubrir qué le ha ocurrido a las personas que lo habitan. El título fue finalista en la categoría de Excelencia en Narrativa del IGF de este año.