Del mismo modo que Assassin's Creed se ha tomado un descanso en este 2016 y quizá también en 2017 para poder recuperarse y volver con más fuerza (sin contar el recopilatorio de Ezio Auditore), todo apunta a que la próxima franquicia de Ubisoft que va a parar para recuperarse de la fatiga acumulada es Far Cry.
Tommy François, vicepresidente editorial de la compañía francesa, ha dicho que ambas IP pueden tardar en volver más tiempo del esperado, pero que todo va a depender de que los plazos se vayan cumpliendo. Estas han sido sus declaraciones a IGN:
"Creemos que la alfa de estos juegos tiene que ser un año antes del lanzamiento. Estamos intentando conseguirlo [...] Ese es el objetivo a por el que vamos: un año antes la alfa, más calidad, más pulido. Y si eso significa traga con lo que venga y no tener un juego de Assassin's o de Far Cry en 2017, a la mierda".
François ha aclarado que se refiere a versiones de alfa del desarrollo interno, no a que se vayan a realizar tests públicos de forma obligatoria para cada juego y con tantos meses de antelación. Iteraciones del producto sobre las que el equipo puede ir añadiendo, cambiando y mejorando con todo el tiempo necesario, "sin atajos".
Ubisoft ha dejado claro que no tiene prisa, y por la red se extiende la creencia de que está buscando cómo redefinir los juegos de mundo abierto. ¿Lo conseguirá?