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Fury Unleashed

Análisis de Fury Unleashed

Acción y plataformas 2D de toda la vida es mejor con ritmo y pantallas random que tienen sentido.

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Un roguelike de acción y plataformas para gustarse con los combos, esa es la descripción básica de Fury Unleashed. Y una vez que lo juegas se transforma en exactamente eso pero con el adjetivo "divertido" por delante. Ni más, ni menos.

Para empezar, te da la opción de crear un personaje totalmente al gusto, con el aspecto y hasta las pinturas de guerra que quieras aplicar como maquillaje. Lo de las armas va por otra parte, porque a medida que avanza la partida van saliendo más y más entre las que escoger y que acoplar para dar sentido a este festín en un mapa enrevesado y laberíntico.

Fury Unleashed es un juego con ritmo, ágil, en el que hay que sacar partido a habilidades como correr, doble salto, deslizarse, golpear o lanzar granadas. A esto hay que sumar las especiales, como congelar a los enemigos, desplegar un dron y similares. Una idea original que ha quedado muy bien es que, si vas por el camino que no debes, te puedes teletransportar a un punto en el que ya habías estado y escoger así otra ruta con más sentido.

Sus gráficos 2D enlazan con la división en tres del contenido (cuatro realmente), que se corresponden con un cómic cada uno, que a su vez constan de tres capítulos. Esa estructura es fija, pero lo que sucede dentro de cada página va cambiando, pues los escenarios se generan de forma aleatoria. Aunque al jugarlo no se note, si abres el mapa compruebas que cada nivel está compuesto de habitaciones que son como las viñetas del cómic. Un planteamiento muy astuto.

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Toda esta estructura importa más o menos poco cuando bajas al barro, porque entonces todo es correr, saltar y matar sin parar. De izquierda a derecha, de arriba a abajo o todo lo contrario, hay que ir buscando el camino desde el principio hasta el final de la página. Entre medias todo son peligros y rarezas, como arañas explosivas, aliens, plantas carnívoras, sierras metálicas, bolas de fuego. No les ha temblado el pulso a la hora de incluir elementos, y de hecho uno de los jefes es un helicóptero.

Como son tres cómics distintos, se ha permitido cambiar de temática con soltura. El primero va sobre uno selva plagada de esqueletos guerreros de tipo azteca, el segundo de tiene a neonazis como protagonistas y el tercero va de una invasión alienígena a gran escala. Al completar los tres se desbloquea un mundo secreto que contiene las respuestas a estas batallas y, por encima de todo, a este planteamiento.

Del género roguelike hereda una característica que hará sufrir a más de un jugador. Tras acabar con el jefe de cada cómic se pasa al siguiente libro de viñetas, eso es normal. Sin embargo, al morir no se vuelve a empezar por el que tocara, sino que hay que reiniciar desde el primer cómic. Ahí entra en juego el efecto random para hacerlo más entretenido. Sí que hay una forma de dejarlo todo desbloqueado para centrarse después en disfrutar de las fases y buscar mejores puntuaciones.

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Los jefes de cada mundo molan muchísimo y los enfrentamientos muy intensos, con multitud de cosas sucediendo a la vez. Los de capítulo no llegan a esa calidad, pero también lo ponen difícil y hacen pupa, obligando a aprender sus patrones de comportamiento para poder superarlos.

Fury Unleashed

Comenzábamos diciendo que Fury Unleashed va de hacer combos, y hay que explicarlo. Al acabar con un enemigo, suelta tinta oro y negra. La primera sirve para comprar armas y bendiciones, que son mejoras estadísticas. Cuantos más consigas derrotar sin que te toquen, más cantidad sueltan y hasta puede llegar a ser salud. La cosa es que no es nada fácil avanzar sin que te rocen.

La tinta negra, por otra parte, es la moneda de cambio para la progresión del personaje en todas esas cualidades que ya hemos ido mencionando. Son acumulativas, lo que significa que cada nuevo intento de superar los tres capítulos seguidos tú eres más fuerte y capaz, por lo que tienes más posibilidades.

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Con toda esta temática detrás, el estilo visual estaba claro y han logrado trasladarlo al gameplay. Es como un cómic a todo color, en el que suceden escenas dinámicas muy vivas y sonoras. Con armas tan potentes como lanzacohetes, pistolas láser y similares, el juego de sonido está cantado, pero también con otras como una sartén o una espada.

Si hay que hacer una crítica, debe ser a que se hace corto en total, aunque la generación procedimental de escenario y las muertes necesarias para avanzar son las que consiguen que su vida útil sea más larga. Con todo esto nos referimos a cuando se juega en difícil, que es como creemos que hay que afrontar este tipo de títulos. Afrontar cada partida sabiendo que vas a morir, pero que acumularás experiencia y llegarás un poco más lejos cada vez. También se puede hacer tan fácil como uno quiera, pero no creemos que sea lo más adecuado.

Claro que no es ni innovador ni creativo en mecánicas, pero al menos consigue que todo el rato que estás a los mando sea divertido y lo plantea de una forma que integra el diseño de niveles como el visual. Fury Unleashed es para pasarlo bien, especialmente si hay alguien al lado con quien disfrutarlo en cooperativo local.

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08 Gamereactor España
8 / 10
+
Muchas cosas a la vez para darle ritmo y hacerlo divertido. Buen planteamiento, trasladado a un aspecto bonido.
-
Es innegablemente corto y poco original.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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ANÁLISIS. Autor: Roy Woodhouse

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