Goat of Duty - Impresiones Early Access

Goat of Duty parece exactamente lo que te imaginas en cuanto escuchas el nombre y echas un vistazo a la pantalla para comprobarlo: un shooter multijugador que sigue la estela de Call of Duty, pero cambiando soldados por las cabras que tan de moda se pusieron con Goat Simulator. Lo que pasa es que no, una vez que lo pruebas, te das cuenta de que no se parece tanto a los juegos de Activision como a un Quake, porque es mucho más rápido y dinámico. Está en Steam Early Access y no nos hemos querido perder las batallas.

La propia descripción del juego deja claro que esto no va tan en serio: "Embiste y trolea a tus amigos, viste los disfraces más disparatados y pon a prueba tu habilidad en el FPS más loco que hayas visto". Y no miente, porque te deja directamente en el menú principal para que des un poco de estilo a tu personaje y te metas a una partida, ya sea una práctica en solitario o un duelo online. No hay relleno, va al grano. Y una vez que estás dentro la cosa va de disparar a todo lo que se mueve, por lo menos en el modo todos contro todos.

Técnicamente la cámara te sigue en tercera persona porque puedes ver la cabeza de la cabra pero la forma de colocar el arma en el lateral de su lomo provoca que la sensación sea más bien de estar en primera persona. Tienes que meterte en el juego como si estuvieras en un arena shooter de toda la vida, un Unreal: entras, coges armas y objetos, matas, te matan y volver a empezar.

En los mapas hay bastantes plataformas a las que subirse, aunque no todos son igual de verticales. Esto se traduce en que cada uno de ellos, ya juegues en Guerra de Rebaños o en Furia de Armas, por mencionar otro par de modos, se convierten rápido en una carnicería, con cabras botando de un lado para otro miembras sueltan misiles a ver a qué aciertan y balas por doquier. Para hacerlo aún más loco, al morir sale una cantidad ingente de sangre. Y no se han olvidado de ese comportamiento físico que ya vimos en el juego de Coffee Stain Studios.

En la versión Early Access de Goat of Duty hay ya unos cuantos mapas como el desierto de los corderos, el pozo del horror, la granja futurista o la estación espacial. Eso ya aporta variedad, y también anima mucho a engancharse y seguir jugando lo fácil que es desbloquear más partes y prendas de ropa para ir cambiando el aspecto de los personajes. Durante nuestra prueba, los lobbies online estaban bastante vacíos, pero los bots de relleno cumplen bastante bien a la hora de convertirse en blancos móviles, y también sirven para conseguir XP.

Con el diseño de trajes no han tenido medida alguna, ni tampoco se han cortado a la hora de "tomar prestadas" algunas ideas. Puedes encontrar un vestido, una malla de lucha libre y hasta de Fallcabra, con permiso de Bethesda. Hablando de Zenimax, con lo que mejor nos lo hemos pasado ha sido con el modo Fus Ro Arena, que básicamente va de precipitar a los enemigos por el límite de una plataforma flotante con inspiración en ya sabéis qué.

Por último, pero no por ello no menos importante, está el armamento. El arma básica de cabra no hace mucho daño, y eso es bueno porque te obliga a moverte mucho y bien en busca de un equipamiento más adecuado por todo el mapa, con el riesgo de que te vuelen la cabeza plana. El lanzallamas se ha convertido en nuestra favorita porque es capaz de achicharrar a varios rivales al mismo tiempo, pero que no falten explosivos, teledirigidos y todo lo que sea capaz de montar un buen charco de sangre.

Goat of Duty ofrece todo lo que puedes esperar de un juego que viene con esta premisa. Es una fiesta constante, sobre todo si entras a los servidores con amigos. Para ser un recién llegado está bien de contenido, pero habrá que ver si esa premisa de ir al grano y con lo justo es suficiente para tener al público enganchado, por mucho que vayan agregando más mapas y opciones, o si se queda en unas partidas para hacer la gracia y ya. Nosotros nos lo hemos pasado bien con este shooter activo y rápido de PC que recuerda a los viejos tiempos del género, pero nos reservamos nuestras dudas.