Wolfenstein: The New Order llegó al mercado durante el día de ayer, y desde entonces hemos intentado jugar a la versión para ordenador con la intención de capturar pantallas y de compararlo con las otras dos versiones que hemos jugado en las redacciones (PS4 y Xbox One), pero con poca suerte hasta ahora.
Resulta que Wolfenstein: The New Order es prácticamente injugable en nuestra tarjeta gráfica AMD, y una rápida búsqueda en la Red revela que hay otros sufriendo el mismo problema. PC Gamer publica que han tenido problemas incluso para que el juego echara a andar (nosotros sí que pudimos ponerlo en marcha), y que la sección del tutorial se reproducía a un pésimo ratio de 5 imágenes por segundo.
Ajustando la configuración a la mínima posible, los colegas de esta revista consiguieron alcanzar 10-25 fps, pero los problemas son recurrentes (y esa cifra insuficiente). En nuestro caso, esta incompatibilidad es tan severa que ni siquiera las pantallas de los logos al arrancar el juego aparecen con la fluidez que deberían. Actualizar los drivers a la versión AMD Catalyst 14.4 ayuda, pero el resultado sigue distando de ser óptimo.
Los jugadores de PC quizá podáis conseguir mejores resultados experimentando con las opciones de configuración del juego (por ejemplo nuestros compañeros de Gamereactor Finlandia aseguran no haber encontrado problemas), pero por el momento llegamos a la conclusión de que comprar la versión PC de Wolfenstein: The New Order significa asumir un riesgo, y que Machine Games debería tomar cartas en el asunto cuanto antes y solucionar los problemas con un parche.
Nuestro análisis del nuevo Wolfenstein, también publicado ayer, está realizado con la versión PlayStation 4, y si bien no ha presentado problemas de rendimiento, el acabado técnico no parece a la altura de la nueva generación de máquinas.