Impresiones con Xenoblade Chronicles X: Definitive Edition: Técnicamente superior, pero no es un juego para todo el mundo

El pasado 29 de octubre los jugadores de nintendo Switch por fin sintieron que sus plegarias estaban siendo escuchadas cuando Nintendo anunció Xenoblade Chronicles X: Definitive Edition para el 20 de marzo en Nintendo Switch. De esta forma y casi en el tiempo de descuento de la consola, los jugadores podrían presumir de tener toda la serie Xenoblade concentrada en el mismo hardware. La entrega original de Wii U cuenta ahora 10 años desdse su lanzamiento, y casi desde el mismo día que Switch salió a la venta se ha suplicado a Nintendo que hiciera el port.

Y no es de extrañar, ya que estamos ante uno de los RPG más valorados de la década del 2010, con un tono más adulto y una historia más seria que el resto de entregas de la serie. Además, el X de su nombre también es importante, porque no está conectado con la narrativa del resto e Xenoblade. Así pues, muchos querrán sumarse a este nuevo lanzamiento, bien por jugarlo por primera vez o por revisitar el clásico en un nuevo hardware y atender al nuevo contenido que hay al final del juego. Y aunque es pronto para hablar de ello, de momento mis impresiones se centran en el principio del juego y sus 4 primeros Capítulos. Y hasta aquí no hay ninguna diferencia en el plano narrativo o de historia. La llegada de la nave Ballena Blanca al Planeta Mira escapando del conflicto alienígena y de la destrucción de la Tierra no ha cambiado ni un ápice desde 2015, ni tampoco la exploración de Primordia ni establecer una base para la colonia humana.

No era la mejor historia entonces, y tampoco lo es ahora, pero sigue dando suficiente empaque para engrasar unos extensos, complejos y detallados sistemas de combate y exploración en un vasto mundo abierto lleno de vida. Nuestro personaje, un avatar personalizado, tend'ra que ir estableciendo relaciones con otros personajes, cumpliendo encargos y descubriendo los secretos de su nuevo hogar. Los Skells, esos famosos mechas de la portada del juego, no aparecen hasta mucho más adelante, así que lo que hacemos en estas primeras horas es acostumbrarnos a su sistema de combate, que con la perspectiva que da el tiempo, se ha revalorizado.

Si recuerdas el sistema Límite de Final Fantasy o si jugaste recientemente a Sea of Stars, hay un poco de cada en Xenoblade Chronicles X: Definitve Edition. Tendremos que intercalar ataques cuerpo a cuerpo y a distancia automáticos con la activación de diferentes habilidades especiales o Artes que, usadas en el momento adeucado, pueden generan una gran cantidad de daño. Además, hay que estar pendiente de nuestros compañeros de grupo, ya que usar determinadas artes cuando te lo piden otorga bonificaciones de combate o recupera salud. Constantemente vas a recibir nuevo equipamiento, así que tendrás que estar actualizando tus armas y las de tus compañeros con regularidad. Ahí poco más se peude pedir para opmitizar el loop jugable, pero sí he echado en falta un botón para acelerar conversaciones o escenas, y otro para, por ejemplo, equiparse el mejor equipo posible de forma automática, como si tienen por ejemplo en Dragon Quest.

Tendréis que disculparme que sea tan ambiguo en estas primeras impresiones, pero Xenoblade Chronicles X es un juego gigantesco, que además se va desarrollando a muy baja temperatura, poco a poco. Pasan muchas horas hasta que ciertas piezas de la historia caen en el lugar adecuado, y otras tantas más para que sus sistemas más populares estén a tu alcance. Pero de lo que sí puedo hablar es de que a nivel técnico el 'port' a Switch ha sido notable. No tanto en lo vidual, aunque sí aprecio nitidez en los fondos y en los movimientos de los personajes y las escenas, sino en la fluidez de movimientos, sin "microsaltos" ni otras limitaciones de llevar un hardware hasta su pico de intensidad. Por ahora, es lo más positivo que puedo decir.

No me malinterpretéis, Monolith Soft. es de los mejores estudios en el género del rol japonés, incluso del RPG a nivel mundial. Pero quizá hay ciertas mejoras que podíamos esperar en una Definitive Edition que aquí no veo. Xenoblade Chronicles X es un título divisivo: Hay quien lo ama y hay quien no. Si lo conociste en tu día y te gustó, podrás revivir su historia y tener "un poco más". Si es tu primera vez en esta entrega y tienes ideas preconcebidas de Xenoblade Chronicles 3, es mejor que cambies la mentalidad y asumas que esto es algo nuevo y diferente. Mejor o peor, eso ya se verá.