Ya sabes que los de The Behemoth son unos cachondos. Si Mario no se hubiera comprado un nuevo traje de gato, los felinos de este teatro habrían ganado el premio a Gato del Año, y sus representaciones chifladas -en realidad los niveles del juego- serían serias candidatas a mejor juego de plataformas. En un viaje lleno de guiños y referencias a la historia de los videojuegos, debes esquivar infinidad de obstáculos letales y aprender mientras vas jugando. La variedad es inaudita y la cantidad abrumaría... si no te partieras de risa con las situaciones que te encuentras. Y si no te basta con morir en las escenas de los gatos malvados, puedes crear las tuyas propias con el editor de niveles. ¡A ver si te salen aún más difíciles!
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