Español
Gamereactor
análisis
Jurassic World Evolution

Análisis de Jurassic World Evolution

Si perder un ojo a la instalación eléctrica, nos hemos atrevido a entrar en este parque.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio
HQ
HQ

Arrancamos Jurassic World Evolution para su análisis con la misma emoción que un grupo de velocirraptores que acaban de ser liberados en un campo de hierba alta repleto de herbívoros confiados. El chute en vena de nostalgia que provoca la voz de Jeff Goldblum te traslada inmediatamente al mundo de Las Cinco Muertes. Qué curioso que aquí lo tengamos son seis islas.

Todo empieza en la isla Matanceros, que arranca como un tutorial para después transformarse en un reto más del que no puedes salir si no consigues las cinco estrellas, que es la forma de abrir el modo sandbox y de llegar a la ansiada isla Nublar, la de los libros y las películas. A pesar de todo lo anterior, llegas a este punto y a este momento sin demasiadas instrucciones sobre qué hacer. Pero hay una parte muy positiva del aprendizaje, y es que te permite colocar las cosas donde quieras desde el primer momento, no te obliga a seguir un guión. Es el espíritu de libertad que esperamos de este género.

La falta de consejos y recomendaciones se olvida pronto gracias a unos controles muy intuitivos, y eso que lo hemos jugado en consola y no en PC con ratón y teclado. Invita a jugar desde el principio, tanto por la facilidad con la que empezar o recuperar partidas como la que presenta durante el propio gameplay. Y una razón de peso es que no se lo han tomado demasiado en serio, no han tratado de hacer el gestor de recursos más complejo y profundo posible, sino algo ligero para todo tipo de públicos, para quienes salen del cine con subidón de dinosaurios y quieren montarse su propio chiringuito. Por ejemplo, que un carnívoro se escape y se zampe a un visitante desesperado podría ser motivo de bancarrota en un simulador serio, pero aquí el sistema de estrellas e ingresos solo sufre una pequeña caída de la que se sale en cuestión de horas.

Publicidad:
Jurassic World Evolution

Esta laxitud en la dificultad, que entendemos que no era lo que algunos fans de los parques esperaban escuchar, permite que jugar siguiendo técnicas de ensayo y error funcione. Por ejemplo, en la primera isla nos pidieron poblar el parque con herbívoros como triceratops. Pero los visitantes no tardaron en empezar a pedir un poco de sangre. Así que soltamos a un carnívoro y se convirtió aquello en un documental de Félix Rodríguez de la Fuente, porque fue una carnicería hasta que la manada logró acabar con él. ¿Y cuál es lección de hoy, niños? Que, o bien creas un ecosistema equilibrado, o bien lo haces más a lo humano y pones unas buenas vallas electrificadas.

Por muchas precauciones que tomes, siempre va a haber peleas y muertes. Las cosas van saliendo mal de vez en cuando. Si no es porque unos animales estresados entra en locura transitoria es que llega una tormenta tropical y se carga las contenciones. Lo que no nos ha gustado demasiado es que los eventos aleatorios ocurren con mucha frecuencia, así que te pasas mucho tiempo enviando equipos a calmar a un dilofosaurio por aquí y a reparar un agujero por allá. Aunque se supone que es parte de la diversión, a nosotros nos ha parecido que nos impedía hacer lo que más nos gusta.

Jurassic World Evolution sabe cómo sacar partido a la licencia oficial y a la nostalgia. Por la pantalla pasan algunos de los personajes de toda la vida a dar unos consejos, aunque nuestro favorito es el Dr. Malcolm, con sus anécdotas tontas y fuera de lugar. Nos hemos pasado toda la partida esperando a que dijera su frase mítica de la primera película sobre el montón de mierda, pero no está. También hemos echado en falta a gente como Alan Grant.

Publicidad:
HQ
Jurassic World EvolutionJurassic World Evolution

Una vez que el juego despliega sus elementos, hay tres áreas de trabajo que atender: ciencia, entretenimiento y seguridad. Cada una va planteando misiones diversas que hay que completar, pero lo que pasa es que dedicarse a una de ellas puede tener un impacto negativo en las otras, así que aprendimos que el truco está en terminar un set de misiones de un grupo antes de pasar al siguiente.

En cuanto a contenidos, hay 38 dinosaurios en la versión básica y 4 más en la deluxe con los que poblar el terreno. El momento paleontólogo lo ponen unos equipos de investigación que hay que enviar por el mundo en busca de fósiles, que serán los encargados de recoger y traer de vuelta las muestras de ADN a partir de las cuáles sacar los clones. Y cuando tienes bastante de un tipo, puedes vender el resto para financiar más excavaciones. El fin último, por decirlo de algún modo, es tener suficiente código genético como para reproducir a escala la vida hace 200 millones de años. Pero la gracia y la conexión con la nueva trilogía es que puedes experimentar con los genes para cambiar su aspecto y su adaptación, algo que agradecen muchos los visitantes al parque.

La economía del juego se mueve entre estos elementos: descubrimiento de fósiles y coste de las excavaciones, población de las tierras con especies variopintas y atractivas con el riesgo de fracasar en la investigación y matar a los costosos clones, y el mantenimiento, la ampliación y la mejora de las infraestructuras.

Jurassic World Evolution

Esperábamos un poco más de conexión con las películas de la nueva trilogía y su idea de crear especies nuevas de laboratorio, pero hay bastantes vacíos. Hemos echado especialmente en falta a dos especies de Jurassic World, el mosasaurio y el pteranodón, pero es que no hay elemento agua ni elemento vuelo en todo el juego. No sabemos si se lo están reservando para los DLC que van a venir y que, como ya dijeron, serán todos gratuitos. Sabemos que en la primera descarga, que estará asociada a la película de Juan Antonio Bayona y que veremos al Indoraptor el 22 de junio.

Las mecánica y la temática de este videojuego inspirado en Parque Jurásico están bien, pero dentro de esa limitación y sencillez que lo abre a todos los públicos hay una carencia que no se puede pasar por alto, y es la falta de variedad de infraestructuras, así como la falta de opciones de personalización de las que hay. No sabemos si también habrá más edificios como parte del DLC, pero falta le hace. Que haya tan pocas opciones de construcción y tan pocas especies de animales son las dos grandes pegas que podemos poner a Frontier. Sin pasar por alto que faltan opciones de gestión importantes, como el feedback de los visitantes.

Jurassic World Evolution es un juego que invita a ponerse en cualquier momento y sin complicarse demasiado, porque no es muy exigente y está muy bien planteado y diseñado. También nos ha gustado esa estructura por fases y la conexión entre los distintos modos de juego porque juntos forman una línea de progresión adecuada. Lástima que termine tan pronto, porque el contenido y las opciones están bastante limitadas, al menos hasta que lleguen los descargables gratuitos. Es divertido, está bien hecho y usa una licencia que pega a la perfección, así que merece la pena.

HQ
Jurassic World EvolutionJurassic World EvolutionJurassic World EvolutionJurassic World Evolution
08 Gamereactor España
8 / 10
+
Un diseño divertido e intuitivo. No es muy duro. Este tema encaja a la perfección con un juego de gestión. Los DLC vendrán gratis.
-
No hay criaturas marinas ni voladoras (de momento). Escasez de infraestructuras. Los brotes de furia a veces son inasumibles.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

Contenido relacionado



Cargando más contenido