La escena en blanco y negro de Dune: Parte dos no gustó nada a Warner Bros. antes del estreno

Todos los que hemos visto la increíble secuela de Dune, dirigida por Denis Villeneuve, sabemos muy bien lo magnífica que es la escena en la que la asesina Harkonnen, Feyd-Rautha, recibe como regalo de cumpleaños una batalla mortal en la arena contra uno de los seguidores de Leto Atreides. Gracias al director de fotografía y ganador de un Oscar, Greig Fraser, que decidió filmarlo todo con una cámara UV que hace que el planeta natal de los Harkonnen, Giede Prime, parezca un poco más inhóspito. Sin embargo, a los jefes de Warner no les gustó esta decisión. En un principio, querían que Denis y Fraser volvieran a rodar toda la escena, que no podía ser en blanco y negro. Fraser comentó a ScreenRant lo siguiente:

"Para nosotros, era el primer rodaje que íbamos a hacer sobre el escenario, era lo primero que íbamos a rodar para la fotografía principal. Hicimos un poco de rodaje previo en Italia con Florence y Charlotte, un par de días antes, pero esta era la primera toma real que íbamos a hacer en el escenario y que se iba a mostrar al estudio. Fue un paso un poco atrevido que decidiéramos rodar en este formato, porque la preocupación era que, efectivamente, la gente que no estaba allí viera este metraje y dijera: "¿Qué demonios es eso?". De repente, estamos en llamadas telefónicas diciendo: "¿Podemos arreglar eso? ¿Podemos arreglarlo en postproducción? ¿Podemos añadir color? ¿Cómo resolvemos esto?" Pero tomamos una decisión y dijimos: "Bueno, hemos tomado una decisión. Es blanco y negro, sin color, no podemos darle color. No hay vuelta atrás. Hemos tomado una decisión, y vamos en una dirección. "Así que, para mí, fue probablemente el mayor - yo no diría desafío, la mayor consideración, donde no teníamos camino a casa.

Todas las decisiones que se toman en una película, se puede trenzar su manera de salir de ella, se puede resolver de nuevo el color sabio, o se puede cortar su manera de salir de ella. Esto nos dejó expuestos, figurativa y literalmente, donde no hay manera de que podamos cambiar esto más tarde si decidimos que era una mala idea. Así que fuimos a por ello. Me alegro de que nos mantuviéramos firmes. Yo también, porque hubo un periodo de tiempo en el que quizá no íbamos a hacerlo. Los instintos son una cosa curiosa, porque tu corazón dice algo, y luego tu cerebro dice otra cosa, y nuestros cerebros decían: "No deberíamos estar haciendo esto", pero nuestros corazones decían: "Tenemos que hacerlo". Así que sí, creo que tienes razón, seguimos al corazón, no a la cabeza".