El jefe final de la expansión World of Warcraft: Legion, el temible Argus el Aniquilador, es tan duro como su nombre indica. Tanto, que a la mejor guild de WoW del mundo le ha costado tumbarlo en dificultad mítica gritos, sudor y, sobre todo, muchas horas. Pero por fin lo ha conseguido y ha querido compartir la emoción con quienes estaban pendientes.
Como cuenta su líder George Georgiadis en Twitter, han necesitado 320 intentos para tumbar a Argus en dificultad máxima. "No es tan difícil como KJ, pero aún así ha sido duro", ha dejado escrito antes de contar que el corazón le latía con fuerza en el momento de lograrlo.
Lo que nos lleva a preguntaros, ¿cuál es el momento de vuestra vida como jugadores que más presión en el pecho habéis sentido?