Mientras Ucrania lucha contra Rusia en el frente, el jefe de sus Fuerzas de Sistemas No Tripulados, el coronel Vadym Sukharevskyi, señala una realidad preocupante: Las fuerzas de la OTAN no están preparadas para la implacable embestida de los drones que están transformando la guerra moderna (vía Reuters).
Con ambos bandos compitiendo por la ventaja tecnológica, Ucrania ha adoptado rápidamente la inteligencia artificial y la tecnología láser para contrarrestar los ataques con drones de Rusia, e incluso ha desarrollado nuevas tácticas como los drones nodriza para transportar vehículos no tripulados más pequeños al combate.
Sin embargo, a pesar de estos avances, la rentabilidad de los drones en comparación con el armamento tradicional, como los caros misiles y aviones de combate, es algo que la OTAN aún no ha comprendido del todo. La ventaja económica de los drones es evidente, ya que a menudo cuesta mucho menos producirlos y desplegarlos, lo que los convierte en una solución ideal para los elevados costes de la guerra moderna.
Dado que los drones evolucionan a la velocidad del rayo y que el éxito de Ucrania en el campo de batalla depende en gran medida de estas innovaciones, Sukharevskyi insta a la OTAN a reconocer el poder económico y estratégico de los drones antes de que sea demasiado tarde. Por ahora, está por ver cómo se adaptará la OTAN a esta revolución de los drones que está redefiniendo el futuro del combate.