Lego El Hobbit - primeras impresiones

Ya no queda duda de que el trío que forman TT Games, Lego y Warner Bros. (a veces cambiando el último por Activision, Nintendo u otros) es sinónimo de productos de calidad y de sinergia exitosa. La originalidad y el sentido del humor del estudio inglés, unida a la popularidad incuestionable, posibilidades creativas y potencial licenciatario de la marca de bloques de juguete danesa, han derivado en múltiples ocasiones en la aparición de pequeñas joyas videolúdicas para compartir en familia, títulos publicados en su mayoría por WB que aportan un toque de magia y parodia a algunas de las películas más taquilleras.

Tras el reciente y notable paréntesis de La LEGO Película: El Videojuego -título exquisitamente autorreferencial basado en la película de animación- TT Games no ha olvidado su destreza con las adaptaciones peliculeras de franquicias consolidadas, como es el caso que nos ocupa, el interesante videojuego de Lego El Hobbit, que estará a la venta a finales de primavera en un montón de consolas nuevas y antiguas y en ordenador. El equipo de desarrollo estuvo de tour europeo hace unos días, incluyendo paradas en Madrid o Milán. Durante la segunda tuvimos la oportunidad de probar dos niveles de esta prometedora adaptación y confesamos volver a casa con una sonrisa en los labios, por mucho juego de Lego que hayamos recibido últimamente.

Después de la breve introducción al proyecto realizada por uno de los productores asociados de TT Games, nos encontramos por primera vez a los mandos, completamente inmersos en la sugerente atmósfera de la Tierra Media que presenta este encantador Lego El Hobbit. Una secuencia pone rápidamente en situación, recuperando la apertura de la trilogía de Peter Jackson en "Un Viaje Inesperado", tras lo que aparecemos en el agujero hobbit de Bilbo Bolsón, momento en el que podemos entrar en juego. Con una especie de breve tutorial, nos familiarizamos rápidamente con los intuitivos controles del título (en línea con otros juegos Lego) y también con los personajes (habrá quince en total, nos dicen) con los que vamos a compartir nuestra aventura. Según van llegando los protagonistas de libro y película, descubrimos que, como era de esperar y como es ya habitual, cada uno tiene sus propias habilidades y características indicadas para resolver puzles concretos o encontrar piezas para construir objetos.

Por tanto, diferencias entre personajes para avanzar en el juego y su capacidad para construir son las dos primeras lecciones de importancia. Esto se recrea mediante varias actividades o minijuegos; en nuestro caso, preparar la gran mesa que reunirá a los enanos, los invitados "inesperados" en Bolsón Cerrado. Y para romper el ritmo de la acción y de la recolección constante de piezas, se activa una secuencia de baile mediante comandos rápidos QTE -habrá varias de estas durante el juego- que sirve para poner la mesa ante el atónito Bilbo, pasando los alimentos entre los personajes. No es nada del otro mundo. Es una actividad bastante aburrida y que encaja más bien poco en el contexto, por lo que únicamente sirve para el toque cómico.

Una vez completada la fase de tutorial, por fin tenemos la oportunidad de jugar en el mismo centro de la acción en el segundo nivel que nos dejan, la Ciudad de los Goblins. Tras lo estático (por muy justificado) del primer nivel, es aquí donde empezamos a saborear el sabor de la batalla. Al igual que en anteriores títulos de TT Games, para avanzar hay que ir empleando de forma sinérgica las posibilidades de cada personaje; la coordinación de sus diversas acciones no sólo es crucial para resolver los rompecabezas, sino también para luchar contra los distintos enemigos que esperan por el camino. Así hay que aprovechar la magia de Gandalf, el martillo de un enano o el trabajo en equipo para emplear arietes contra paredes y escaleras frente a los muros. Aquí vuelven unas inevitables secuencias de QTE que no dejan demasiado buen sabor de boca.

En esta Ciudad de los Goblins nos asombra principalmente la belleza y detalle con los que se han recreado personajes y entornos, siempre con sumo cuidado pese al estilo cómico (atención a las capturas de pantalla). La tenue luz de las antorchas provoca brillos en los objetos de cobre que están dispersos por la oscura metrópoli subterránea. En todos sus niveles, un inmenso número de Goblins y Orcos amenaza como uno de los aspectos más sobrecogedores de un título que, especialmente en las consolas de nueva generación, ofrecerá a jugadores de todo tipo un espectáculo visual.

Nuestra breve pero intensa experiencia en compañía de Lego El Hobbit termina poco después, dejando un sabor definitivamente positivo gracias al cuidado y atención que siempre pone TT Games, coronado con una excelente dosis de humor. ¿Y todo pese a la incesante producción de más y más juegos del tipo? Veremos. En este sentido, provocan dudas dos aspectos. El primero es la notable falta de innovación tras el esfuerzo de La LEGO Película. El segundo, la audiencia a la que quiere apuntar el título; con una simplicidad de las pruebas quizá excesiva -en lo visto por ahora- y con la aparición de indeseables secuencias QTE, parece no querer arriesgar complicando el reto. No es que esto sea un problema a la hora de disfrutar la experiencia como un todo, y siempre lo hemos pasado en grande compartiendo el juego, pero nos da que falta algo para el jugador más entusiasta.

Aun así, son demasiados juicios en base a sólo dos niveles de Lego El Hobbit. Estamos deseando encajar todas las piezas con el producto final y que nos sorprenda con variedad de situaciones, puzles y bromas en un mundo que ya es fabuloso y en el año que tanto se hablará de estos personajes de fantasía.