Sin duda, es el mejor formato portátil que se ha sacado y el más popular hasta la fecha. Quedarme solo con los cinco mejores títulos de Nintendo DS no fue tarea fácil, pero si leísteis mi lista de Gamecube, sabréis lo 'simp' que era por Wind Waker, un juego que Nintendo supo aprovechar al máximo, dándonos una aventura que realmente se ha desarrollado para encajar a la perfección con el hardware de Nintendo DS. El resultado de esto fue una aventura simplemente mágica que no se habría podido llevar a cabo en ningún otro formato.
La serie de Nintendo que más echo de menos es Advance Wars y ninguna de sus otras entregas superó a Dual Strike para Nintendo DS de 2005. Esta última tenía todo lo que nos encantaba de la serie original, pero añadiendo un uso ingenioso de la doble pantalla y una infinidad de novedades que llevaban la experiencia de juego a otro nivel. Esta obra es una de esas pocas en las que el tiempo no ha hecho mella y que a día de hoy es tan entretenida como lo era hace dos décadas, cuando se estrenó.
En realidad, se debería llamar Osu! Tatakae! Ouendan, pero no se llegó a lanzar en Occidente y pasó a ser Elite Beat Agents. Era uno de esos proyectos que en realidad nunca se habría podido desarrollar sin Nintendo DS y que, además de sacar su máximo potencial, ofrecía algo completamente nuevo en el sentido de su disparatado humor japonés. El principal objetivo de este título era levantar el ánimo de los personajes secundarios mientras cumplían con sus objetivos y esta idea un tanto extraña se ganó a toda una comunidad de jugadores en su momento. Y con razón.
Para el momento en el que se estrenó esta obra, Nintendo se había centrado en lanzar entregas de Mario en tres dimensiones, pero los jugadores echábamos de menos las aventuras en 2D tras una larga espera de 15 años sin ellas. En 2006, Nintendo decidió escuchar a sus fans y estrenó New Super Mario Bros., dejando claro que seguía sabiendo cómo producir juegos de plataforma que dejaban por los suelos a todos los otros. A la fórmula clásica de Super Mario se le añadieron tantísimas innovaciones en la dinámica de juego que la idea volvió a parecer nueva y, desde entonces, Nintendo ha retomado regularmente sus versiones en 2D de los hermanos fontaneros. Este es un título que no puede faltar en nuestra colección de Nintendo DS.
Al igual que pasó con Gamecube, el mejor juego que llegó al formato Nintendo DS no lo creó la propia empresa Nintendo. En vez de esta, fue Rockstar la que ofreció la aventura de Huang Lee, que era muy explícita para sorpresa de todos y contaba con los ingredientes necesarios para hacer que el mundo entero se volviera loco por Grand Theft Auto. Rockstar, en medida de lo posible, intentó no morder el anzuelo de meter muchos gráficos pesados y creó un proyecto de acción y aventura diseñado exclusivamente para el hardware del formato Nintendo DS, aprovechando a la perfección sus capacidades gráficas y sus controles. Así, el lápiz táctil se convirtió en una parte fundamental de nuestras operaciones de tráfico de drogas y robos. Además, se usaron otros controles de la consola con mucho ingenio, como silbar al micrófono para llamar a un taxi. Sin duda, que una aventura de la talla de Chinatown Wars pudiera entrar en un diminuto cartucho de Nintendo DS fue y sigue siendo un misterio. Pero, aunque todo el mundo parece haberlo olvidado (sin contar con una pequeña referencia que se hizo en Grand Theft Auto IV), este título sigue destacando como uno de los mayores logros de Rockstar.