Un nuevo juego de Mario siempre evoca sentimientos encontrados. Por un lado puede que nos dispongamos a repasar mucho material reciclado, pero por otro lo que recicla Nintendo es parte del entretenimiento videolúdico más brillante creado jamás. New Super Mario Bros. U construye sobre la millonaria entrega lanzada en Wii, así que prepárate para más plataformas coloridas y deliciosos saltos de precisión (de hasta cuatro jugadores) en el familiar Reino Champiñón.
La novedad es que entra un quinto jugador, pero este no será saltarín. Nintendo se esfuerza para presentar los beneficios del nuevo sistema de control de Wii U y convencer a los jugadores con la novedad de la pantalla táctil adicional. En este caso lo hace con una función que nos recuerda a los viejos tiempos del Master de juego: el jugador que tiene el Wii U GamePad puede manipular plataformas y enemigos para ayudar (o hacer la puñeta) a sus compañeros de juego.
Aún es complicado adelantar si se tratará de un detalle novedoso o una revelación genuina, pero la sensación de logro y el placer de colaborar colocando plataformas adelantándote a los saltos de los demás fue una sensación que había que vivir en el Los Ángeles. Casi igual de divertido que enviar al mismo jugador a una muerte segura unos segundos después. Podría parecerse a Ice Climber o Populous, así que estimuló el jugón de la vieja escuela que llevamos dentro.
En solitario, New Super Mario Bros. U ofrece la primera experiencia de juego con videoconsolas de sobremesa sin necesidad de tener televisión. Tienes la opción de jugar en la pantalla del GamePad si alguien en el salón casa tiene el mal gusto de querer poner otro canal que no sea el de la consola. Esta idea, evidentemente, evitará la típica discusión en las familias que aún no han invertido en varias pantallas planas. Y para los jugadores más dedicados supone la enorme ventaja de no tener que pausar el juego cuando tienen que pasar por el 'trono'.
El nuevo hardware también pone sobre la mesa una renovada potencia gráfica, permitiendo experimentar el primer juego de Mario en gloriosa alta definición (HD). Sin embargo, dejar atrás los resultados de Wii hoy en día ya no se interpreta como un logro, así que lo que de verdad brilla en un planteamiento lateral como este es su impecable diseño. Tampoco se vuelve loco de innovación, ni incorpora nuevos ingenios visuales, sino que presenta un diseño nostálgico y eterno, que toca los botones de los mejores recuerdos. Y eso es algo preocupante.
Habiendo pasado toda una vida enriquecida con maravillosas memorias de Mario, es difícil esquivar el atractivo de la nostalgia reciclada, pues el gigante de los videojuegos de Kyoto ha conseguido convertir esta nostalgia retro en un infalible recurso artístico.
No puedes evitar sonreír cuando te encuentras de repente un huevo de colores. Un bebé Yoshi rompe el cascarón, hambriento de enemigos, pero también puede inflarse y convertirse en un dino-globo para ayudar a Mario. Es otro elemento familiar con un pequeño retoque. Además, el nuevo traje de ardilla voladora permite al fontanero planear hasta plataformas inaccesibles.
Otra característica que sacará la lagrimilla a los fans de Super Mario World es la reintroducción de un mapa mundi sin cortes. Quizás sea un poco triste que lo que más nos emociona de este juego nuevo es que recuerde a otro clásico de más de 20 años en una faceta esencial.
Pero eso no nos corta las expectativas, y además esta otra idea recuperada de los clásicos se ve potenciada con la integración del servicio Miiverse, de forma que puedes intercambiar mensajes y consejos con otros jugadores desde el mismo mapa de niveles.
Considerando todas sus bazas y la jugabilidad de sus predecesores, New Super Mario Bros. U parece una compra esencial en la salida de la Wii U. El único problema que vemos es que no parece un juego que nos dejará boquiabiertos por sus novedades y elementos innovadores. Vale que está el traje de ardilla voladora y muchos retornos bienvenidos, todo junto al aprovechamiento del nuevo Wii U GamePad, pero Mario necesita aún más sorpresas para mantenerse por delante en la carrera contra otros como Rayman.