Cliff Bleszinski se ha sincerado y ha reconocido que está recibiendo una cura de humildad con el lanzamiento de Lawbreakers, el primer juego que crea desde su marcha de Epic Games y la formación de su propio estudio, Boss Key Productions. Y ha prometido cambiar para rescatarlo de un fracaso total.
A pesar de ser un buen juego, no consigue atraer a los jugadores, que como vimos con los datos de Steam, dibujan lalínea de vida de un hombre moribundo (aunque se dice que la versión de PS4 "va bien"). Ha reconocido que fue un error lanzarlo sin un modo Deathmatch tradicional, pero no es el único problema.
Bleszinski ha reconocido que su comportamiento en público, principalmente en redes sociales, y su personalidad, han influido negativamente en sus ventas. "Puedo ser muy chulo y muy arrogante en redes sociales", ha dicho a GameSpot. Y darse cuenta de eso "me ha bajado mucho los humos".
La cosa está mal, pero cree que todavía están a tiempo de salvar el proyecto. "Voy a seguir iterando en el juego, seguir añadiendo cosas. Y, sinceramente, voy a intentar ser menos tonto", ha contestado. Ha adelantado que están planteándose promocionar Lawbreakers cuando lleguen actualizaciones de contenido, ya sea con rebajas o con fines de semana gratuitos.
Una respuesta sincera, pero solo con palabras no arreglará el problema.