Cuando los servidores de Destiny 2 se fueron a negro durante varias horas en la tarde de ayer miércoles no sabíamos lo que nos esperaba a la vuelta. Y Bungie ha gritado ¡sorpresa!, porque por fin ha deshecho parte del desastre que había traído consigo la expansión La Maldición de Osiris, una noticia que alegrará a los usuarios que estaban enfadados y excluidos de la partida.
El estudio ha revertido los cambios que impedían a los usuarios que no habían comprado la expansión acceder al Estandarte de Hierro y jurar lealtad a una facción en las Asambleas de las facciones, como cuenta en su web oficial con unas breves palabras que también podéis leer aquí debajo:
Hay que recordar que en el calendario de juego había programado un evento Rally de facciones en el mes de diciembre, pero Bungie decidió posponerlo hasta haber revertido todas estas decisiones de diseño que tan mal sentaron en la comunidad. Ahora que todo ha vuelto a la normalidad y que cualquier usuario puede acceder a todo el contenido por el que ha pagado, suponemos que no tardarán en realizarse este evento y también el de tipo Estandarte de Hierro.