Bandai Namco anunció el pasado martes que el lanzamiento de la versión Nintendo Switch de Dark Souls: Remastered se retrasa del 24 de mayo al verano. El resto de plataformas lo van a recibir en fecha. Una decisión que, como hemos sabido después, también va a afectar a la beta que la compañía va a celebrar antes de su estreno. A través de la cuenta de Twitter del juego, han anunciado que los test de rendimiento de los servidores de la versión de Switch se llevarán a cabo por separado, "en una fecha cercana al lanzamiento en Switch".
El retraso no está saliendo gratis a la editora. Tras el anuncio del cambio de fecha, multitud de usuarios de la consola Nintendo se han quedado en redes sociales y foros sobre esta decisión, que es especialmente sangrante dado que fue un Direct la vía de anuncio de esta reedición del juego de FromSoftware. La versión Switch fue la primera en anunciarse y al final será la última en llegar.