Nintendo vuelve a beneficios por encima de 1.000 millones de euros

Los más de 20 millones de consolas vendidas y 100 millones de videojuegos vendidos por Nintendo en el último año fiscal han impactado de forma extraordinaria en sus cuentas. El periodo fiscal 2018 cerró el pasado 31 de marzo con unas cifras que la compañía no recordaba desde la época dorada de Wii: ha vuelto a superar la facturación de 1 billón de yenes.

Son casi 8.000 millones de euros ingresados por diversos conceptos, más del doble que el ejercicio anterior, pero el aspecto más importante es su actividad principal, que de nuevo parece saneada. El beneficio de explotación se ha disparado un 500% hasta los 177.557 millones de yenes, y sumado a un beneficio ordinario de casi 200.000 millones de yenes, los beneficios estaban cantados. 139.590 millones de yenes, es decir, más de 1.000 millones de euros limpios que van a dejar una buena renta a los accionistas de la compañía.

Y la cosa no va a quedar así. Nintendo espera seguir creciendo arropada por Switch y por el resto de sus negocios. Prevé una facturación de 1,2 billones de yenes y un aumento de los beneficios en todos los segmentos para concluir con un beneficio neto un 18,2% superior al de este año. Esta previsión se basa en colocar otros 20 millones de unidades de Switch con 100 millones de sus juegos, y otros 4 millones de consolas de la familia 3DS con 16 millones copias adicionales. Además, esperan reforzar ingresos con el servicio Nintendo Switch Online y juegos para móviles como Mario Kart.

Junto a los resultados, también se ha informado sobre el cambio de presidente, cargo que ocupará Shuntaro Furukawa a partir del 28 de junio de 2018, tras la Junta general de accionistas.