Hoy en día, un beat 'em up de desplazamiento lateral se parece a un arte perdido. Son un tipo de juego que se beneficiaba especialmente de los arcades y del modo local, pero que siguen pudiendo proporcionar ese punto de diversión caótica. Es una pena que no veamos más de ellos y más aún si son del estilo de Phantom Breaker: Battle Grounds Ultimate.
Cuando me metí en la cabina para jugarlo, no sabía que debía esperar de este título. Era mi última cita en la Gamescom y una de las pocas ocasiones en las que tuve una sesión de juego para meter mano en el producto, sin más. No conocía la franquicia de antes, ni a los personajes, ni siquiera sabía nada del anime en el que estaban basados algunos de esos personajes. Pero, tan pronto como me pusieron el mando en las manos y me dejaron en unas hermosas y pixeladas calles de Tokio, supe cuál era el objetivo: Dar puñetazos.
Al igual que en la mayor parte de los beat 'em up de desplazamiento lateral, te encargarás de una serie de enemigos mientras te desplazas por el nivel, haciendo uso de ataques ligeros, fuertes y especiales. Por supuesto, si quieres ser eficiente, tendrás que encadenar todos esos golpes y hacer combos. En este juego, vas cargando tu barra en todo momento, y con carga suficiente puedes usar ataques poderosos con los que acabar con grupos enteros de enemigos de una.
Jugamos una partida de tres jugadores y el juego demostró cumplir a la perfección con ese caos típico de los beat 'em up, donde no terminas de saber por dónde andas hasta que no ves de donde sale disparado el enemigo que acabas de golpear. Nos divertimos aporreando botones, aunque debo notar que estábamos jugando en modo fácil y que tienes acceso a todas las habilidades posibles desde el comienzo del juego. Así que, como es de esperar, fue una experiencia fácil, pero si lo que buscas no es relajarte con una partida multijugador local, puedes aumentar la dificultad y poner a prueba tus dotes de combate.
Phantom Breaker: Battle Grounds Ultimate introduce unos cuantos cambios a la fórmula de su juego base. Además de actualizar el sistema de juego y los gráficos, también han añadido a los villanos como personajes jugables. Por desgracia no estaban disponibles en nuestra demo, pero sin duda hay una buena dosis de nostalgia al ver enormes listas de personajes decididos a unirse al combate. Uno de mis favoritos era el camión, porque no me puedo imaginar cómo jugarías con él. Ocupa un tercio de la pantalla.
En Phantom Breaker: Battle Grounds Ultimate, la acción al jugar es rápida y frenética. Como con otros juegos del género, apenas te dan un momento de descanso entre que sales de un nivel y te lanzas de nuevo a machacar grupos de enemigos en el siguiente. Eso sí, como el combate es fácil de entender y te acostumbras rápido, lo cierto es que nunca me sentí abrumado por la enorme cantidad de cosas que estaban pasando al mismo tiempo. Además, golpeas con bastante fuerza y puedes aguantar unos cuantos golpes, lo que significa que no tienes que ser la máquina de combos perfecta para lograr ir avanzando. Los fondos pixelados y los modelos de los personajes también crean una mezcla de modernidad y nostalgia, con colores brillantes y diseños sobresalientes.
No soy ni de lejos la persona más cualificada para hablar de Phantom Breaker: Battle Grounds Ultimate. Pero, por lo que he podido ver jugándolo en la Gamescom, este beat 'em up es directo, divertido y una gran forma de pasar un buen rato aporreando botones. Uno de los tipos de juegos de nuestra juventud, pero actualizado a los estándares modernos, creando un gran momento a la hora de conocer la franquicia mediante este remake aún por salir.