La Liga de Fútbol Profesional de Francia (LFP), el organismo que dirige las principales ligas de fútbol profesional en Francia, está bajo sospecha de corrupción: malversación de fondos públicos, corrupción activa y pasiva de dinero público y tráfico de influencias (la liga francesa recibió un rescate financiero tras el fracaso de un acuerdo de 4.000 millones de euros con Mediapro sobre los derechos de televisión).
La Fiscalía Nacional Financiera (PNF) de Francia ordenó el registro de las oficinas de la LFP, de su presidente Vincent Labrune (recientemente reelegido para otros cuatro años como presidente de la LFP), así como de las oficinas de CVC.
CVC es una empresa de capital riesgo que, en 2022, firmó un acuerdo de inversión con la liga de fútbol: el fondo invirtió 1.500 millones de euros a cambio de una participación del 13% en su nueva filial de medios de comunicación.
Tras una denuncia de la asociación anticorrupción AC!!, la Fiscalía ha investigado el acuerdo. Según L'Équipe, no está claro cómo se distribuyó el dinero que se utilizó para pagar a los abogados y bancos que asesoraron a la liga durante su acuerdo con CVC.