The Division tuvo un buen arranque en ventas pero no así en fiabilidad. Los jugadores han sufrido de todo, desde glitches que destrozan partidas a otros errores que fastidian la experiencia, incluso la desnivelación de las armas. El objetivo de Massive Entertainment era ir arreglándolo con parches a medida que desarrollaba sus expansiones, como pudimos comprobar con el lanzamiento del DLC Subsuelo. Pero ahora ha dicho basta.
El estudio ha anuncio la congelación de todos los trabajos relacionados con las futuras expansiones, ya vendidas a muchos usuarios en el Pase de Temporada. Su idea es "fortalecer la experiencia base antes de añadir contenido nuevo, pero también mejorar de forma constante dándole más tiempo de producción para asegurar la calidad de las actualizaciones futuras".
Sobre el calendario, esto significa que la segunda gran expansión, Supervivencia, ya no va a llegar junto a la actualización 1.4, este mes de octubre, sino más tarde en este mismo 2016. Y la siguiente las Stand, se va a comienzos de 2017.
En cuanto a los parches incluidos en esta versión 1.4 de The Division, podemos esperar que repare todos los problemas que se han ido acumulando en esta lista y algunos otros no anotados, pero también va a traer un fuerte trabajo de reequilibrio de dificultad, potencia de armas y equipamiento o experiencia multijugador, así como un cambio en la concepción del loot para hacerlo "más relevante para el jugador".