Sniper: Ghost Warrior 2

El francotirador: respetado y despreciado. En los juegos online no hay nada peor que morir una y otra vez por culpa del mismo francotirador puñetero, escondido en la distancia. Pero al mismo tiempo, nos encantaría ponernos en su posición y hacer unas cuantas bajas seguidas con el rifle más preciso.

El estudio polaco City Interactive se dio cuenta de que el mercado de los shooters comenzaba a abrirse lo suficiente como para ofrecer una experiencia dedicada íntegramente a este tipo de soldado. No es una idea demasiado novedosa, pero en las aguas muertas de Battlefields y Modern Warfares, Sniper: Ghost Warrior consiguió colocar la nada despreciable cifra de dos millones de copias a nivel mundial. Es un logro enorme, sobre todo si tienes en cuenta la recepción mediocre que le otorgó la crítica (Metacritic tiene estas notas medias: PC - 55/100, Xbox 360 - 45/100, PS3 53/100).

Para la segunda parte, como es normal, los desarrolladores han confeccionado una lista de mejoras que quieren realizar basadas en el 'feedback' del primer juego. Cambiando a la tecnología Cry Engine, los gráficos están claramente por encima del original, aunque no alcancen los niveles de la serie Crysis. También han eliminado las secciones "correr y disparar", construyendo todo el juego con el sigilo y los disparos lejanos en mente. Querían conseguir más variedad, y al principio pensaron en quitar todos los entornos de jungla, pero cuando empezaron a utilizar el motor de Crytek lo tuvieron claro: sería una pena no aprovechar esa vegetación. Por lo tanto, en este juego habrá selva, zonas urbanas y entornos montañosos. También habrá prismáticos para marcar a los enemigos (prácticos cuando tienes múltiples objetivos o cuando tienes que colarte entre ellos), a sumar a la visión térmica de los últimos niveles.

El juego comienza con nuestro francotirador, Colin Anderson, en misión en Sarajevo, 1993. Su objetivo es, simplemente, documentar las atrocidades que se están cometiendo. Sin embargo, cuando le capturan junto a su mentor Maddox, el riesgo de un incidente internacional de calibre le empuja a actuar.

Cuando Anderson consigue escapar de su celda de captura recibe instrucciones e información sobre cómo progresar, de una forma que parece seguir durante todo el juego. Vas recibiendo objetivos sobre la marcha, y para cada uno puedes elegir diversas formas de actuación. La regla de oro suele decir: muchos objetivos, esquívalos; un objetivo cercano y solitario, intenta matarlo rápida y silenciosamente. Un objetivo solitario y lejano: saca tu rifle de francotirador.

El productor Michal Sroczynski, de City Interactive, me confesó las ganas que tenían de implementar duelos de francotiradores con grandes distancias entre sí, lo que permitiría que entrara en acción su delicado sistema de balística. Viento, distancia y tiempo son los tres elementos que hay que considerar siempre que quieras alinear un disparo. En el modo fácil, un punto rojo aparecerá donde impactará la bala finalmente, pero en dificultades más altas está en tu mano estimar cómo afectarán las condiciones a tu disparo.

Lo que ocurre después es un extraño y edificante soplo de aire fresco. Pregunto al productor sobre la historia, ¿por qué está Colin en Sarajevo? La corta y rápida respuesta de Sroczynski describe muy bien toda la estructura narrativa del juego en un minuto. Me quedé con la boca abierta.

"Quizás ya he dicho demasiado", confiesa Michal Sroczynski.

"Sí, probablemente", le contesto. "Casi me lo has contado todo".

"¿Sabes?, soy un simple desarrollador de Warsaw, me dicen que venga aquí y hable del juego, pero quizás es mejor que no escribas todo eso", continúa Michal Sroczynski.

"Creo que yo tendría tantos problemas con mis lectores como tú", intento suavizar las cosas terminando el torpe intercambio de frases con una nota positiva.

Aquí, los 'spoilers' no se pueden tomar a la ligera. Lo que yo escuché no es algo de lo que quieras saber demasiado hasta que salga el juego y te pongas a jugar. No había nadie de relaciones públicas en la sala, así que fue el tipo de ambiente relajado que cualquier periodista querría encontrar en una oportunidad de demostración/prueba de un juego. Pero es cierto que demasiada información puede ser algo terrible.

Lo que puedo revelar es que Sniper: Ghost Warrior 2 esconde un arco narrativo muy bien construido, que al menos tiene potencial suficiente como para contar una historia realmente interesante. Y que también sabe mantenerse en el terreno personal, alejado de la política y de los grandes conflictos pese a comenzar el juego en medio de la guerra de la antigua Yugoslavia.

A continuación, echo unas partidas por mi cuenta. Es una misión en la que Anderson se encuentra en la jungla contemporánea de las Filipinas. Con la visión térmica puedes disfrutar de las (maravillosas) vistas, aunque también hay que tener un ojo en la batería, pues dura poco y requiere recarga. Con la ayuda de un personaje observador que me acompaña, voy derribando algunos matones y traficantes de armas, recogiendo información confidencial por el camino. Avanzas muy despacio, y luego hace falta una buena dosis de paciencia para alinear los disparos perfectos. En un instante puedo saber dónde se encuentra un segundo enemigo al otro lado de un cobertizo, mediante las gafas especiales. Realizo el 'double kill' y continúa nuestra caminata por la jungla.

Lo que resulta interesante en un juego como este, que se podría convertir en una especie de galería de tiro si sigues las reglas a rajatabla, es cuando te sales un poco de la norma. ¿Qué ocurre si disparo a este tipo e ignoro el consejo de mi observador? ¿Y si me cargo al de la izquierda y no al de la derecha? ¿Pruebo a atinar a la granada de mano de ese otro?

Sin duda, existe un mercado ahí fuera para un juego dedicado a los francotiradores. La cuestión es si City Interactive conseguirá un juego considerablemente superior al primero.